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Editorial Martes 25 de Enero de 2011

Los accidentes de 2010

Según informe oficial del área Ingeniería de Tránsito del municipio, durante el año pasado se registraron 773 accidentes en las calles de la ciudad.

Redacción

Por Redacción



La nuestra es una ciudad complicada en materia de tránsito, como la mayoría de aquellas en las cuales se ha registrado un importante incremento de la cantidad de vehículos circulando, pero con escenarios en los cuales las características son similares, o muy parecidos, a los que había varias décadas atrás. Es por esa razón que, durante el transcurso de 2010, se registraron aquí 773 accidentes, de acuerdo a un informe oficial difundido recientemente por el área de la Dirección de Tránsito del municipio.
Las motocicletas se llevan la mayor proporcionalidad de los siniestros, pues en total explican nada menos que 588 de los 773 accidentes ocurridos, con distintas formas de participación. La mayor es entre autos y motos con un total de 413, en tanto que entre motos fueron 56, motos como exclusivas protagonistas 61, entre camiones y motos 10, motos y peatones 15 y uno entre moto y colectivo.
Tenemos entonces que nada menos que el 76% de los accidentes que ocurren en la ciudad tienen al menos a una motocicleta como participante del mismo, razón por la cual se hace imperioso, si en materia de tránsito aspiramos a alcanzar un mayor ordenamiento, focalizar en ese sector los mayores niveles de prevención. Es que en la ciudad, según los patentamientos, tenemos alrededor de 40.000 motocicletas, lo cual es una cantidad más que suficiente para registrar allí una mezcla muy grande, tanto en lo que hace al estado mecánico de las unidades, como al nivel de responsabilidad de los conductores. Bien podría aplicarse aquí el dicho "hay de todo, como en botica", y no estaría alejado de la realidad, sino que con cierta presición, estaría muy cerca de la realidad.
No es necesario profundizar en exceso para tener comprobación de lo que ocurre en nuestras calles con el tránsito, y de manera especial con las motocicletas. Excesos de velocidad, indebidos estacionamientos, escaso respeto de cumplimientos en las líneas de circulación y avance para superar a otros vehículos, y además, la más grave de las faltas como es no respetar lo indicado por los semáforos.
Recientemente se han incorporado nuevos núcleos de semaforización en ciertas arterias de la ciudad, especialmente en el bulevar Guillermo Lehmann, que era señalado como uno de los más peligrosos y por lo tanto escenario de reiterados accidentes, lo cual ha contribuído para reducir la siniestralidad. Aunque, de todos modos, debido al alto nivel de transgresión de los conductores -de toda clase de vehículos, aun cuando en tal sentido prevalecen los ciclistas- sólo con semáforos no se soluciona el problema, aun cuando comience a encarrilarse. Un caso muy preciso lo tenemos por ejemplo en el sector refuncionalizado de la ruta nacional 34, donde hubo una seguidilla de siniestros con camiones por protagonistas, que en muchos casos son quienes menos respetan las señales de los semáforos, provocando en consecuencia un estado de inseguridad muy grande al tener que cruzar esa carretera, incluso con la vía libre de la luz verde.
Ampliaciones sobre el informe de los accidentes dan cuenta que sobre ese total de 773 que se registraron, participaron de los mismos 1.669 personas con consecuencias, de las cuales 781 experimentaron lesiones leves, 131 lesiones graves, y lo que es aún peor, con saldo de 8 muertos. El resto, no experimentó lesiones, pero de todos modos se describe en base a estos datos una situación muy seria y comprometida, ya que además de los abollones y gastos de compostura, está de por medio la integridad física de la gente, lo cual supone inconvenientes mucho más graves.
Los fines de semana, lo cual se agudiza ahora en el verano por incrementarse las salidas, es cuando se registra la mayor cantidad de accidentes, anotándose los domingos con 142 y los sábados con 114 siniestros, los cuales tienen lugar en mayor medida durante horas de la tarde, ya que entre el mediodía y las 8 de la noche es cuando se produce la mitad del total de accidentes. En tanto que en la noche ocurre el 24% de los accidentes.
El tránsito continúa siendo una de las problemáticas de más difícil resolución, siendo una situación que si bien observa diferentes índices de gravedad, es común en toda la Argentina, y muy especialmente en ciudades donde la cantidad de vehículos es muy alta en relación con la cantidad de habitantes. Caso concreto como aquí en Rafaela, donde hay 30.000 automotores, 40.000 motocicletas y otro tanto de bicicletas, los que transforman toda la zona céntrica, los bulevares y avenidas, como así también zonas de acceso, en lugares de muy complicado movimiento vehicular, con alto riesgo de siniestralidad.

 

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