Transporte: crece el uso del boleto electrónico

La tarjeta electrónica agiliza el ingreso al colectivo, simplifica el trámite del usuario que ya no debe andar con las monedas o billetes apretados entre los dedos y evita que el chofer administre dinero para que, simplemente, se concentre en la conducción. El sistema de boleto electrónico sumó a Rafaela al universo de ciudades que buscan en la tecnología desarrollos que mejoren la calidad de prestación de los servicios, en este caso en lo que hace al transporte de pasajeros.

En Argentina, los usuarios tradicionalmente se debieron conformar con que los diferentes medios de transporte públicos o privados en ámbitos urbanos funcionen con lo básico, sin reparar en agregar valor al servicio. Pero con los avances a toda velocidad que se registran en el campo de la tecnología comenzaron a generarse especialmente equipos que otorgan un plus en el nivel de las prestaciones.

En Rafaela comenzó este año a implementarse la Tarjeta Electrónica de Pasajeros (TEP), desarrollada por la empresa Punto.gob –tiene participación del Estado local- con resultados parciales satisfactorios. Es que por ahora se habilitó para estudiantes, docentes y jubilados y aún resta poner en marcha la segunda etapa que significará su ampliación al resto de los usuarios. ¿Cuándo? El secretario de Actividades y Servicios Retributivos de la Municipalidad, Mario Rossini, expresó que está “muy satisfecho” con la TEP y que “actualmente estamos en una instancia de diseño del programa de marketing para el lanzamiento de la segunda etapa”.

Más de 1.600 tarjetas ya fueron entregadas a los usuarios, lo que ratifica los beneficios del sistema. “Hoy día se puede recargar la TEP por la mañana, de 7:15 a 12:15 en el hall de la Municipalidad y por la tarde en la Estación Terminal de Omnibus, de 15 a 19. Pero para la segunda etapa buscamos extender los sitios de recarga. Ya hay un acuerdo con Santa Fe Servicios para sumar 18 puntos de la ciudad. Entre otros son quioscos o agencias de quinielas que tienen horarios de atención muy amplio lo que favorecerá a los usuarios”, explicó Rossini.

La tecnología incorporada por el sistema de minibuses de Rafaela no sólo se traduce en una mejora para el usuario sino que además provee indicadores clave para la gestión del servicio. “Tiene un control de flota interno que indica el geoposicionamiento del vehículo, que nos puede brindar datos de la velocidad de cada unidad y otra información adicional”, destacó el funcionario.

Para esta nueva etapa del servicio, que registra unos 100 mil boletos vendidos por mes, el Municipio comenzó con un diagnóstico a partir de la encuesta de satisfacción al cliente. Y después profundizó la construcción de nuevas garitas y un plan de comunicación para que los usuarios se informen en la vía pública del recorrido y las frecuencias de las distintas líneas. “En el portal del Gobierno municipal en la web ubicamos una plataforma especial que resume todo lo que el usuario necesita saber sobre nuestro sistema de transporte”, agregó Rossini.

Mientras se avanza con los trámites para adquirir un nuevo minibús, la Secretaría de Servicios y Actividades Retributivas recibe subsidios al combustible, un esquema que no se modificará a pesar de que el transporte ya no depende del Ministerio de Planificación sino que ahora está bajo la órbita del Ministerio del Interior y del Transporte.

“Además seguimos trabajando en el cambio de imagen. Tenemos en estudio varias alternativas pero aún no nos hemos definido. En definitiva, todas las acciones están orientadas a construir un sistema que preste un servicio eficiente y previsible para el usuario. Queremos que cada pasajero pueda tomar todos los días un minibús en una parada de un barrio y llegue a horario a su trabajo. Y sí, buscamos más clientes para consolidar el servicio pero también porque, entendemos, descomprimirá el tránsito en el microcentro”, puntualizó el funcionario.

EL CASO DE ATOS

Atos, una compañía internacional de servicios basados en tecnologías de la información, dio a conocer recientemente que continúa expandiendo en el mercado local sus soluciones para el transporte público de pasajeros, apoyándose en una amplia experiencia en la gestión de proyectos complejos implementados en importantes ciudades de Latinoamérica.

Desde el Centro de Competencia Global de Fare Collection, que la empresa posee en la Ciudad de Córdoba, y que cuenta con tecnólogos de negocio especializados en transporte, se ofrecen soluciones al resto del mundo mediante la línea de servicios Hi Technology Transactional Services (HTTS). Actualmente, el nivel de procesamiento alcanzado ya supera las 17 millones de transacciones diarias.

“Cada una de las soluciones que han sido desarrolladas desde el Centro de Competencia, contemplan tanto las particularidades de cada ciudad y sus sistemas de transporte, como los componentes tecnológicos que permitirán brindar una solución integral para cubrir toda la cadena de valor, contribuyendo así con la optimización del sistema de transporte y la mejora del servicio ofrecido a los pasajeros”, indicaron desde esta compañía.

“En Atos orientamos nuestras soluciones hacia la mejora de la experiencia de viaje punta a punta, tanto para el usuario del sistema de transporte como los operadores, apoyándonos tanto en el conocimiento de nuestros especialistas como en tecnología de última generación. La solución de boleto electrónico incluye tarjetas prepagas sin contacto que agilizan el proceso de pago del boleto y brinda información detallada a los operadores de transporte para mejorar el sistema en su conjunto”, expresó Carlos Abril, director Comercial de Public Sector, Healthcare & Transport para Latinoamérica en diálogo con LA OPINION.

En Argentina, este verdadero gigante instrumentó la solución de boleto electrónico en las ciudades de Córdoba, Mendoza, Salta y Buenos Aires, donde Atos forma parte del consorcio implementador de SUBE (Sistema Unico de Boleto Electrónico). Además, en Latinoamérica, la empresa brinda servicios en Chile (Transantiago), Colombia, Perú y Uruguay.

Atos posee una posición de liderazgo en el sector de Transporte habiendo implementado soluciones para trenes, aerolíneas y buses en países como El Reino Unido, India y Francia. Con una facturación anual de 8.500 millones de euros en 2011 y 74.000 empleados en 42 países, esta compañía tendrá en el corto plazo una prueba de fuego: tiene a su cargo la gestión integral de los Juegos Olímpicos de Londres.