Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido
Editorial Martes 29 de Abril de 2014

Empuja el campo

La información oficial da cuenta que la actividad económica creció 1,3% en febrero pasado, merced al empuje del sector agropecuario.

REDACCION

Por REDACCION

En el segundo mes del presente año la actividad económica registró un crecimiento de 1,3% respecto a igual mes del año pasado, habiendo sido determinante el impulso dado por el sector agropecuario. De tal manera lo informó el INDEC, a través del Estimador Mensual de la Actividad Económica, indicador que en cambio no ofreció variantes para el mes de enero, dejando aclarado además el organismo oficial que estas mediciones se efectuaron con base de cálculos del censo económico de 2004 y no con el de 1993 como se lo vino haciendo hasta el año pasado.

Tal como decimos, el sector agropecuario resultó fundamental para el crecimiento en el mes de febrero, con una muy buena performance de la cosecha de trigo que ascendió a 9,2 millones de toneladas, bastante por encima de los 8 millones de la campaña inmediata anterior -que vale decirlo, fue una de las más bajas de los últimos años-, respondiendo estos datos al propio Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca. En cambio la cosecha de maíz con 29,8 millones de toneladas fue levemente inferior a la del año anterior cuando registró 32,1 millones. Pero en cambio el gran salto lo dio la soja, que en la anterior campaña había acumulado un volumen de 49,3 millones, en tanto que ahora se dispone de una proyección de 54 millones de toneladas.

Lo preocupante, es que aún habiendo crecido la economía, el intercambio registrado por la balanza comercial dejó un superávit de solamente 44 millones de dólares, marcando un enorme desequilibrio en la comparación con 2013 cuando el saldo favorable había alcanzado los 521 millones de la divisa estadounidense. En el lapso referido el volumen de las ventas al exterior decayó 6% en términos interanuales, para llegar a sumar 5.393 millones de dólares, en tanto que por el contrario las importaciones subieron 2% para quedar en 5.349 millones.

Las menores exportaciones estuvieron explicadas por una caída muy fuerte de los productos primarios, que se contrajeron 29%, en tanto que los precios también estuvieron en retroceso, en un 7% con relación a febrero de un año atrás. La combinación entre menos ventas y precios más bajos, resultó finalmente de muy duro impacto en el conteo final de la balanza comercial dejando ese magro superávit de 44 millones de "verdes".

Dejando atrás lo sucedido con el sector externo, pasemos entonces al mercado interno, sobre el cual el INDEC da cuenta que las ventas en los supermercados aumentaron este segundo mes del año un 30,5% en la comparación interanual. De todos modos, los 12.036 millones de pesos acumulados por esas ventas en febrero estuvieron 6,1% por debajo de lo recaudado en enero, el inmediato anterior.

Mientras tanto la actividad industrial experimentó una baja de 0,6% respecto a igual mes de 2013, con lo cual en el primer bimestre acumuló una retracción de 1,8%, habiendo impactado en la caída la producción de químicos, plásticos y caucho con 6,7%, todos los minerales vinculados a la construcción con 3,6%, mientras que la metalmecánica registró una caída de 3,9%. Aumentaron en cambio la producción de acero crudo con 17,3% y la refinación de petróleo con 0,9%, aunque lo más rescatable a la vez que esperanzador es que en febrero hubo un pequeño repunte en la fabricación de automotores con 0,2%, cifra que puede ser tomada como insignificante pero que interrumpe una tendencia adversa que se venía manifestando mucho más fuerte y que había sido principal causante del retroceso que viene teniendo la industria. Ahora en cambio, se puede tener confianza en que se produzca una reversión, aunque sin llegar a las condiciones de récords históricos de producción que se consiguieron en 2011, cuando la exportación -y especialmente a Brasil- se encontraba muy fluida.

En cambio donde el golpe en retroceso fue bastante fuerte fue en la construcción, otro componente muy importante de la economía, por el efecto movilizador que tiene la misma en numerosos rubros, además de la inversión que acapara el sector, ya que los ladrillos suelen ser tomados como atracción principal por aquellos que buscan defender sus ahorros de la erosión inflacionaria. En definitiva la construcción cayó en el mes de febrero 5,2%.

La perspectiva sobre el comportamiento de la actividad económica, habida cuenta que se mantiene la fuerte onda inflacionaria, resulta no sólo preocupante sino cargada de incertidumbre.

Seguí a Diario La Opinión de Rafaela en google newa

Los comentarios de este artículo se encuentran deshabilitados.

Te puede interesar

Teclas de acceso