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Sociales Martes 24 de Enero de 2012

Guerra y paz

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Redacción

Por Redacción

"Hablamos de las leyes de la guerra como si esta no fuera la destrucción de todas las leyes". Esta sabia reflexión de Nicolás Sadi Carnot resume el espíritu pacifista que debiéramos cultivar entre todos y en todas partes. La Iglesia lo viene haciendo desde todos los foros posibles. Una de sus múltiples expresiones puede verse en la Jornada Mundial de la Paz -instituida para cada primero de año por Pablo VI el 8 de diciembre de 1997- con diversos mensajes que contribuyen a promover una cultura de paz. Para la del año 2000 Juan Pablo II dijo entre otras cosas lo siguiente:

"Durante el siglo que dejamos atrás, la humanidad ha sido duramente probada por una interminable y horrenda serie de guerras, conflictos, genocidios, 'limpiezas étnicas', que han causado indescriptibles sufrimientos: millones y millones de víctimas, familias y países destruidos; multitudes de prófugos, miseria, hambre, enfermedades, subdesarrollo y pérdida de ingentes recursos. En la raíz de tanto sufrimiento hay una lógica de violencia, alimentada por el deseo de dominar y de explotar a los demás, por ideologías de poder o de totalitarismo utópico,' por nacionalismos exacerbados o antiguos odios tribales. A veces, a la violencia brutal y sistemática, orientada hacia el sometimiento o incluso el exterminio total de regiones y pueblos enteros, ha sido necesario oponer una resistencia armada.

El siglo XX nos deja en herencia, sobre todo, una advertencia: unas guerras a menudo son causas de otras, ya que alimentan odios profundos, crean situaciones de injusticia y ofenden la dignidad y los derechos de las personas. En general, además de ser extraordinariamente dañinas, no resuelven los problemas que las originan y, por tanto, resultan inútiles. Con la guerra es la humanidad la que pierde. Sólo desde la paz y con la paz se puede garantizar el respeto de la dignidad de la persona humana y de sus derechos inalienables.

Frente al escenario de guerra del siglo XX, el honor de la humanidad ha sido salvado por los que han hablando y trabajado en nombre de la paz...".

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