En principio comentando estos antecedentes y luego contando sus inicios en la magia y en la vida también. Era un inmigrante húngaro que llegó a los cuatro años a Estados Unidos, cómo se adaptó y cómo se fue dando su vida en este país, cómo conoció los primeros circos que había de freaks o de curiosidades de la época y es ahí que empieza ya en su niñez a tomar contacto con la magia y también con cosas que fue aprendiendo desde chico como por ejemplo de un hombre que no tenía brazos a maniobrar las cosas con los pies, dicen que de un señor chino que regurgitaba cosas aprendió a tragarse una llave y luego sacarla por la garganta. En estos primeros años en el circo es que empieza a tomar contacto y que se forma su personalidad y a desarrollarse como el gran escapista que luego fue en su vida.
Después viene la etapa estratégica de Houdini que es venderse a sí mismo…
Exactamente. La verdad es que al principio empezó muy de abajo, haciendo trucos pequeños, tuvo un representante que fue quien lo activó y le dijo que en vez de cartas y dados, lo de él era el escapismo y tenía que dedicarse a eso. Efectivamente a raíz del escapismo empezó a explotar esa actividad y hacerse conocido en el mundo con diversos trucos publicitarios. Una de las cosas famosas que hizo fue llegar a cualquier ciudad del mundo y pedirle al jefe de policía que lo esposara de pies y manos y lo metiera en una celda en la prisión que pudiera ser más difícil escapar, y él efectivamente después de unos minutos lograba sacarse las esposas de manos y pies y salir de la prisión, que nadie sabía cómo lo hacía, pero lo lograba en muy pocos minutos y podía librarse de todas las cerraduras.
Otras excentricidades
Tuvo muchas, algunas anécdotas no se saben si son ciertas o no. Hay una que dice que un día estaba tomando un café con otro mago amigo que tenía que se llamaba Kellar y vio correr a mucha gente para un lugar. Le pregunta a uno de los que estaba corriendo adónde iban, le dice que había un choque muy importante de trenes, que no había víctimas pero que sí las locomotoras habían quedado una incrustada dentro de la otra. Se dice que Houdini corrió y corrió, me metió entre medio de las dos locomotoras y cuando llegó la prensa salió diciendo “Estoy bien, no me pasó nada” como apareciendo entre los metales todos doblados y haciendo como que realmente era inmortal y que podía sobrevivir a cualquier cosa, digamos. Otra que hacía para publicitarse y fue cierto es que cuando llegaba una ciudad contrataba a siete personas calvas y le ponía en la cabeza a cada uno una de las letras de su apellido, estas personas iban caminando y deambulando por la ciudad, cuando veían en el centro o en algún lugar un poco de gente, todos ordenados se quitaban el sombrero a la vez y bajaban la cabeza donde se leía H O U D I N I.
Qué se puede observar en la muestra
La exposición tiene varias cosas. Algunas imágenes que son poco conocidas de la vida de Houdini, varias de las que se ven en rigor no están en internet ni en ningún sector, o sea que están solo en la exposición. Hay uno de los trucos que de alguna forma dicen que lo llevó a la muerte que es cuando ponía el estómago muy duro y le pedía a la persona más forzuda del salón que le pegue. Se dice que a la edad de cincuenta y dos años, antes de entrar a uno de sus espectáculos, un estudiante que era fanático de él le pegó antes de que hubiese endurecido los músculos del abdomen. Se cree que él ya tenía una apendicitis pero que ese golpe se la agravó, y desencadenó su muerte con una peritonitis. En la exposición hay una imagen de Houdini con dos personalidades del boxeo que eran el campeón de peso pesado y el de peso liviano de la época haciendo como que le van a pegar como en el truco que él ofrecía.
Los objetos
No hay objetos personales de Harry, porque no quedaron muchos, y dicen que los que salieron a la subasta los adquirió todos David Copperfield para su museo de la magia que es una de las colecciones más importantes. Pero sí hay de otros magos que han actuado en el país, algunos que han sido famosos, un mago que era inglés pero que actuó y vivió en la Argentina que se llamaba Fu Manchú de nombre artístico, y él decía que era chino. Luego aparecen otros magos más recientes del siglo veinte, período en el que en Argentina la magia tuvo mucha importancia. Uno de ellos fue Alex Nebur, y un coleccionista que tiene varias piezas de él las prestó. Y se muestran varios juegos de magia que son de colecciones privadas.
La Fundación tiene proyección a la comunidad en sus actividades
Algunas de las muestras fueron a provincias y son itinerantes. En general son las más llamativas las que se llevan a otros lugares del país.
*El texto pertenece a la entrevista realizada por Raúl Vigini a Lucía Miranda
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