Información General Esteban Soldano 06 de marzo de 2021

Así se construye una ciudad desde cero

La ciudad es quizás la máxima manifestación cultural del hombre a la largo de la historia, un ser vivo permanentemente cambiando para alojar los cambios de vida de una sociedad donde coexisten distintos mundos, saturada y cargada de un pasado con el que se busca encausar un futuro mejor, en el que puedan convivir sus habitantes de una manera más inteligente.

FOTO INTERNET CIUDAD-ISLA. La ordenada ciudad de Lusail.
En un tiempo donde todo parece ser posible, los países del primer mundo proponen algo que no siempre funciona pero al que hay que dar crédito en su intento como es el de terminar con los problemas de las más populosas ciudades creando nuevas realizaciones que el tiempo dirá el grado de acierto o no que se logró con la aventura de construir una ciudad desde cero.
Una quinta parte de los más de 7.000 millones de personas que pueblan la tierra vive en China. Junto a los habitantes de India, suman más de un tercio de la población mundial. Los lugares en donde más se nota esta superpoblación son, sin duda, las ciudades, en las que ya habita más del 50% de esa cifra. Abarrotadas y con problemas de circulación y contaminación, numerosas urbes de todo el mundo presentan dificultades para seguir acogiendo un número creciente de habitantes.
Y el problema parece no terminar aquí. Las previsiones señalan que en 2050 la cifra de habitantes aumentará hasta casi los 10.000 millones de personas, y que dos de cada tres vivirán en una ciudad. Como solución, están emergiendo nuevas localidades cerca de las grandes urbes. No son solo una forma de liberar a sus vecinas: suponen también una perfecta oportunidad para pensar y diseñar ciudades inteligentes.

Ciudades con una funcionalidad clara
Aligerar el tráfico, reducir la contaminación y asegurar calidad de vida para sus habitantes son los principales motivos que llevan a la creación de estas nuevas urbes. Su planificación (y posterior construcción) plantea numerosos retos: implica convertir territorio rural en urbano, crear kilómetros de nuevas infraestructuras y diseñar núcleos eficientes dotados de servicios básicos, como hospitales y colegios. Pero donde hay desafíos, hay oportunidades. Dibujar una nueva ciudad sobre un plano permite evitar los errores del pasado y adaptarla a las necesidades del futuro. Uno de los primeros objetivos es garantizar urbes sostenibles y seguras. Una vez esto está cubierto, llega el momento de dotar estas ciudades de inteligencia.

Lusail, el futuro de Qatar lo marca el fútbol
En 2022, millones de ojos estarán pendientes de lo que ocurra en Qatar. La competición mundial más importante de fútbol tendrá lugar allí y sus gobernantes no quieren perder ocasión de presentarse como un país moderno y lleno de atractivos para todos aquellos que están buscando un nuevo destino para viajar o vivir. Para lograrlo no han dudado en comenzar a planificar Lusail desde cero.
Situada a 15 km de la capital, Doham, la ciudad que acogerá la inauguración y la final del torneo, se extenderá sobre 38 km² que incluirán cuatro exclusivas islas y 19 distritos residenciales. Las cifras que manejan sus promotores hablan de una capacidad para 200.000 residentes, 170.000 empleados y 80.000 visitantes.
Junto a las zonas residenciales, está planificada la construcción de dos puertos deportivos, centros comerciales, parques temáticos, dos campos de golf, 12 hoteles de cinco estrellas, un estadio de fútbol diseñado por Normar Foster y un largo etcétera, para lo que se prevé una inversión final de aproximadamente 45.000 millones de dólares. Parte de esa cifra recae en las infraestructuras de telecomunicaciones y de transporte de una ciudad que quiere ser emblema de modernidad, innovación y sostenibilidad. En nuestra próxima entrega les presentaremos nuevas realizaciones de ciudades emergentes de países desarrollados, seguramente muchos se preguntarán si adelantarse al futuro es el camino a seguir, o tan solo, un salto al vacío.