Por REDACCION
Cuando accidentes inexplicables se cobran la vida de seres humanos, la comunidad toda se ve conmovida por el hecho, pero cuando las víctimas tienen ligazón con uno el dolor se multiplica, tal es el hecho que el pasado viernes, en un horario cercano a las 18:30 se cobró la vida de Walter y Franco Nicola, padre e hijo, dos vidas jóvenes cercenadas de un modo terrible, hecho que enluta a varias familias de esta ciudad y también a esta empresa.
Es que las dos víctimas eran esposo e hijo de una empleada administrativa de La Opinión, Cecilia Fontanetto - una bellísima persona, valorada y respetada tanto por su dedicación al trabajo como por sus virtudes humanas-, al conocerse el triste suceso la congoja se adueñó de todos quienes formamos parte de esta empresa, dejándonos sumidos en una profunda tristeza, anonadados por ver cómo en un segundo se destruye todo lo que se construyó a lo largo de los años y sin saber cómo ayudar a nuestra compañera a superar el trance.
Palabras de consuelo, en un momento como este, son imposible de pronunciar, solamente elevar una plegaria para que Dios reciba sus almas y que le dé fortaleza a Cecilia para seguir adelante.
Los restos de ambos fueron velados ayer por la tarde y la sepultura tendrá lugar esta mañana en el cementerio Municipal, previo oficio religioso a las 9:15 en la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe.
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