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Información General Martes 15 de Noviembre de 2022

“Retazos de navidad”: una comedia musical inolvidable y conmovedora

El domingo se vivieron dos funciones a sala llena, con un público emocionado que, entre lágrimas y risas, acompañó y disfrutó del espectáculo.

REDACCION

Por REDACCION

Por Fiorella Martina

A tan solo pocas semanas de navidad, el Teatro Lasserre se iluminó de luces rojas y verdes. El espíritu navideño, que ya se siente en la ciudad con la presencia de los adornos, los arbolitos y el pan dulce expuesto en las principales góndolas del supermercado, se hizo presente más que nunca el domingo, de la mano de los alumnos de VB comedia musical, disciplina que se realiza en el espacio Fit Club. Más que alumnos, podrían definirse como artistas, ya que brillaron en escena y fueron los protagonistas de una historia que tocó las fibras más íntimas del público generando risas y emoción.
No es sencillo provocar eso en las personas; que se diviertan, pero que al mismo tiempo reflexionen sobre un mensaje de vida, de amor y de paz, sentimientos tan necesarios en esta época del año. No es sencillo, pero tampoco imposible. Desde niños hasta adolescentes y adultos demostraron que la unión hace la fuerza y que, con algunos toques de magia, se puede avivar la llama de un corazón apagado.
La comedia musical se pudo apreciar en todas sus aristas y facetas; con un gran despliegue, los momentos de baile, de canto y de actuación fueron de las cosas más destacables. Las escenas íntimas y emotivas combinaron perfectamente con aquellas escenas más divertidas y cómicas. En función de esto, la elección de las canciones fue exacta y precisa para cada situación y también adaptada para los artistas. No solo eso, sino que también transmitían sensaciones y provocaban que el público las cantara hasta el final. Conocidas por todos, sonaron lentos como “El fantasma” del grupo musical Árbol; temas más movidos como “Fantasmas” de Miranda; algunos más actuales como los de Tini Stoessel y otros que permitían un viaje al pasado como “Pobres los ricos” de Floricienta, tan a tono con la historia…
El público aplaudía cada baile y coreaba cada canción. Participaron activamente del espectáculo, algo propio de la propuesta que habilitaba el acompañamiento de los presentes, para quienes las butacas no fueron un impedimento. Es importante destacar que las canciones variadas en tonos, estilos y épocas tienen que ver con un hallazgo teatral: la historia original fue transformada, en este caso, en una nueva versión con los rasgos característicos que destacan a “La perla del oeste” y con una marcada tendencia de lo nuevo y lo actual. Las redes sociales como Tik Tok con sus coreografías pegadizas, y Tinder con su típico sí o no para elegir al indicado, llegaron al público más joven. También fueron los recursos que las hadas de Santa Claus utilizaron para poder cumplir con su misión: abrir el corazón de Amelia.
Este personaje femenino, interpretado por Marina Laura, marcó el show de principio a fin. Su aparición al comienzo, al enterarse de la muerte de su padre, Rodolfo (dueño de Vouk telas por más de 40 años), provocó el rechazo de más de uno. Testaruda e iracunda como los villanos de las películas, odiaba el hecho de que su padre la hubiera abandonado y la llamada inoportuna que cambió su vida por completo. Licenciada, magíster y una profesional intachable se regocijaba de sus logros materiales delante de las empleadas del comercio e imponía las nuevas reglas ante las deudas que se había encontrado con tan solo pisar la ciudad. Lo que no sabía Amelia era que la esperaba un futuro solitario, con un pasado aún más triste y un presente caótico.
Por este motivo llegaron las hadas y las tres fantasmas elegidas para la misión. Con una participación notablemente femenina, las mujeres de esta obra se lucieron y brillaron ante el público. Gracias a ellas, Amelia fue soltando poco a poco su rigidez y mal temperamento. Las imágenes que volvieron a su mente la atormentaron y la hicieron darse cuenta de sus errores y de lo que ellos podrían ocasionarle. Uno de los mensajes más importantes de esta historia es que todo tiene remedio y solución, que, aunque a veces el paisaje sea oscuro, puede volver a pintarse de color.
La escenografía principal era el comercio Vouk Telas, el cual contaba con mesas altas, biombos, maniquíes e, infaltables, las telas que tanto gustaban a las clientas. El vestuario de las empleadas era una chaquetilla blanca y las hadas vestían polleras rojas; los fantasmas, túnicas plateadas y brillantes. Los más chicos resaltaban con las luces de neón y lucían su vestuario mientras saludaban a sus familiares en la platea. Los colores predominantes fueron el blanco y el rojo que brillaban sobre el escenario, bajo las luces.
Merece una mención aparte la calidad de sonido con micrófonos aptos para este tipo de espectáculos y el juego de luces que acompañaba cada escena. Tal como había adelantado para este medio la directora de Fit Club e impulsora de este proyecto, Virginia Borgna, detrás de estos shows hay esfuerzo, dedicación y trabajo para que el resultado sea lo que ayer sucedió: un momento de unión, encuentro y emoción, en donde el público logró experimentar y vivir una historia, con el placer que significa ver a su ser querido allí. Padres conmovidos, abuelos que saludaban a sus nietos, primos y sobrinos que festejaban y aplaudían… todos acompañando la pasión por la disciplina y felicitando el trabajo inmenso que realizaron a lo largo del año.
El show finalizó con canciones como “Todo lo que quiero para navidad eres tú” de Mariah Carey y “Volar mejor” de Chiquititas. "Soñar con todos, soñar, soñar con todos, soñar. Sentir a fondo, buscarme en vos. Formar bandanas ponernos alas. Juntos podemos volar mejor", dice el estribillo. El público se levantó de sus butacas y agitó los brazos de un lado al otro.
Por último, Virginia aprovechó el espacio para agradecer a todos los que formaron parte: staff docente, sonido e iluminación, productora y coordinadora y a los alumnos que, como bien dijo, “sin ellos esto no sería posible”. Con el telón todavía arriba, se abrazaron entre todos y gritaron a viva voz “Fit Club”, con el cual dieron cierre a un domingo con dos funciones agotadas, llenas de amor y de espíritu navideño que fue, sin dudas, contagioso.
Al salir, los familiares los recibían entre lágrimas de alegría y parecía que a ellos les quedó la sensación de cumplir con lo que se propusieron, con los objetivos y el aprendizaje. Podría decirse que esta fue la cereza del postre, lo único que faltaba para que los alumnos devenidos artistas cerraran esta maravillosa etapa de crecimiento.
Fit Club es un espacio integral, donde las disciplinas se abordan de una manera novedosa y necesaria para la ciudad. El amor y la dedicación de los alumnos demuestra que el trabajo es generoso y bien recompensado. VB comedia musical tiene las puertas más que abiertas para seguir creciendo, con el impulso, el talento y la pasión por lo que hacen. 

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