Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido
Editorial Viernes 19 de Octubre de 2012

Economía con freno

Los principales organismos mundiales coinciden en cuanto al freno que experimenta la economía global.

Redacción

Por Redacción

Los dos organismos financieros internacionales más conocidos e influyentes, el FMI y el Banco Mundial, a los que se agrega la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) coinciden en sus análisis respecto a la economía global, la cual como consecuencia de los fuertes y pronunciados remezones que viene experimentando, tendrá un mayor debilitamiento en los próximos trimestres.

El Banco Mundial, al difundir uno de sus informes, le apuntó a China, segunda economía del mundo, que desde 2007 viene siendo la que mayor tracción ejerció para arrastrar al resto, aunque su expansión será finalmente este año de 7,7% con 1,5 punto de caída respecto al 9,3% de 2011. Aun cuando se está hablando de un crecimiento importante, igualmente se trató de uno de los pronósticos más preocupantes por el fuerte impacto que tiene en el resto, pues cayendo China cae también su consumo y simultáneamente se verán resentidas las compras al mundo. Todo lo que no sea alimento, seguramente experimentará restricciones en cuanto al volumen exportable a la potencia asiática, una puntualización que por cierto no afectaría en gran medida a nuestro país, gran exportador agroalimentario, si bien debe hacerse la salvedad, que en un tiempo de mayor estrechez económica, es probable un impacto negativo en el precio de la soja y sus subproductos.

Por su parte la OCDE, una organización que tiene como miembros a los países desarrollados -muchos de los cuales vienen siendo duramente castigados por esta extendida crisis- vaticinó que la mayoría de las principales economías del planeta continuarán debilitándose en los próximos trimestres, no visualizándose todavía un tiempo estimativo para frenar este descenso y comenzar a desandar el camino en sentido inverso.

Por su parte el FMI advirtió que la incertidumbre política tiene un fuerte impacto negativo en la baja del crecimiento económico, incluso a pesar de las iniciativas más recientes llevadas adelante por los bancos centrales, entre las que figuró el programa de compra de deuda del Banco Central Europeo y también el plan de expansión de compra de activos por parte del Banco de Japón.

Tres aspectos que resultan centrales para el FMI, son la crisis de deuda de la eurozona, la deuda estadounidense y la ralentización de las economías emergentes. Europa, de acuerdo con esas estimaciones difundidas, continúa siendo el epicentro de la crisis y donde se necesita actuar con la mayor urgencia, razón por la cual se urgió a los líderes europeos para que cumplan sus compromisos, entre los cuales se cuentan el mecanismo unitario de supervisión bancaria, la recapitalización directa de los bancos y la implementación del Mecanismo Europeo de Estabilidad, el que comenzó a funcionar la semana anterior.

Justamente sobre ese nuevo fondo, en el cual se ha depositado no sólo confianza  sino la esperanza de poder revertir los efectos de la dura crisis, puede decirse que las decisiones serán adoptadas por un consejo de gobierno integrado por los ministros de finanzas de los 17 países que integran la eurozona, existiendo firme convicción en afrontar todos los riesgos en forma consolidada. La sede se encuentra en Luxemburgo y cuenta con un volumen de 500.000 millones de euros en concepto de ayuda a los países que se encuentren en dificultades, quienes deberán ajustarse estrictamente al cumplimiento de las medidas que se le impongan, como contrapartida del salvataje. El objetivo que se persigue es que todos comiencen a actuar al unísono, obviando de tal manera decisiones individuales que tanto perjuicio le han causado al grupo en su conjunto.

Respecto a Estados Unidos, la mayor potencia económica mundial, el FMI lo ubica como un escenario de riesgo, ya que debería ajustar su déficit en al menos 4 puntos, razón por la cual se lo urgió a evitar el abismo fiscal, reduciendo su deuda  en forma gradual hacia el mediano plazo. Una posibilidad que dificilmente pueda concretarse, de modo especial en este breve período que resta para las elecciones presidenciales del 6 de noviembre, ocasión en que Barack Obama busca la continuidad en la Casa Blanca, necesitando de más distribución en la búsqueda de una recuperación que amagó varias veces, pero que siempre volvió a detenerse.

Seguí a Diario La Opinión de Rafaela en google newa

Los comentarios de este artículo se encuentran deshabilitados.

Te puede interesar

Teclas de acceso