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Región Lunes 26 de Septiembre de 2022

Amasada de Jalá

MOISÉS VILLE

REDACCION

Por REDACCION

MOISÉS VILLE (Por Marta Zinger). - En el marco de las celebraciones del Año Nuevo  5783, evocamos una tradición: el amasado del jalá.
Jalá: es un pan de tamaño especial que se consume en Shabat (sábado) y en las festividades judías (menos en Pascua). Su amasado representa el trabajo necesario en nuestras vidas, para reafirmar la continuidad y la fe. Dicen que cuando las fuerzas de todos se unen a la fuerza de la Jalá, generan un poder especial capaz de lograr milagros. Los más simples ingredientes se transforman, y no sólo nos alimentan físicamente, sino también espiritualmente, y añade un sabor mágico que no se puede comprar. Cada uno de los ingredientes es un canal para pedir bendiciones a Adonai y la experiencia completa para conectarnos con los seres queridos. Es la fórmula familiar dentro de un recipiente y accedemos a él con la yema de los dedos. La harina, de mayor cantidad, representa la salud física. El azúcar, lo dulce, pedimos que la vida sea dulce y feliz. La levadura hace crecer, inflar, representa la confianza y la seguridad. La sal, imperecedera, conserva lo natural, el equilibrio, la perpetuidad. El agua, fluye, une a los demás ingredientes. Deseamos estar siempre unidos, con paz y armonía. Es la salud espiritual de nuestra familia. Huevo, símbolo de la vida, aceite: riqueza, poder para repartir. El amasado, simboliza el trabajo necesario de nuestras vidas, para reafirmar la continuidad. Esta actividad comunitaria se llevó a cabo en la cocina del Salón Kadima, con gran cantidad de entusiastas participantes y los mejores resultados.

ROSH HASHANÁ (cabeza de año); AÑO NUEVO JUDÍO 5783, comienza el 25 de septiembre de 2022, al atardecer, en el calendario gregoriano. La Torá, la ley y el patrimonio identitario del pueblo judío. Comienzan los diez días más solemnes del año judío. A diferencia de otras celebraciones, estas no guardan relación con la naturaleza ni con grandes episodios históricos. Esta etapa es profundamente personal, se saluda al Año Nuevo con plegarias solemnes y silenciosa alegría. De profunda observancia religiosa. No hay lugar para alimentos agrios o amargos. Días de reflexión y penitencia. De plegarias por la felicidad del ser humano y la paz universal.



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