Por Redacción
El Clase C es el modelo más vendido de Mercedes-Benz en muchos países del mundo, y la Argentina no es la excepción. Ahora, la marca alemana lanzó en nuestro país la versión coupé C250, que amplía la familia C.
Se trata de un vehículo que combina un diseño elegante y deportivo con equipamiento premium y prestaciones sobresalientes.
Con un interior y confort muy parecidos a los del sedan, la carta fuerte de este modelo hay que buscarla en su carrocería.
Sin duda, el diseño de los Mercedes mejoró notablemente en los últimos años. Y la Clase C ganó en frescura. En este sentido, la coupé tiene excelentes proporciones. No importa desde donde se mire, el auto es bello en todos sus ángulos.
PRESTACIONES
La versión que llegó a nuestro país es la equipada con motor naftero 1.8 de 204 CV de potencia máxima con tecnología BlueEfficiency, que optimiza el uso de combustible y reduce las emisiones de CO2 (menos de 163 g/km).
El interior se destaca por la excelencia de sus materiales. El auto tiene cuatro plazas, y el acceso es razonablemente cómodo, y como toda coupé demanda cierta agilidad de los que entran o salen de las plazas traseras.
De acuerdo a La Nación, tiene el clásico cuadro de tres instrumentos circulares, mayor el del medio para velocímetro y computadora de a bordo, con indicador de combustible y temperatura en el de la izquierda y cuentavueltas en el de la derecha. El volante es multifunción de tres rayos, y tiene climatizador automático bizona.
La amplia pantalla color en el centro de los instrumentos permite visualizar distintos sistemas y, algo muy bueno, integra el sistema de navegación satelital, algo que no todos los modelos premium ofrecen.
Una vez en marcha, demuestra cómo la tecnología hace más placentera y segura la conducción.
El motor va acompañado por una caja automática de siete marchas que permite elegir entre dos modalidades de marcha, normal o sport.
Tanto las suspensiones como la dirección están puestas a punto para un manejo deportivo. Aunque no resulta áspero en la ciudad, es en la ruta y la autopista donde mejor se aprecia el aplomo del auto.
Obviamente, la lista de equipamientos y sistemas es por demás extensa, pero basta decir que tiene lo mejor que se puede pedir en materia de seguridad, incluyendo airbags frontales, laterales, de cortina y de rodilla; ABS; controles de estabilidad y de tracción, y advertencia de pérdida de presión en los neumáticos.
Un párrafo aparte merece el techo corredizo, totalmente de cristal, que otorga gran luminosidad y una vista panorámica del exterior. Si la luz es excesiva, basta oprimir un botón para desplegar una cortina.
El Clase C coupé es un auto equilibrado, de buenas dimensiones y gran comportamiento dinámico. Y además de las virtudes propias tiene una ventaja adicional: BMW no consigue el acuerdo con el Gobierno para vender sus automóviles. De ese modo, la ausencia de su rival directo, el BMW Serie 3 coupé, le deja el camino allanado para ganar terreno en el mercado local.
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