Por Redacción
"Argentina necesita un plan económico integral que ataque en forma conjunta y rápida tanto los problemas de la esfera monetaria como los del sector real de la economía; de lo contrario, la economía no puede volver a crecer al 4% o 5% anual y generar nuevos puestos genuinos de trabajo", remarcó en su último reporte la consultora Economía % Regiones (E&R), que analizó los anuncios efectuados esta última semana por el equipo económico con el objetivo de captar dólares no declarados que permanecen en el exterior o debajo de los colchones o cajas de seguridad en el país.
Sin embargo, el informe asegura en forma concluyente que el gobierno "sigue sin hacer un buen diagnóstico del problema macroeconómico que enfrenta nuestro país". En este sentido, manifiesta que "Los anuncios del martes pasado están lejos de ser un plan integral que ataque el origen de nuestros problemas macroeconómicos actuales porque no introduce cambios en las políticas fiscal, monetaria, cambiaria y de financiamiento".
Asimismo, expresa que "los anuncios implican dos grandes contradicciones con respecto al discurso oficial, porque implican dolarización y endeudamiento, contradiciendo las políticas de pesificación compulsiva y desendeudamiento oficial.
"Devaluar más tampoco es solución, Argentina es el único país que viene devaluando hace años: desde el 2007 devaluó su moneda en un 67%", enfatiza la consultora E&R. "El deterioro de la competitividad Argentina tiene su génesis en una inflación elevada. Con el fin de corregir esta trayectoria el gobierno tomó medidas tendientes a “pisar” los precios y devaluó la moneda mucho más que el resto de los países de la región", añade el documento.
Para la consultora, el tipo de cambio oficial "debería subir en noviembre de este año a $7,62, a $10,28 o a $12,52 por dólar para recuperar el nivel de competitividad de los años 2010, 2007 y 2003 respectivamente". Sin embargo, indica que "lo que se gana de competitividad al devaluar, se perdería por la aceleración de la inflación".
BLANQUEO EN
POCAS PALABRAS
Al sintetizar el núcleo de los anuncios del equipo económico del Gobierno, la consulotra explica que "el nuevo blanqueo de capitales se instrumentará mediante la creación de dos bonos: el CEDIN y el BAADE". El CEDIN "estará destinado a estimular el sector inmobiliario y el BAADE a los sectores productivos; en especial YPF el segundo. El CEDIN podrá aplicarse a adquirir una propiedad nueva o usada, terrenos y refaccionar viviendas y se supone que también podrá utilizarlo para desarrollar un emprendimiento inmobiliario. En definitiva, los dólares blanqueados por medio del CEDIN acrecentarían el stock de reservas del BCRA y podría utilizarse para financiar gasto público corriente o para pagar deuda pública del Tesoro.
Se estima que los argentinos tienen aproximadamente 160 mil millones de dólares fuera del circuito formal de la economía (en las cajas de seguridad de los bancos habría unos 40 mil millones). El objetivo del gobierno es que el blanqueo permita al menos legalizar unos cinco mil millones, una cifra que oxigenará al Gobierno en su desesperada búsqueda de dólares aunque es una cantidad mínima en relación a la que está fuera del sistema.
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