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Editorial Domingo 17 de Febrero de 2019

Bandera, jubilados y niñez

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REDACCION

Por REDACCION

Además de no poder bajar la inflación y tener a más de la mitad de las empresas del país cerca de la zona de extinción, el Gobierno nacional incurre en contradicciones difíciles de tolerar por estas horas cuando asfixia con impuestos a todos los que puede y recorta gastos incluso sociales. Un caso concreto: el año pasado, las jubilaciones subieron 28,46% por lo que perdieron contra la inflación, que en 2018 fue la más alta en 27 años al llegar a 47,6%. ¿A ningún funcionario se le cae la cara de vergüenza por este indigno maltrato a los abuelos jubilados? Mientras tanto, de vez en cuando el Tesoro nacional echa mano de los fondos de la Anses para financiar el déficit público. Es decir, toma la plata del organismo que mal paga a los jubilados, que exigen una suerte de cláusula gatillo. 

En este clima de mal humor social evidente, la Casa Rosada amaneció el jueves con una enorme bandera colgada sobre su fachada alusiva al Día de los Enamorados (San Valentín), iniciativa que generó numerosas reacciones en las redes sociales, tanto a favor como en contra. 

Cada 14 de febrero se festeja en gran parte del mundo el Día de los Enamorados, en honor a un cura romano que luego fue santificado. Si bien en las redes sociales hubo manifestaciones a favor del banner instalado en la Rosada, también hubo muchos usuarios que cuestionaron la medida, al señalar que no corresponde el festejo de San Valentín en un edificio público y recordaron que esa celebración es significativa en países del exterior, como los Estados Unidos, pero carece de tradición en la Argentina.

También hubo críticas por el gasto que implicó para el erario público el diseño, confección e instalación de la gigantografía en momentos en que el país atraviesa una crisis. ¿Quién fue el genio que se le ocurrió hacer este cartel y qué otro genio aceptó pagar por ese trabajo? se preguntó un usuario en Twitter. "¿Esos genios nos gobiernan?" agregó sin disimular su malestar para luego exigir que el Gobierno debería identificar qué área y qué funcionario es el responsable de este gasto innecesario en tiempos de súper ajuste. 

El banner muestra una pintura estilo renacentista de 1884 del pintor inglés Frank Dicksee donde se recrea la escena de Romeo y Julieta besándose en el balcón. "La icónica pareja creada por William Shakespeare fue elegida para ocupar el frente de la Casa como símbolo del amor romántico. No hay investigaciones que prueben que se trata de la pareja más reconocida de la historia, pero el famoso crítico Harold Bloom definió a Romeo y Julieta como ´una obra sin par en la literatura mundial por su visión del amor mutuo implacable´", se explicó en la cuenta oficial de Facebook de la Rosada.

Con un poco más de humor, aparecieron los meses para reemplazar esa foto elegida por Casa Rosada para decorar el jueves el frente que da a Plaza de Mayo. Sobresalió aquella que muestran al ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, con la directora del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde en un saludo afectuoso. También hubo un diálogo imaginario entre un empleado público que le dice a un funcionario de mayor rango "Señor, nos gastamos los últimos pesos en el cartel de Romeo y Julieta" y recibe como respuesta "Se cancela el hospital, voy a decirle a los niños", todo acompañado por una escena de la popular serie animada de Los Simpson. 

El presidente Macri, días atrás, destacó como un gesto importante la decisión de emprender la gira por Asia a bordo de un avión de línea para ahorrar dineros públicos. Sin embargo, el Gobierno se contradice cuando lleva adelante una bandera de gran tamaño cuya impresión no insume un gasto menor, y que forma parte de una fiesta que no es tradicional de la cultura local sino que está más emparentada con una acción de marketing. Por tanto, un gasto absolutamente innecesario. 

En este marco, las jubilaciones registrarán un aumento de 11,83 por ciento en marzo, mientras que en junio subirán un 10,8 por ciento, tras perder casi 20 puntos contra la inflación el año pasado. Es decir que con estos ajustes recién en junio podrían estar en sintonía con lo que debían cobrar en diciembre para estar empatados con la inflación. Pero al mismo tiempo deberán soportar la inflación que se registre de enero a junio sin compensación alguna. Brillante política de pauperización de los jubilados argentinos. 

Por si esto no es suficiente, el diputado provincial santafesino, Jorge Henn, advirtió esta semana que el Poder Ejecutivo Nacional pretende aplicar un recorte de 9232 millones al presupuesto asignado por el Congreso Nacional a Niñez y Adolescencia. Una medida que, de avanzar, no repara en que en la Argentina el 48% de los niños son pobres según datos de Unicef. Tercera edad y minoridad afectados por el ajuste. ¿Algo más?







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