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Locales Martes 13 de Diciembre de 2022

Continúan los reclamos de vecinos de la "zona de quintas" por los ruidos molestos

Los ciudadanos afirman que la Colectora de la ruta 34 está "descontrolada" de jóvenes que se juntan a escuchar música a todo volumen hasta altas horas de la madrugada, es especial durante los fines de semana, además del gran caudal de basura que dejan en diferentes sectores. Un problema típico que se repite año tras año y que es de difícil resolución.

REDACCION

Por REDACCION

Los ciudadanos de los barrios de la zona de quintas de nuestra ciudad, en especial los del Brigadier López, continúan padeciendo, desde hace un tiempo bastante prolongado, la conducta de inescrupulosos vecinos temporales que no respetan las mínimas normas de convivencia. Y algo más o menos similar viene sucediendo también en el barrio Villa Los Alamos. Es que en estas épocas del año, con la llegada del calor y de las altas temperaturas, y en especial durante los fines de semana, el problema se agudiza mucho más aún, con lo cual la situación se hace cada vez más difícil de poder solucionarla.
Y son muchos los reclamos que han llegado a la redacción de LA OPINION por parte de los vecinos de ambos sectores durante los últimos días, hartos de esta cuestión. Las "juntadas" se dan en distintos rincones de los barrios, pero los lugares elegido por la gran mayoría de los asistentes son el frente del predio de la UNRaf, una colectora que es muy concurrida y transitada, a lo largo y a lo ancho, y donde está instalado el cartel de Rafaela, ambas a la vera de la peligrosa ruta 34. "Son muchos los jóvenes que se juntan a escuchar música a todo trapo y a consumir diferentes bebidas alcohólicas. Generalmente lo hacen a partir de mitad de semana, especialmente en temporada estival cuando los días se alargan, las noches se acortan. Y así el descanso es imposible, en especial durante los fines de semana luego de haber trabajado toda la semana", le comentó un vecino anónimo del barrio de la "zona de quintas", muy enojado, a este Diario. En este sentido, el señor agregó, visiblemente afectado por la situación, que "adultos, bebés y niños son víctimas de niveles altísimos de sonido y nadie escucha los reclamos. Son noches enteras que pasamos sin dormir, es imposible conciliar el sueño con semejante ruido, los chicos no duermen, tampoco dormimos los adultos que necesitamos laburar, cosa que estos pibes no hacen evidentemente”. 

"NO PUEDEN ACTUAR"
Mientras tanto, tal como aconteciera años atrás, desde que se inició la pandemia, el tema ya está en manos de las vecinales de los dos barrios y se espera que las autoridades deriven los reclamos de los vecinos y que se pueda actuar en consecuencia y tomar cartas en el asunto. En este sentido, Laura Castelain, presidenta vecinal del Brigadier López, le aseguró a este medio que "seguimos complicados con el tema del uso indebido de los espacios públicos del sector. Desde que comenzó el calor, hace alrededor de un mes, mucha gente se instala frente a la UNRaf con los parlantes a todo volumen hasta las 3 o 4 de la mañana, haciendo imposible el descanso de los vecinos, sobre todo los fines de semana. Pero eso no es el único inconveniente, ya que también está el tema de la basura que dejan en los lugares de encuentro, botellas de alcohol, bolsas de alimentos, etc. Parece ser que los vecinos somos los equivocados y hay que dejar que venga todo ese malón de gente y destruyan y ensucien todo. Es una cosa que no tiene límites. Se hace muy difícil poder vivir de esa manera". No obstante, ayer la dirigente mantuvo charlas con representantes del municipio local, aunque no obtuvo las respuestas que esperaba. "Este lunes por la mañana hablé con la gente de la Municipalidad y especificaron que no quieren que los repriman porque dicen que la gente va a tomar mate. Y es todo lo contrario, porque en las fotos que me mandan los vecinos no se aprecian residuos de mate, y mucho menos a las 3 de la mañana. Te dicen que no pueden actuar porque desde la oposición afirmar que van a hacer un recurso contra el oficialismo por sacar a la gente del espacio público. Enfrente de la UNRaf no logramos tener una cámara de seguridad porque la que se instaló hace poco da al cartel de Rafaela y a la ruta 34 y no enfoca el caos que se genera a diario enfrente de la nueva institución educativa con todos los autos con el capó abierto y los parlantes a todo volumen". 

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