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Suplemento Economía Domingo 10 de Noviembre de 2013

RSE y las empresas

La RSE es la oportunidad para que las empresas puedan hacer mejor las cosas.

Fernando Solari

Por Fernando Solari

Queda claro que la RSE (Responsabilidad Social Empresaria)

tiene relación directa con las empresas; ya que así lo indica su

nombre, pero quizás todavía sea necesario poner en foco

denominación con acción.

Si la RSE no tuviera como actor fundamental a la empresa

debería, por lo pronto, cambiar su denominación.

Cosa que de hecho

ocurre con frecuencia ya que hay actores en la comunidad -entre

los que se encuentran empresas- que prefieren utilizar otras

denominaciones que las excluyen.

Sin dudas una de las características que marcó a la RSE desde

sus inicios es la atención que reclamó la forma de denominarla

cuyo resultado es la abundancia de maleza terminológica que, más

de una vez, impide ver el horizonte al que se aspira a llegar con

su implementación.


España invirtió cinco años para consensuar su opción entre RSE

y RSC; ya que el origen anglosajón del término era traducido como

Responsabilidad Social Corporativa.

La decisión quedó tomada cuando se puso en evidencia que, para

el castellano "Corporación" identifica a las grandes empresas.

La

dificultad de que las PyMEs se identifiquen con el término RSC lo

dejó de lado; aunque el mercado siguió su evolución natural y las

denominaciones siguieron multiplicándose.

Como suele ocurrir, lo importante no es el nombre sino lo que

este representa, lo que se hace con él y los resultados que

permite obtener.

Es en estos resultados donde la empresa, se llame como se llame

la RSE, no puede estar ausente. Son varias las razones por las que

esto debe ser así.


En primer lugar, porque la empresa va a necesitar que todas sus

acciones le permitan mantener rentabilidad. Esto no es una

reducción, es simplemente respetar su naturaleza.

Es el principio ineludible de la sostenibilidad empresaria. Las

empresas que dejan de ser rentables dejan de ser empresas. Con un

costo que no solo pagan sus líderes e inversores sino con

consecuencias que afectar a varios actores de la comunidad.

Rentabilidad es el premio al que aspiran las empresas cuando

hacen las cosas bien, cuando conquistan a un segmento del mercado

y cumplen sus promesas deleitando a sus clientes.

La ganancia suele estar regulada por el mercado; por las

regulaciones que fijan quienes no son empresarios, por la

competencia y por la comunidad en su conjunto.


Las estadísticas y la historia muestra que son infinitamente

más las empresas a las que les va mal y muy mal, desapareciendo,

que a las que les va bien y muy bien. Incluso las sobresalientes

no suelen durar demasiado tiempo en el mercado, y mucho menos

sostener su liderazgo.


MEJORAR ES LA CLAVE

Todo lo que hacen las empresas debe respetar su razón de ser y

su naturaleza, incluyendo la RSE, cualquiera sea la denominación

que se invoque.

Si no lo hace; si lo que hace es filantropía –en algún grado, o

en alguna de sus muchas versiones- estará haciendo algo que es

inapropiado para una empresa. Y los errores se pagan,

especialmente en el mundo empresario.


La empresa no puede, en realidad no debe, tener un costado

oscuro; llevar a cabo una actividad -por menor que sea- que deba

ser ocultada frente a cualquiera de las personas con las que se

relaciona -las que sumadas conforman a la comunidad-.

Si hiciera eso sería un error intentar desviar la atención con

acciones enmarcadas bajo la denominación RSE. El error fundamental

es porque solo dilataría el tiempo hasta que su conducta equívoca

sea detectada y rechazada por la comunidad.


Tampoco puede usar la RSE para tener una "cara amable" porque

la verdadera personalidad de la empresa no resistirá durante mucho

tiempo el maquillaje. Los primeros que lo notarán serán quienes se

acerquen a ella y su versión de los hechos se transmitirá como un

virus.


La RSE le sirve a la empresa por una cuestión vital. Porque

significa ayudar a la comunidad al tiempo que se ayuda a sí misma.

Por una cuestión estratégica; porque la diferencia brindándole

la oportunidad de conquistar un terreno que no puede ser atacado

por la competencia. Por una cuestión de valor; porque construye

valor para todos, incluyéndose, como corresponde. Por una cuestión

de naturaleza; porque la hace sostenible.

Las empresas no deben, porque no les conviene, hacer cosas

erradas; hacer algo que esté mal, en cualquier sentido. La RSE, o

como cada cual quiera denominarla, es la oportunidad -para las

empresas- de hacer las cosas mejor. Generando más y mejores

beneficios, para todos; en donde ellas -las empresas- deben estar

incluidas.

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