La crisis del euro según una estudiante alemana

Con 19 años, Sandra Gertsch se instaló por segunda vez en la ciudad de Rafaela donde asegura, hizo “muchos amigos”. En 2011, en el marco de un intercambio escolar, viajó desde su Bönningstedt natal, a las afueras de Hamburgo, hasta esta ciudad con el objetivo de sumar experiencia y conocer cómo se hacen las cosas por aquí. En aquella oportunidad vivió en la casa de distintas familias rafaelinas, lo que consolidó esa relación que decidió refrescar este año. A fines de junio llegó nuevamente para reencontrarse con sus amigos, como Juan Ignacio Russo, quien actualmente cursa el sexto año en la Escuela Técnica Nº 460 Guillermo Lehmann.

Para aprovechar su estadía, Sandra decidió ir a clases a pesar de que ya terminó su recorrido por la educación media y en el cercano otoño europeo comenzará a estudiar Economía en la Universidad de Hamburgo y retomará la pelea para dominar el idioma chino. En la Escuela Nº 204 "Domingo de Oro", concretamente en el 5° “C” de Economía, la integraron en el aula como una más a pesar de su español algo duro.

Para perfeccionar su manejo del castellano, cuando habla con Juan Ignacio lo hace en español, mientras que su amigo se expresa en alemán, idioma que estudia desde hace un tiempo. Son las reglas, nadie usa la lengua de origen. Además, Juan Ignacio cuenta que fue uno de los alumnos que en febrero pasado viajó a Alemania donde soportó temperaturas bajo cero propias del crudo invierno del norte de Europa.

Como Sandra tenía información de primera mano sobre la crisis de la Eurozona, un tema que le interesa como futura economista, preparó un informe para sus compañeros de colegio con la ayuda de Juan Ignacio.

En primer lugar, a modo de introducción, explicó que el objetivo de la Unión Europea es asegurar la “igualdad para todos los participantes” y que para sumarse es necesario “tener un gobierno democrático y un Estado de derecho”. Sandra señaló que “en la UE hay un mercado interior que forma el mercado común mas grande del mundo y que se basa en cuatro libertades: libre circulación de mercancías (productos); de trabajadores (ellos pueden elegir el lugar de trabajo y residencia); de servicios (las empresas pueden abrir una fabrica y vender sus productos donde quieran, nadie debe ser discriminado por su origen o etnia) y de capitales (no hay límites para invertir en otros países).

Con más de 50 países en Europa, la Unión contiene a 27 de ellos aunque son 17 los que forman, en la práctica, la Unión Económica y Monetaria que tiene el Euro como moneda para “facilitar el comercio entre los Estados”.

CAUSAS

“En 2007 por la explosión de la burbuja inmobiliaria en los EE.UU, donde los bancos promovieron los créditos hipotecarios, en el resto mundo muchos bancos fueron fuertemente afectados y sólo pudieron ser salvados con apoyo estatal y de los organismos supranacionales. En España e Irlanda hubo una explosión inmobiliaria parecida. Los otros tres países en crisis; Grecia, Portugal e Italia, son normalmente dependientes de los mercados financieros ya que siempre estuvieron fuertemente endeudados. Pero fue cuando se descubrieron los datos falsos de la economía de Grecia el momento en que comenzó a decrecer la confianza entre los países y sobre los países”, sostiene el trabajo de Sandra.

Una vez que se pierde la confianza, la crisis de los bancos se traslada a la de los países y se profundizan al mismo tiempo. “Otra causa que agrava la crisis es que siempre hubo desigualdad en la zona del Euro, hubo países más sólidos, como Alemania y Francia, y otros, principalmente los del sur, como Grecia y España, más expuestos”, agrega.

Además, no se cumplieron con las reglas de la Unión Monetaria que establecían, entre otras exigencias, que un país no puede tener ni un déficit presupuestario por sobre el 3% del PBI, ni una deuda estatal por sobre el 60% del PBI”. Al respecto, “se deberían aplicar sanciones a los países que no se ajustaron a estos requisitos pero no se avanzó en esta dirección. También a pesar de las tempranas advertencias en comparación con Grecia nadie hizo nada, así que las instituciones de la UE también tienen parte de la culpa”.

¿Soluciones? “Para que especialmente Grecia salga de la crisis hay muchas posibilidades. Pero estas solo son posibilidades, porque ninguna es perfecta y tampoco nadie puede predecir lo que va a pasar. Además hay una fuerte discusión acerca de lo que puede pasar si Grecia va a bancarrota. Hay muchas teorías acerca de esto pero ninguna es verdadera o falsa”, dice Sandra, quien se mantiene actualizada sobre el debate que atraviesa a toda Europa y más allá por estos días.

Aumentar los desembolsos del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera para los países que sufren la crisis de la deuda, la opción de que Grecia abandone la Unión, la división en un Euro del norte y un Euro del sur son alternativas que analizan los expertos. “Lo que creyeron más oportuno es la cancelación de la deuda, esto significa que a Grecia se le perdona una parte de lo que debe. Pero la crisis sigue y ahora hay que esperar si se puede generar confianza nuevamente. El interrogante es cómo se hace”, concluye Sandra.