

El índice de precios al consumidor (IPC) se situó en febrero en el 66,9 % interanual, su décima desaceleración consecutiva, luego de registrar el mes pasado una tasa interanual del 84,5 %, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
En el segundo mes del año, los precios al consumidor crecieron un 2,4 %, lo que implica una ralentización en el proceso de desaceleración mensual, en comparación con enero que tuvo una tasa del 2,2 %.
Las cifras publicadas por el Indec se acercan a los últimos pronósticos privados que recaba todos los meses el Banco Central, ya que en su informe de Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) correspondiente a febrero marcaron que la inflación mensual sería del 2,3 %, al tiempo que para todo este 2025 llegaría al 23,3 %.
De acuerdo con el informe del Indec, los precios de los bienes aumentaron el mes pasado un 2,1 % en comparación con enero, mientras que los servicios subieron un 3,1 %, unos datos que ascienden al 50,2 % y el 121,3 %, respectivamente, en la comparación interanual.
Entre las subas registradas durante febrero destacan las categorías de vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (3,7%), por subas en el alquiler de la vivienda y gastos conexos en electricidad, gas y otros combustibles, seguido de alimentos y bebidas no alcohólicas (3,2%), principalmente por incrementos en las carnes y sus derivados.
Precisamente, los mayores aumentos de precios se registraron en los cortes de carne vacuna, de acuerdo con la medición del Indec correspondiente a febrero.
El dirigente Gonzalo Álvarez Maldonado, representante de Coninagro en la Mesa Nacional de la Carne dio un panorama sobre el mercado de la carne y anticipó que tendrá nuevos aumentos.
PRECIO ATRASADO
La carne “aumentó un 10 por ciento en el último mes como muchos otros alimentos. Incluso, ha habido otros, como las hortalizas, que han aumentado mucho más y de manera desproporcionada que la carne”, sostuvo.
“En la cuestión de la carne hay que tener en cuenta dos temas: uno es la sequía imperante que en los últimos años fue muy importante, lo cual impactó en la producción ganadera. Y, por otro lado, que la carne, durante 2024, tampoco tuvo aumentos y eso, hacía que el precio estuviera retrasado con respecto a la inflación en un 40 por ciento. Por tal motivo, se está realizando una actualización que se va a ir concretando”, remarcó Álvarez Maldonado.
NUEVOS AUMENTOS
Al mismo tiempo, el dirigente sostuvo que “si bien, el 30 por ciento de lo que se produce en Argentina, se exporta; debemos aclarar que no va a faltar carne en el país para el consumo interno, pero va a seguir registrando una actualización importante”, adelantó el representante de Coninagro.