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Hábitat Viernes 4 de Octubre de 2024

Ping Pong D5

Samanta Liz Forni participó del Ping Pong de preguntas del CAUD 5.

Samanta Liz Forni se recibió en 2016 como arquitecta en la Universidad Católica de Santa Fe, y a los dos años empezó con un emprendimiento de reciclado de muebles. Una frase que la define como arquitecta es : mantener la esencia. Lo aplica diariamente en su taller, dándole nueva vida a los muebles y también en sus obras en donde siempre busca resguardar algún detalle puntual que aporte sentido de entidad.

- ¿Qué te llevó a combinar la arquitectura con la restauración de muebles?

Al principio me costó combinar la arquitectura con la restauración de muebles porque le dediqué mucho tiempo más a la restauración, necesitaba muchas horas para estar en el taller, para iniciar con este emprendimiento.

Noté en la pandemia esa fusión más clara de la arquitectura con el reciclado de los muebles, cuando empecé a recibir un montón de mensajes de la gente que me decía: “che, este espacio no me gusta más, me aburre, necesito cambiarlo, tengo tres muebles, los quiero pintar de blanco, pero la pared era blanca…” Entonces ahí me metía yo diciendo: “bueno, ¿Qué estás queriendo lograr con este espacio? ¿Por qué los tres muebles blancos?”, ahí entraba un poco más en el interiorismo y de esa forma aplicaba mi conocimiento como arquitecta, influenciada directamente en el enfoque del reciclado de muebles.

- ¿La pasión por la arquitectura la heredaste o te conquistó?

El gusto por la arquitectura empieza cuando era muy chiquita, somos una familia numerosa, mis papás son muy emprendedores y viví muchas remodelaciones, eso me asombró desde un principio… Ver cómo los espacios se transformaban, cómo eran muy dinámicos en base a las necesidades que teníamos. De hecho hoy me gustan mucho más las remodelaciones.

- Primera anécdota que se te viene a la cabeza de cuando empezaste a ejercer.

Cuando empecé a ejercer, empezamos con un amigo con el que terminé la facu y recibimos una remodelación. Los clientes se fueron a Santa Fe a comprar revestimientos, en la colocación faltó una caja, así que viajamos nosotros dos a Santa Fe a comprar una caja de revestimientos de la misma partida que los clientes habían comprado. Carísimo nos salió…

- ¿El desafío profesional más grande que tuviste hasta hoy?

Mi casa, mi casa propia. De hecho tengo el boceto acá, uno de los bocetos ya casi finales. Me llevó mucho tiempo, como dos años… Yo creo que el que lo ve de afuera dice “bueno vos sos arquitecto, seguramente te va a llevar mucho menos tiempo” y nada que ver. Creo que tenemos tanta tendencia, tanta última cosa que se usa, tanta materialidad, tanto estilo que es difícil a la hora de decidir encasillarse por algo y cerrar ahí, digamos. Así que bueno, fue un lindo desafío.

- ¿Lo que más disfrutás de esta profesión?

Lo que más disfruto es el dinamismo. Hoy es una ampliación, mañana es una fachada, pasado es interiorismo y la semana que viene una obra nueva.

- ¿Lo que menos te gusta?

Lo que menos me gusta es la falta de compromiso que muchas veces nos excede y termina retrasando los plazos.

- ¿Una producción que amás?

Yo creo que siempre lo último es a lo que uno más cariño le tiene. Creo que con el correr del tiempo cada proyecto te brinda más experiencia, entonces en lo último nos vemos con mucha más experiencia que en el proyecto anterior y eso es lo que más se disfruta.

- ¿Un profesional que admires?

Gaudí, sin duda. Una mente delirante y brillante.

- ¿En el trabajo sos? Complete la frase…

En el trabajo soy detallista, MUY.

- ¿Un proyecto propio que te llevas para siempre en el corazón?

Un proyecto que me llevo en el corazón, más relacionado con el taller de muebles, es un proyecto que nos llevó de una empresa de medicina privada. Nos tuvimos que asociar con dos colegas más y tuvimos dos ayudantes, éramos cinco trabajando en este proyecto. Eran muchos muebles, muy grandes, muy tallados de fines de 1800, principios de 1900. Fueron dos meses de trabajo y el proyecto terminaba yendo nosotros a Buenos Aires a instalarlos en un edificio de oficinas antiquísimo que acompañaba muy bien el estilo de los muebles. Así que fue un desafío hermoso.

- ¿Un sueño por cumplir?

Mis sueños siempre se relacionan con los viajes. Soy muy afortunada de conocer arquitectura viajando y uno de mis sueños sería conocer el Taj Mahal.

- ¿Qué consejo le darías a alguien que quiere comenzar en el mundo de la restauración o la arquitectura?

El consejo que le daría, sea restauración, arquitectura o cualquier emprendimiento, negocio, oficio, es que sea comprometido, constante y que se escuche, si hay una vocecita que les dice “es por acá” que accionen.

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