Tras el acuerdo entre la Secretaría de Educación y la Universidad de Buenos Aires (UBA), el vocero presidencial, Manuel Adorni, negó ayer que haya “discriminación” a otras universidades y reveló que el diálogo con las distintas casas de estudio "está abierto".
En la habitual conferencia de prensa en Casa Rosada, el funcionario informó que la Secretaría de Educación llegó a un acuerdo con la Universidad de Buenos Aires (UBA) "para aumentar 270% los gastos de funcionamiento y 300% las partidas para los hospitales que dependen de la casa de altos estudios”.
Asimismo, aclaró que el Gobierno mantiene diálogo con todos los rectores y autoridades de las distintas universidades con el objetivo de “ajustar los presupuestos y necesidades a lo que cada uno les pasa”. “No es lo mismo al UBA con su volumen y su propia dinámica de lo que puede ser alguna otra universidad. Es razonable”, aclaró tras las críticas de un sector de la comunidad a raíz de la decisión de la casa de estudios de suspender la emergencia educativa.
En la misma línea, precisó: “Se conversa con todos. No hay diálogo cortado con ninguna universidad. Ayer se conoció el acuerdo con la UBA y se seguirán conociendo. Se van a ir sorteando las trabas y obstáculos”. “Siempre planteábamos que el diálogo sigue abierto, pero hay un empecinamiento en decir que cortamos los diálogos y no es así”, cuestionó Adorni al tiempo que desmintió tratos preferencias en las universidades.
Ante una consulta de LA OPINIÓN, el rector de la Universidad Nacional de Rafaela (UNRaf), Rubén Ascúa, afirmó que nadie del Gobierno nacional se comunicó para abrir el diálogo respecto a la transferencia de fondos que permitan financiar tanto los gastos de funcionamiento como el plan de inversiones. "La construcción de dos edificios en nuestro Campus está paralizada, un desastre", lamentó.
"No hemos tenido ninguna comunicación desde el Gobierno nacional. Por nuestra parte, seguimos la línea de representación del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN)", sostuvo Ascua.
En tal sentido, el CIN emitió un comunicado el miércoles en el que señaló que "la actualización en un 270 por ciento del presupuesto de gastos de funcionamiento y de un 300 por ciento para hospitales a la Universidad de Buenos Aires implica el reconocimiento por parte del gobierno nacional de uno de los aspectos del problema -y su grave magnitud- que todo el sistema universitario viene planteando desde enero de este año".
Sin embargo, consideró "inadmisible y provocador que se reconozca solo para una universidad y no para la totalidad del sistema que reúne a un conjunto de 60 universidades a lo largo y a lo ancho de todo el país, que representan a dos millones de estudiantes de las universidades argentinas". "No aceptaremos que existan estudiantes de primera y de segunda", subrayó el documento firmado por el Comité Ejecutivo del CIN.
En este marco, la entidad exigió "una resolución inmediata que garantice un incremento igual al otorgado a la Universidad de Buenos Aires para todas las universidades públicas de la Nación".
"Con la misma urgencia, seguiremos bregando por paritarias para las y los trabajadores de las universidades que recompongan la pérdida del poder adquisitivo del salario, por el sostenimiento y el fortalecimiento del sistema científico y tecnológico, por la actualización del monto destinado a becas estudiantiles y por la recuperación de las obras de
infraestructura hoy paralizadas", agregó al ampliar la agenda temática del sector.
Asimismo, el CIN rechazó "cualquier metodología que promueva la división entre universidades y dentro de las universidades" y adelantó que no convalidará "ningún intento de división", al tiempo que se declaró en "sesión permanente a la espera de una respuesta urgente a esta solicitud y, si no la hubiera, definir las acciones a seguir en defensa de la Universidad Pública Argentina".
Cabe recordar que el 23 de abril pasado se realizó una multitudinaria movilización a nivel nacional, con una elevada participación también en Rafaela, en defensa de la universidad pública ante la falta de actualización de las partidas que el Gobierno nacional transfiere al sistema de educación superior de su jurisdicción.
A pesar de que el vocero del presidente Javier Milei afirmó ayer que “no hay ningún tipo de discriminación entre universidades” y que "con todas se está terminando de diseñar el ajuste presupuestario porque cada una tiene particularidades que se deben atender de manera individual", en la UNRaf por ahora no recibieron comunicación alguna desde la Nación.