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Suplemento Economía Domingo 22 de Julio de 2012

El 16,6% de créditos otorgados en Santa Fe fueron a la industria

En una radiografía al sistema financiero, se afirma que el sistema financiero concedió préstamos por 21.634 millones de pesos en la Provincia hasta el tercer trimestre del año. De esa cantidad, 3.588 millones se destinaron a la industria manufacturera.

Redacción

Por Redacción

En un documento titulado "Reseña del Sistema Financiero Argentino: Línea de Créditos para la Inversión Productiva", la Federación Industrial de Santa Fe (FISFE) efectuó un profundo análisis a los números que manejan los bancos en materia de depósitos, préstamos, tasas y rentabilidad. El estudio fue realizado por el Instituto de Investigaciones Económicas de la entidad, que está a cargo de Gabriel Frontons. 

La FISFE, cuyo presidente es Carlos Bertone, y el director Ejecutivo es Esteban Moine, destacó la importancia de promover el crédito para financiar la matriz productiva. A continuación lo más importante del informe.

El crédito es una herramienta fundamental para el financiamiento de las actividades productivas y el desarrollo económico y social. El mismo permite incrementar los niveles de capacidad potencial de producción, base fundamental del crecimiento a largo plazo de una economía.También es importante el crédito destinado a cubrir aquellos desfasajes temporales entre los flujos de ingresos y egresos de las unidades empresariales, en muchos casos generados por sus propias características tecno-productivas. En tal sentido, la nueva Carta Orgánica del Banco Central (Ley 26.739) plantea entre sus funciones y facultades la de "regular las tasas de interés y regular y orientar el crédito".

Más allá de los niveles razonables de autofinanciación de las empresas a través de la reinversión de utilidades y el aporte de los propios recursos, el crédito originado en el sistema financiero y canalizado hacia los sectores de la producción adquiere singular trascendencia a fin de complementar aquellos recursos y viabilizar mayores proyectos de expansión. Además, resulta valioso que el sistema financiero cuente con ciertos criterios anti-crisis que coadyuven a la recuperación económica y eviten comportamientos pro-cíclicos que acentúan las etapas recesivas.

En nuestro país resultan numerosas y conocidas las demandas de más y mejor financiamiento por parte del sector productivo. La Unión Industrial Argentina (UIA), la Fundación Observatorio Pyme, la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA) y la Federación Industrial de Santa Fe, entre otras instituciones, cuentan con sobradas manifestaciones y expresiones documentadas de los constantes requerimientos de financiamiento, especialmente de las pequeñas y medianas unidades económicas.

Desde el año 2003 el proceso de reindustrialización presente en la economía argentina -y en la Provincia de Santa Fe en particular-, no resultó totalmente acompañado por el sistema financiero, siendo una constante el mayoritario autofinanciamiento empresarial de las inversiones fabriles concretadas. A raíz de los recientes anuncios tendientes a promover el financiamiento bancario de las pequeñas y medinas empresas, en los siguientes párrafos se presenta un breve análisis respecto del sistema financiero argentino y su interacción con el mundo de la producción.

Al mes de abril de 2012 el total de activos del conjunto de bancos privados ascendió a 393.000 millones de pesos, el pasivo a 346.000 millones (de los cuales el 69% -238.000 millones-,corresponde a depósitos del sector privado), y el patrimonio neto alcanzó los 47.000 millones.

Los préstamos otorgados por el conjunto de bancos privados al sector privado de la economía (alrededor de 200.000 millones de pesos) representaron algo más del 50% del total de sus activos (393.000 millones de pesos), significando los rubros ‘disponibilidades’ y ‘títulos públicos’ otro 32% del total de recursos.

El indicador de liquidez amplia del sistema financiero (en moneda nacional y extranjera, que incluye las tenencias de Lebac y Nobac) alcanza valores elevados de hasta el 41% de los depósitos, mientras que el ratio activos líquidos respecto de pasivos líquidos asciende a valores cercanos a 30% en bancos privados pero a 18% en bancos públicos.

El financiamiento otorgado al sector privado presenta una evolución positiva especialmente a partir del año 2003 cuando el sector público reduce significativamente su incidencia relativa sobre el total de préstamos. A fines de 2002 ambos sectores representaban el 21% del total de los activos del conjunto de bancos privados, lo cual muestra el elevado nivel de endeudamiento del sector público y la profunda crisis del sector privado.

Desde entonces, los menores niveles de financiamiento tomados por el Estado y el crecimiento económico aceleraron fuertemente el peso relativo del sector privado en el total del financiamiento bancario. No obstante, los actuales niveles (51% de los activos) se evalúan insuficientes y factibles de ser incrementados (dadas las actuales exigencias de integración de liquidez) favoreciendo la inversión y la actividad productiva.

Al mes de abril de 2012, del total del financiamiento otorgado por el sistema financiero al sector privado (308.000 millones), el 35% (107.000 millones) proviene de bancos públicos (dentro de los cuales sobresalen el Banco de la Nación Argentina, el Banco de la Provincia de Buenos Aires y el Banco Ciudad de Buenos Aires), siendo el 65% restante (es decir, 201.000 millones) originado en la banca privada.

Se estima que del total del crédito al sector privado aproximadamente el 56% se encuentra en manos de empresas, mientras que el 44% corresponde a familias siendo destinado especialmente a financiar gastos de consumo. Al mes de mayo de 2012 el financiamiento al sector privado ascendía a 312.345 millones de pesos.

Las modalidades predominantes del crédito no se direccionan mayoritariamente al financiamiento de la inversión productiva de largo aliento asociadas generalmente a préstamos hipotecarios y prendarios tomados por empresas.

Desde el punto de vista de las actividades económicas, al primer trimestre de 2012 el total de los préstamos del sistema financiero se encontraba asignado de la siguiente manera:

• 33,5% a personas físicas en relación de dependencia laboral;

• 24,5% a servicios;

• 15,8% a la industria manufacturera;

• 12,3% a la producción primaria;

• 6,7% al comercio;

• 2,6% a la construcción;

• 2% ala explotación de minas y canteras y

• 1,4% correspondía a electricidad, gas y agua.


TASAS DE INTERES

En mayo de 2012 las tasas de interés -promedio- para préstamos al sector privado -informadas por el Banco Central- ascendieron a 17,1% para hipotecarios, 18,7% para documentos a sola firma, 21% para adelantos en cuenta corriente, 22,5% para prendarios, 34,7% para personales y 34,9% para tarjetas de crédito. Los valores máximos informados para tales tasas superan largamente los valores medios.

Según Banco Central al mes de mayo de 2012 las tasas de interés por depósitos en caja de ahorro común ascendieron a 0,27% anual, y a 11,1% anual para depósitos en plazo fijo en pesos. De esta manera, los spreads de tasas de interés por operaciones en pesos (diferencia entre tasas activas y el costo de los depósitos) fueron aproximadamente de 27% en préstamos personales y tarjetas, 17% en prendarios, 14% en adelantos, 11% en documentos y 9% en préstamos hipotecarios.

El sistema financiero presenta niveles de rentabilidad positiva ininterrumpida a partir del año 2005. Desde entonces y hasta 2011 la rentabilidad promedio anual alcanza el 16,4% respecto del patrimonio neto (luego del impuesto a las ganancias). En 2011 la rentabilidad del sistema financiero -neta del impuesto a las ganancias- alcanzó la cifra récord de 14.700 millones de pesos, es decir, un 25,3% respecto del patrimonio neto, y un 2,7% del total de activos. En los últimos doces meses la rentabilidad alcanzó el 38% del patrimonio neto (antes del impuesto a las ganancias), y al 25,6% neto del impuestos a las ganancias. Además, el margen financiero (ingresos menos egresos financieros) se ubica en el 8,2% del activo. En el mes de abril de 2012 el resultado global del sistema financiero arrojo utilidades por 1.327 millones de pesos.

Hacia fines de 2002 la cartera irregular en bancos privados superaba el 19%, descendiendo paulatinamente a menos de 3% ya en el año 2006, y a menos de 2% desde fines de 2010 y hasta la actualidad. En abril de 2012 el nivel de irregularidad de la cartera de créditos al sector privado se ubica en 1,6%, siendo las empresas las que presentan la menor morosidad (0,9% respecto del total de financiaciones).

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