Por REDACCION
BUENOS AIRES, 31 (NA). - En medio del naufragio por la tormentosa caída electoral y las críticas a Mauricio Macri como el mariscal de la derrota, Juntos por el Cambio avanza inexorablemente hacia el "iceberg" de la desintegración.
Los primeros signos de la metamorfosis que se avecina en la que fue hasta ahora la principal coalición opositora pueden apreciarse en la Cámara de Diputados.
La situación del sector mayoritario del PRO, que hizo "saludo uno, saludo dos" a la decisión que entre gallos y medianoche y sin previa consulta tomaron Macri y Patricia Bullrich de apoyar a Javier Milei en el balotaje, es cada vez más insostenible dentro de Juntos por el Cambio.
Fuentes parlamentarias vinculadas al sector "paloma" del PRO explicaron el panorama en diálogo con NA: "Lo ideal sería que sigamos todos juntos, pero es cierto que este tema de Milei nos rompió la convivencia. Ya veníamos con diferencias sobre la forma de entender la construcción política pero de alguna manera la oposición al Gobierno nos aglutinaba. No sé qué va a pasar, pero la veo difícil", confesaron.
Los senadores de Juntos por el Cambio hicieron una foto de aparente unidad para transmitir calma en medio del vendaval, y lo mismo hicieron los gobernadores. Pero en Diputados son muchos más los actores que tienen que ponerse de acuerdo, y realmente no hay condiciones políticas para simular semejante puesta en escena.
Así las cosas, Juntos por el Cambio va camino a quebrarse, quedando de un lado entre 70 y 80 diputados nacionales de la UCR, Evolución, la Coalición Cívica y el ala blanda del PRO, que se referencia en el saliente jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta y en la ex gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal.
Del otro lado, unos 30 diputados del ala dura del PRO, sumado a figuras como José Luis Espert y Ricardo López Murphy.
Este último sector, en caso de que gane Milei en el balotaje, podría armar un interbloque con La Libertad Avanza, que tendrá 38 integrantes desde el 10 de diciembre, o bien mantenerse como bancada independiente pero en una alianza tácita con la derecha mileísta.
En las últimas horas, el sector macrista del PRO que lidera Cristian Ritondo en Diputados desactivó la difusión de un comunicado que iba a tener cerca de 30 firmas apoyando a Milei.
Para abortar la iniciativa, sopesaron que un pronunciamiento, institucional o no, iba a desatar más conflictividad puertas adentro de la que ya hay, con el riesgo incluso de acelerar la ruptura del bloque. Sin embargo, las diferencias son indisimulables y actúan como olla a presión.
Junto a Ritondo, iban a firmar, entre otros, Federico Angelini, Hernán Lombardi, Laura Rodríguez Machado, Fernando Iglesias, Soher el Sukaria, Francisco Sánchez, Pablo Tonelli y Pablo Torello. Vale la pena recordar que a algunos de ellos se les vence el mandato en diciembre y no renovaron banca.
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