Por Pedro Ulman
Desde octubre, un empresario, una empleada de comercio, un agente municipal, una docente, una ama de casa, un estudiante universitario, un mecánico, una diseñadora gráfica, un electricista, un deportista profesional, un desocupado y una trabajadora industrial entre otros tantas profesiones u ocupaciones, que tengan entre 18 y 75 años, podrán confluir en jurado popular con la responsabilidad de decidir si un acusado o acusada de un delito grave queda libre o va preso o presa.
El sistema ya nos resulta familiar desde hace décadas, ¿quién no vio alguna vez una película o una serie de Estados Unidos donde un juez guía el proceso, un jurado popular decide culpabilidad o inocencia luego de que fiscales acusen a un presunto delincuente, que a su vez cuenta con un abogado defensor? Un modelo muy similar es el que implementará la Provincia, en forma gradual, a partir de octubre.
Lo que hasta ahora es una exclusiva competencia de tribunales penales integrados por jueces se "democratizará": serán vecinos comunes quien pasarán a utilizar la icónica balanza de la justicia.
"En poco tiempo más el jurado tendrá la llave del sistema penal. El jurado será el que determine si una persona es culpable o inocente", afirmó el Dr. Rodolfo Zehnder, docente universitario de Derecho Internacional Público y de Derechos Humanos con un doctorado en Ciencias Jurídicas de la Universidad Católica de Santa Fe, tras estudiar en detalle el funcionamiento del sistema de juicio por jurados.
Recientemente, el Gobierno provincial dispuso la implementación progresiva de los juicios por jurados en materia criminal en todo el territorio santafesino, sistema que comenzará a aplicarse en la Circunscripción Judicial N°5 (Rafaela) a partir del 1 de octubre de este año. "No quiere decir que en octubre ya se realice el primer juicio bajo el nuevo sistema. Sin embargo, podemos considerar que antes de fin de año, el primer juicio por jurado popular en la historia de la Provincia será en Rafaela", expresó Zehnder, abogado del foro local.
Precisamente, ayer se efectuó el sorteo del listado principal de 10.000 ciudadanos que eventualmente pueden ser convocados a ejercer como jurados en un juicio. Quienes resultaron sorteados, recibirán en los próximos días una notificación del Ministerio de Seguridad y Justicia de la Provincia.
Zehnder, quien integra la Mesa de Implementación del Juicio por Jurados y la Mesa de Divulgación en representación del Colegio de Abogados y de la Universidad Católica de Centro del Estero Delegación Académica Rafaela, admitió que inicialmente estaba previsto -al menos era el planteo de la Corte Suprema de Justicia- que los juicios por jurados comiencen en las circunscripciones judiciales más grandes como Santa Fe y Rosario, que cuentan con mayor infraestructura edilicia y recursos tecnológicos y humanos para poner en marcha el cambio.
Sin embargo, se optó por comenzar en Rafaela -luego Reconquista y Venado Tuerto- para testear el funcionamiento del sistema y aplicar correcciones en caso de ser necesario antes de su implementación en las dos principales ciudades de la provincia.
"Hay una expectativa enorme, es desafío es importante. Rafaela será observada por toda la Provincia cuando se realice el primer juicio por jurados, que no necesariamente debe ser en octubre, quizás es en noviembre", sostuvo Zehnder, quien indicó que la mitad de las provincias argentinas ya tiene en marcha este sistema.
-Por qué se eligió a Rafaela en primer lugar?
-Acá hay un foro muy importante de abogados, con algunas carencias que se pueden solucionar tenemos el aspecto edilicio más o menos armado. Los juicios por jurados, en principio, se llevarían a cabo en la sala más grande en cuanto a dimensiones que se encuentra en el segundo piso de Tribunales. Hay que hacer retoques y tomar medidas del espacio porque ahora hay que contemplar la ubicación de un juez, de al menos dos fiscales, del acusado y su defensa, el lugar para que declaren los testigos y especialmente para el jurado, que debe contar con 14 integrantes, los 12 titulares y los 2 suplentes que también deben presenciar las audiencias. Además, se debe prever un lugar para el público, donde pueden ir periodistas, familiares de víctimas y público en general. Porque hay un interés de la autoridad en que estos juicios sean públicos.
Zehnder viajó a Estados Unidos para presenciar el desarrollo de los juicios por jurados en el marco de su especialización. Y también asistió a diversos procesos en Chile y en las provincias argentinas donde ya funciona el sistema. "Recorrí todas las provincias porque mi tesis doctoral fue sobre el juicio por jurados", señala. "Estudié a fondo el tema, tengo mucha bibliografía, en el caso de Santa Fe recoge mayormente la experiencia y el modelo vigente en Estados Unidos", sostuvo.
La modalidad de juicios por jurados en Santa Fe está prevista, inicialmente, para cuatro tipos de delitos contemplados en las causas criminales: el homicidio calificado, el crimen de odio o el abuso sexual seguido de muerte, el robo seguido de muerte y el enfrentamiento de las fuerzas de Seguridad que termina con la muerte de un civil.
"En Santa Fe, los testigos van a declarar de frente al público, tal como sucede en Estados Unidos. Se considera mejor que la gente pueda ver el rostro, los gestos, la comunicación no verbal del testigo mientras declara. Se cree que favorece la espontaneidad, la sinceridad. Hasta ahora, los testigos declaran frente al magistrado. Aquí hay un cambio", puntualizó Zehnder.
-Los fiscales y abogados defensores tendrán mayor exposición. ¿Deberán capacitarse específicamente?
-Tendrán que apelar a sus dotes histriónicas. Quizás tengan que tomar clases en los detalles por ahí no tan jurídicos sino más bien ligados a la persuasión para convencer a los jurados sobre la culpabilidad o inocencia del enjuiciado. En cierta forma, tendrán que ser como un actor, entrenarse. Ahora, como sucede en Estados Unidos, el fiscal y el defensor seguramente le hablarán a los jurados.
Los jurados a cargo de los juicios tendrán paridad de género. "El jurado tiene que ser representativo de la sociedad. Y resulta que la sociedad está compuesta de mujeres y de hombres en forma equilibrada. Incluso, los censos reflejan que hay más mujeres que hombres", dice Zehnder. "Debería estar integrado por personas de distintas francas etarias", sugiere.
Hay detalles sobre el rol de los jurados que Zehnder expone con claridad. "Los jurados estarán dedicados exclusivamente a su tarea durante cinco o seis días. Está contemplado un pago en algunos casos puntuales, que podría ser hoy de unos 40.000 pesos por día. Además, se trata de tratar de disminuir la influencia que viene de los medios o redes sociales. No es fácil, la idea es que el jurado, el miembro del jurado no hable con nadie durante los días que dura el juicio, son juicios breves, 5 o 6 días de audiencia y se terminó. Que no hable con nadie, ni con su mujer, ni con su pareja, ni con nadie. Pero hoy eso es imposible, ¿cómo se puede garantizar que un jurado en su casa no use el celular, no lea un diario? No se puede. Entonces, está previsto también, teóricamente, que se utilice una figura que se llama el secuestro del jurado. ¿Qué quiere decir el secuestro, entre comillas, del jurado? Que a la persona se la isla, el jurado durante los días que dura el juicio, se la aloja en un hotel, se le paga, no vuelve a su casa hasta que termine su tarea", subraya. "Está como en una especie de confinamiento", añade.
Asimismo, el especialista afirma que "el jurado debe llegar a un veredicto unánime, no es fácil pero debe hacerlo". "Si no llega a lograrse la unanimidad, porque de los doce hay ocho, nueve, hay once que dudan sobre la culpabilidad de un supuesto delincuente hay alternativas. El jurado debe delibera hasta tres veces, en busca de un acuerdo. Pero puede pedir al juez instrucciones adicionales, aclarar dudas para poder definir la cuestión. Incluso la ley santafesina permite un fallo de diez a dos, es decir si 10 dicen que este hombre es culpable, entonces se toma como válida la decisión. También puede ocurrir que no se logre un acuerdo, ahí el juicio se declara estancado, se desafecta al jurado, y se tiene que conformar un nuevo jurado para juzgar el mismo hecho. Se hace todo de nuevo, los testigos deben volver a declarar".
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