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Sociales Martes 27 de Junio de 2017

El Supremo entrerriano

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Amado Raspo

Por Amado Raspo

En la etapa final de la vida de Ramírez y Carrera se hallan juntos en Cruz Alta (provincia de Córdoba), con el propósito de enfrentar a Bustos (Gobernador de la provincia mediterránea), pero la posición de este, se halla reforzada con carretas que sirven de parapeto; y las cargas de caballería se estrellen contra las descargas de fusiles y cañones.

Enterados Ramírez y Carrera, de que se aproximan fuerzas de Buenos Aires, optan por retirarse hacia  Fraile Muerto, hoy Bell Ville. 

Carrera insistía en seguir por el camino de Cuyo, para llegar a su Chile natal; por su parte Ramírez prefería tomar el camino a Santiago del Estero. Como decisión se separaron, Ramírez con doscientos entrerrianos, y Carrera con más de setecientos hombres, estos tomaron hacia Río IV, y Ramírez penetra a las sierras de Córdoba.

Mitre, como casi todos los historiadores, le atribuyen a Ramírez  el afán de buscar una salida por el Chaco, o un regreso a Santiago del Estero.

No existe documento probatorio sobre las intenciones de Ramírez sobre la decisión de su traslado.

Vicente Fidel López, dice que Bedoya alcanzó a Ramírez, en Río Seco, y Mitre dice que el 10 de julio - no se expresa el año-, el caudillo entrerriano es alcanzado y derrotado en inmediaciones de Río Seco.

Una revista llamada "El Porvenir Militar " asegura poseer una carta firmada por Antonio C. Díaz, quien manifiesta poseer los originales de una narración del coronel Anacleto Medina, sobre el último combate del General Ramírez y muerte del mismo. El texto de los apuntes atribuido al coronel Medina, sostiene : "El día que marchamos sobre el Arroyo Seco, nos dirigimos a un paraje denominado San Francisco, fuimos sorprendidos por quienes nos seguían".

El General Mitre dice que Ramírez se puso en fuga, acompañado de su querida "Doña Delfina" y de cinco o seis soldados que no lo abandonaron. Una partida de santafesinos los seguía de cerca y consiguió apoderarse de Doña Delfina, y a los gritos que daba esta consiguió que el caudillo volviera hacia ella, al frente de sus soldados. Y consiguió rescatarla: pero al mismo tiempo un pistoletazo de quienes lo seguían le atravesó el corazón al Supremo, quien cayó al suelo desde su caballo, muerto en el acto.

Un indio santafesino se echó sobre el cadáver del Supremo y le cortó la cabeza conservándola para presentarla al General López.

Desde luego hay varias versiones sobre los último momentos del Supremo, lo esencial es que falleció, y se salvó la Delfina, que sobrevivió en Entre Ríos durante dieciocho años.

Extractado de "Francisco Ramírez El Supremo Entrerriano" obra de Jorge Newton

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