Por REDACCION
El Papa anunció tras el Angelus que el 6 de junio próximo visitará Sarajevo, capital de Bosnia Herzegovina, y una de las ciudades mártires de la historia reciente de Europa que entre 1992 y 1995 fue escenario del primer conflicto bélico tras la Segunda Guerra mundial.
"Les pido desde ya rezar para que mi visita a esas queridas poblaciones aliente a los fieles católicos, suscite fermentos de bien y contribuya al fortalecimiento de la fraternidad y la paz, del diálogo interreligioso y de la amistad", destacó ante unas 30 mil personas que acudieron a la Plaza de San Pedro.
Poco después, el vocero vaticano, el padre Federico Lombardi, destacó a la prensa la "linda noticia" comunicada por el Papa. Lombardi precisó que "lo significativo que son esas palabras" que el Pontífice agregó al discurso escrito referidas al "diálogo interreligioso y la amistad".
"El Papa prosigue sus visitas en Europa a partir de los países 'periféricos' y donde los católicos son una minoría", añadió Lombardi.
La prensa de Bosnia había mencionado la posibilidad del viaje este año tras la visita que un miembro croata de la presidencia colegial de Bosnia Herzegovina, Dragan Covic, había hecho al Pontífice en el Vaticano. En Europa, el Papa realizó dos viajes, uno a Albania y el otro a Estrasburgo, donde tienen su sede diferentes instituciones de la Unión Europea.
La convivencia y la cooperación a favor de temas comunes, pese a las profundas diferencias religiosas y étnicas, es una cuestión clave en Bosnia y Herzegovina, a raíz de la guerra que tuvo lugar en el país, en el marco de los conflictos de los Balcanes, a principios de los años '90. El balance del conflicto fue muy duro: centenares de miles de víctimas y una serie impresionante de crímenes de guerra que han sido investigados por las justicias locales y por tribunales internacionales.
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