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Editorial Domingo 16 de Septiembre de 2012

La soja dependencia

Las retenciones al sector agropecuario le significarán al Gobierno un ingreso de 12.000 millones de dólares en 2013.

Redacción

Por Redacción

La semana anterior, desde esta misma sección editorial una de estas entregas fue titulada "Gracias soja!", analizándose la importante participación que tiene dentro de nuestra economía, y especialmente por el sostén que significa en momentos en que otros rubros flaquean. Hoy, frente a la divulgación de nuevos datos relacionados con el tema, volvemos a abordarlo, ya que además, la soja es un componente fortísimo para la economía de nuestra zona, y por lo tanto, seguida su evolución y comportamiento con gran interés.

Veamos algunos números. Este año, con una cosecha que tuvo inconvenientes, terminarán ingresando al país 19.800 millones de dólares por las exportaciones de todo el complejo oleaginoso -tanto el poroto, como aceites y harinas-, en tanto que para 2013 y con una mucho mejor cosecha por delante, esa cifra se elevaría a 25.500 millones de dólares, de acuerdo a las estimaciones que hacen los especialistas.

De tal manera, tanto por el aumento de tonelaje de la cosecha como por los mayores precios de los cereales, a las arcas fiscales en 2013 ingresarán unos 12.000 millones de dólares en concepto de retenciones, lo cual permitirá disponer de recursos necesarios para financiar todos los elementos que la industria requiere para su producción, afrontar el pago de las importaciones de energía, inyectar dinero a la economía y por sobre todo al consumo, debiéndose tener en cuenta que se trata de un año electoral, en el cual además, habrá vencimientos de deuda de montos lo suficientemente reducidos como para no provocar las alteraciones que hubo en este 2012. Como se advierte, el sector agropecuario, y muy especialmente la soja, serán el año que viene un aliado esencial del Gobierno para poder desarrollar sus estrategias, ya que le permitirá el alivio financiero que no tiene este año.

Frente a panorama tal, la pregunta que corresponde hacerse es ¿se levantará el cepo al dólar? Según las estimaciones de los economistas, y aún frente a un panorama mucho más benigno, las medidas no serán levantadas, aunque tal vez haya alguna clase de distensión hacia algunos sectores que resultaron los más perjudicados con las restricciones impuestas.

La soja dependencia resulta más que evidente ante tales perspectivas.

Crecen plazos fijos

El cepo sobre el dólar es causante de un sinnúmero de efectos. Uno de ellos es el crecimiento que han tenido los plazos fijos, ya que ahora la gente al carecer de la posibilidad de la compra de dólares, deposita sus ahorros dentro del sistema. En el pasado mes de agosto los plazos fijos crecieron 5,7%, a razón de 7.700 millones para totalizar 148.200 millones de pesos, de acuerdo con lo informado por el Banco Central de la República Argentina.

En contrapartida, en agosto también subieron los créditos al sector privado -lo hicieron a razón de 3,8%- , con un stock acumulado de 302.500 millones, significando un aumento de 11.000 millones de pesos, significando estos números que cada peso que ingresó al sistema financiero regresó en forma de préstamo, utilizando los bancos parte de su liquidez para incrementar el financiamiento.

Volviendo a los plazos fijos, la suba encuentra la mayor explicación en el sector corporativo, ya que las empresas no disponen de otras opciones para volcar su liquidez, ya que no sólo no se pueden trasladar a dólares -salvo recurrir al mercado paralelo con precios que oscilan en 6,50 pesos, pero además sólo con pequeñas sumas, que no es este caso-, ni tampoco girar utilidades al exterior. Ante este panorama sólo queda la opción de invertir en moneda local, siendo el plazo fijo una de las opciones de menor nivel de pérdida, ya que la tasa siempre es menor que la inflación.

Precisamente, con ese señalamiento, se debe convenir que en todos los casos, tanto por pequeñas, como medianas o grandes sumas en plazo fijo, las tasas a percibir son negativas. Incluso los plazo fijo mayoristas, que subieron 4 puntos en los últimos meses, se mantiene en 14%, bastante lejos de la inflación que los sectores privados ubican entre 23 y 25 por ciento. 

Una posibilidad que se menciona como alternativa al plazo fijo es la compra de bonos o del Cupón PBI, inversiones que este año están dando entre 30 y 40 por ciento. Claro, que se trata de alternativas para grandes ahorristas, y además, avezados en esta clase de operaciones financieras.

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