Por REDACCION
Ante la posibilidad de que aumenten significativamente los precios por el aumento impositivo que va de una escala del 30 al 50 por ciento, en los últimos días se aceleró la venta de los vehículos de alta gama en el país. La Cámara de Diputados aprobó el pasado jueves y giró al Senado el proyecto que aumenta los impuestos internos para autos y motos de alta gama, embarcaciones y aeronaves deportivas, con alícuotas que llegan a 50%, cambio que permitirá aumentar la recaudación en unos $ 200 millones anuales. El objetivo del Gobierno es que la Cámara alta sancione la ley la próxima semana, en el marco de la prórroga de sesiones ordinarias.
El texto estableció una alícuota del 30% sobre los vehículos concebidos para el transporte de personas (excluidos los autobuses, colectivos) los preparados para acampar y los chasis con motor y motores para los vehículos precedentes, cuyo precio sin impuestos sea entre $ 170.000 y $ 210.000. En tanto, se fijó que para los automóviles que superan los $ 210.000 la alícuota será del 50%. En el caso de las motos, se aplicará una alícuota de 30% cuando su precio sin impuestos se encuentra entre los $ 22.000 y $ 40.000 y en 50% cuando su precio sin impuestos supere los $ 40.000.
Con la fuerte demanda que se registra por estos días, las concesionarias especializadas en autos de lujo admiten una sensación agridulce: por un lado celebran un explosivo incremento de sus ventas pero al mismo tiempo las invade una gran incertidumbre sobre cómo se comportarán los consumidores el año que viene cuando se apliquen la suba de las alícuotas.
La iniciativa oficial afectará a un volumen de entre 60 mil y 80 mil autos dentro de un mercado total estimado para este año de 950 mil unidades. Incluso automotrices instaladas en el país sufrirán la suba del impuesto interno -que actualmente está en 10%- porque la medida alcanza algunos de sus modelos. En este sentido, 120 modelos de autos incrementarán su precio de lista una vez que el Ejecutivo nacional promulgue la ley, ya que se descarta que el Senado apruebe el proyecto el miércoles.
El presidente de la Cámara de Importadores y Distribuidores Oficiales de Automotores (Cidoa), Arturo Scalise advirtió que podrían cerrar concesionarias de autos importados en los próximos meses si el Senado aprueba el "atropello" de aumentar los impuestos a esos coches. "Espero que el senado reflexione y que no permita que se lleve a cabo este atropello. A nosotros nos quita completamente el mercado", se quejó Scalise en declaraciones a Radio Milenium.
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