Por Redacción
A los reclamos por el "restablecimiento de los servicios y una adecuada prestación del derecho a la salud de los adultos mayores de la amplia región del PAMI IX - Rosario", que realizara a principios de junio el senador nacional Rubén Giustiniani (FAP), se suman ahora nuevos reclamos por parte del diputado nacional Fabián Peralta, también del FAP.
A principios de junio en Rosario, el Foro de Tercera Edad, además de distintos centros de jubilados del sur provincial habían denunciado un «vaciamiento» de los efectores propios del PAMI. A ese reclamo se sumó Giustiniani, reiterando el pedido de "normalización del PAMI, que cumplió 41 años de vida pero 37 estuvo intervenido, y la gestión por parte de «sus verdaderos dueños: los jubilados y pensionados»" citaba el comunicado del senador nacional.
Por si fuera poco, el 30 de julio último, desde ATE Rosario denunciaron una «situación alarmante» por el vaciamiento de los policlínicos Pami I y II. Desde el gremio advirtieron que en lo que va del año se perdieron 20.000 afiliados que se van a la prestación privada, y que se están cerrando sectores de internación por falta de enfermeros. No todo termina allí, ya que UPCN dispuso un paro en la atención en PAMI I y II que se materializó el martes 31 de julio.
CARTA DE PERALTA
El diputado nacional Fabián Peralta (FAP), envió una carta a esta Redacción, que bajo el título "¿Cuál es la política para el PAMI?", reproducimos en sus partes esenciales.
"Después de varios días de conflicto (por el paro), los trabajadores del PAMI y las autoridades nacionales llegaron a un acuerdo por el cual se comprometieron a no realizar despidos, a realizar reformas edilicias, incorporar personal de enfermería y mucamas y a la reapertura de la guardia.
"Sin embargo, hay medidas que no quedaron del todo claras. No queda claro qué pasará con los 20.000 abuelos que fueron derivados a efectores privados y que antes se atendían en los (policlínicos) PAMI I y PAMI II. Entendemos que deben volver a los efectores públicos donde reciben una atención dedicada por parte de los trabajadores y cuerpo profesional y donde se han atendido durante años".
Sobre cuáles son los argumentos para que los afiliados vuelvan a los efectores públicos, Peralta señaló que "Si se van a reformar los edificios y mantener personal, no entiendo cuál sería la razón para que esos 20.000 afiliados no vuelvan a ser atendidos en los PAMI. Además, acá el primer objetivo es la excelencia en la atención y eso está claro que lo garantizan con mayor efectividad los del Estado".
Otro punto que presenta dudas para el Diputado de la Nación es el de las atenciones "desmanteladas": el servicio de UDE, el de oftalmología y el de psicología. "¿Qué va a pasar con esas áreas?", se preguntó Peralta.
Por último, el legislador nacional indicó que: "No hay que perder el objetivo principal de todo el sistema que es lograr una mejor atención y un mejor servicio de salud para el abuelo. Siempre una atención desde el Estado nos aparta de la comercialización de la salud. La única certeza para mejorar el servicio sin que medie el dinero es a través del Estado, y ese es el criterio que queremos para el PAMI".
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