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Región Martes 26 de Noviembre de 2024

El culto a nuestros difuntos (Quinta parte)

En cuanto a las Comisiones de Fomento de Sunchales y entre las obras públicas emprendidas se destacó la creación del Cementerio Municipal (viejo).

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En el cementerio de Sunchales: panteón monumental familia Ristorto-Ingaramo Crédito: José Marquínez

Por José Pepe Marquínez

Nos trasladamos al cementerio de Plaza Saguier, población situada al sur del Departamento Castellanos de nuestra provincia. Su habilitación data de 1890 y la primera sepultura fue registrada el 8 de enero de 1893. En cuanto a panteones nos encontramos, en algunos de ellos, con una edificación propia de la arquitectura finisecular, es decir panteones altos, monumentales y en algunos casos de estilos art noveau o eclécticos. No obstante, en la esquina sureste del fundo se encuentra un grupo de tumbas que corresponden a la colectividad danesa de Saguier. La población nórdica sepulta a sus deudos en la tierra, identificando al difunto con lápidas, prevaleciendo la idea del cementerio jardín.

La existencia de dinamarqueses en una población pequeña como Saguier, obedece al emprendimiento que Christian Boll (Danmark 5/9/1887 – Saguier 17/11/1973) efectivizó con la instalación de una industria láctea. Ello ocurrió en 1917.

Se observan algunas sepulturas con lápidas que llevan las siguientes inscripciones correspondientes a ciudadanos daneses y que a modo de ejemplo señalaré: Martín Larsen (1897-1952), Fred Gens A. Jensen Gaard (1894-1948), Carlos Norgaar (1896-1958), Alma M. Johansen (1921-1941), Carlos Gustavo Christiansen (Kalundborg 1895- Rafaela 1976), Marta de Norgaard (1898-1923), Lillian A. Clausen de Boll (1922-2005), Christian Boll (fundador de la empresa láctea) y su esposa Karen Christiansen de Boll (Danmark 23/04/1889 – Saguier 06/09/1977).

En cuanto a las Comisiones de Fomento de Sunchales y entre las obras públicas emprendidas se destacó la creación del Cementerio Municipal (viejo). Es menester aclarar que la construcción de éste, estuvo signada por una relación enmarañada que la Comuna y la Iglesia mantuvieron, estribando el meollo de la cuestión, en el destino que se daría a los tributos a percibir.

El primer cementerio se encontraba ubicado al Suroeste de la planta urbana, tierras que fueron compradas por la Comisión de Fomento a Carlos Steigleder (1847-1891) a la sazón, su primer presidente. A su muerte ocurrida a los 45 años y al pretender su hermano enterrarlo en el Cementerio Católico o Viejo, se le denegó el pedido, habida cuenta de su condición de protestante. Al habilitarse el Cementerio Público o Nuevo, fue autorizado su enterramiento.

El 25 de abril de 1893 entre las obras públicas emprendidas por la Comisión de Fomento (año de habilitación del nuevo) se dictó el siguiente aviso al público: “1) Queda terminantemente prohibido el entierro en el antiguo cementerio, 2) Desde la fecha de habilitación al servicio público el nuevo cementerio queda sujeto a las disposiciones de esta Comisión de Fomento, 3) Para inhumar un cadáver es de necesidad absoluta solicitar el certificado médico y un permiso de esta Comisión de Fomento, requisitos indispensables para efectuar la inhumación, 4) Las tumbas están numeradas y para mayor facilidad serán indicadas por su número correspondiente por el Comisario Municipal, 5) los que infrinjan esta ordenanza y aunque secretamente quisieran enterrar a sus deudos en el antiguo cementerio, serán responsables de las consecuencias de su rebeldía; firma: Juan C. Koenig, Presidente Comunal”.

Las clases menos pudientes enterraban en la tierra mientras los más acomodados lo hacían en tumbas de material, nichos o panteones. Por lo general, en estos se las identificaba con el apellido de la familia.

En nuestro cementerio por ejemplo se distinguen los panteones monumentales Ristorto - Ingaramo, Familias Gasparoto, Bulfone, Sola, Ramella, Vidoni - Monteferrario, Gabasio, entre otras.

Se observan algunos de estilo art nouveau: Schierano Hermanos 1921 (art nouveau tardío), también en art déco panteón- tumba perteneciente a Domingo Porporato (c. 1943), pero la arquitectura que predomina corresponde al eclecticismo (1).

Por lo general estaban dotados de un altar de mármol, una carpeta que lo cubría, candelabros, vitreaux y floreros.

En el ingreso a la necrópolis existe una placa que señala a los señores Lasso Hermanos y a la Comisión de Fomento de Sunchales como los donantes del terreno en que se asienta el mismo.

Advertimos un panteón institucional inaugurado en 1936 propiedad de la Sociedad Italiana “Alfredo Cappellini” entidad que, por aquel entonces, presidía Angel Volpe (fundada el 4 de octubre de 1891). Esta construcción fue autorizada por sendas actas de Comisión Directiva en febrero y marzo de 1935. Se aprobó la construcción del panteón posteriormente inaugurado y el mismo consta de 78 nichos.

(1) En arquitectura, tendencia que fusiona elementos de diversos estilos y épocas

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