Por REDACCION
Las rutas de la provincia de Santa Fe, tanto sean las que dependen de la Provincia como las que son responsabilidad de la Nación, se encuentran en franco estado de deterioro en la mayoría de los casos, incluso con el agregado que en estos últimos años el enfoque no estuvo dado en la obra vial, sino que el diseño en grandes líneas de acción estuvo orientado hacia otras áreas, como la salud por ejemplo. Y ahora, en forma más reciente y por impulso de los acontecimientos que se sucedieron dentro de la provincia, hacia la seguridad.
En reciente número de la publicación Mirador Provincial, en una nota firmada por el periodista santafesino Néstor Fenoglio se pone el acento sobre esta problemática actual, generadora de reclamos desde todos los sectores y prácticamente la geografía completa de la bota santafesina. Sostiene en ese análisis el aludido que "mientras la gestión de Obeid se caracterizó y jactó de la cantidad de kilómetros de rutas construidas, Binner y Bonfatti eligieron otras inversiones. Y además, hay que decirlo, esas elecciones y miradas políticas, contenidas en las respectivas plataformas de gobierno, fueron votadas y aprobadas por la gente". Queda claro entonces, que aun cuando en la actualidad se formulen planteos muy concretos y puntuales respecto al estado que presenta la red caminera santafesina, como así también la escasa construcción de nuevos pavimentos realizados, es por lo que optó la gente al momento del voto, aun cuando así haya sido, puede tener también otras interpretaciones al momento de leer e interpretar la aspiración de los ciudadanos al momento de emitir su sufragio.
Es decir, y tal lo plantea el articulista "es muy probable que la gente no hila tan fino al momento de elegir propuestas electorales y mira candidatos en vez de plataformas", haciéndose luego hincapié en el escaso presupuesto otorgado a Vialidad Provincial, aun cuando las rutas de la provincia en la mayoría de las cosas presentan un estado de avanzado deterioro, puntualizándose que "ocho años -si contamos los dos gobiernos socialistas- con pocos kilómetros nuevos de ruta y donde se torna difícil el mantenimiento de los existentes. ¿El resultado?: trazas destruidas. El próximo gobierno deberá ocuparse centralmente de esta materia".
Por tratarse de un tema con el cual hemos coincidido desde siempre desde este Diario, es que tomamos esta base para desarrollar y comentar a nuestros propios lectores las miradas que tienen otros comunicadores, también enfocando en un problema que resulta muy demandante desde todos los sectores, tanto productivos como sociales. Es que, por un lado, la deficiente disponibilidad de carreteras confiables y en condiciones, dificultan el traslado de la producción de una provincia que depende en gran medida para sostener sus arcas de los recursos surgidos del sector, en tanto que la reiteración de accidentes que se dan en las rutas provinciales, provocando tragedias y destruyendo familias, casi siempre con la participación del mal estado de los caminos, es que los usuarios aparecen también en un álgido nivel de reclamaciones.
Este pedido es cada vez más sonoro y generalizado, encontrándose direccionado tanto a la Provincia como a la Nación, en este último caso con algunas rutas como la 34 por ejemplo, que hace tiempo tendrían que haberse transformado en autovías, tal como sucedió oportunamente con la 19. Es cierto que se están haciendo mejoras en la ruta 34 que atraviesa de sur a norte nuestra ciudad, y que serían con miras a dar comienzo a la obra de la autovía -justamente en esta primer tramo que va desde Angélica a Sunchales-, pero no es menos cierto que tantas veces se ha anunciado, que se tienen reparos ante lo que podría ser una nueva frustración.
En cuanto a la Provincia, en todos estos años se ha hecho poco y nada en materia caminera, pocas inversiones en nuevas realizaciones y muchas veces, ni siquiera lo mínimo para el mantenimiento de las rutas existentes, cuyo deterioro cada vez requerirá mayor inversión para cuando haya que recomponerlas.
"El panorama -concluye la nota en cuestión- es complejo no sólo ahora sino para el futuro, porque toda esa inversión que no se hizo (nacional y provincial) estará más expuesta aún en los próximos años y será un problema para la próxima gestión, cualquiera fuera su signo político o su relación con la Nación".
Los comentarios de este artículo se encuentran deshabilitados.