La coparticipación ya no crece como antes

La consultora Economía & Regiones confirmó, en su Reporte Mensual, que las transferencias por coparticipación cerraron mayo con un dato preocupante para las administraciones provinciales, ya que la tasa de crecimiento volvió a ubicarse por debajo del 20%, en este caso en el 17,6%.

Teniendo en cuenta que estos recursos financian (en promedio) el 50% de los gastos provinciales, y que los aumentos salariales otorgados a los agentes públicos se ubican en el rango del 20‐25%, resulta evidente que este ritmo de crecimiento es insuficiente para financiar la estructura de gasto subnacional.

Tampoco resulta un dato menor que las transferencias de mayo son estacionalmente las más altas del año, y que buena parte de dichos recursos excedentes son utilizados para financiar el pago del medio aguinaldo en junio, razón por la cual la tasa de crecimiento de este mes constituye una señal de alerta.

En forma mensual, los giros totalizaron $ 16.300 millones, apenas $ 300 millones por arriba de nuestras proyecciones del mes. Asimismo, se advierte que los recursos acumulados durante los primeros cinco meses ($ 61.622 millones) son apenas un 22,7% superiores a los del mismo período de 2011, mientras que un año atrás la variación acumulaba un 35,2% de crecimiento.

En cuanto a las causas de la débil performance de las transferencias, puede destacarse el impacto negativo de las restricciones a las importaciones sobre la recaudación del IVA, que genera una pérdida de coparticipación mensual en torno a los $ 600 ‐ $ 700 millones. En adición a esto, volvió a observarse un bajo crecimiento en Ganancias, incluso desacelerando su ritmo de crecimiento respecto a abril (7% vs 11%). Cabe recordar que en forma conjunta, el IVA y Ganancias generan el 90% de la masa a distribuir en las provincias.

En este sentido, lo que volvió a “salvar” el crecimiento de las transferencias fue el IVA aplicado sobre el mercado interno (IVA‐DGI), que habría presentado la mayor variación del año, en torno al 40 ‐ 45%. A modo de ejemplo, un crecimiento del 30% en el IVA‐DGI, hubiera llevado el incremento de la coparticipación por debajo del 15%. Detrás de este aumento, se observaría un nivel de consumo que se mantendría todavía en buenos niveles, el crecimiento de los precios, y probablemente una reducción en los stocks de las empresas, lo cual incrementa el impuesto a pagar.

De acuerdo a los datos de IVA, Ganancias y otros gravámenes que se pueden deducir de los datos de coparticipación (combustibles, monotributo, bienes personales), la recaudación global del mes crecería en un rango del 22% al 24%, incluso computando un buen crecimiento en Seguridad Social (+33% a/a) y comercio exterior (+23% a/a). De convalidarse esta tasa, colocaría al mes de mayo como el de peor performance en lo que va del año.

En lo que respecta al comercio exterior, el Fondo Federal Solidario (integrado por el 30% de las retenciones al complejo sojero) también presentó un mal desempeño mensual, ya que por primera vez en 2012 cayó en términos interanuales (‐3%), alcanzando los $ 858 millones. Vale señalar que durante el primer cuatrimestre, este Fondo venía creciendo en forma promedio al 35% interanual.

En cuanto a los drivers de la caída, si se tiene en cuenta que a la primera quincena el Fondo crecía al 13%, se puede inferir que los ruidos en el mercado cambiario habrían desincentivado las ventas en la segunda parte del mes, reforzando la caída en las cotizaciones de la oleaginosa respecto al mes anterior (‐2%).

Adicionando los giros del FFS, las transferencias automáticas al conjunto de provincias se ubicaron en $ 17.150 millones, apenas un 16% por arriba de lo ingresado en el mismo mes del año anterior (+ $ 2.400 millones).