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Locales Viernes 2 de Agosto de 2024

Celebramos al protector del Pan, el Trabajo y la Paz

Una estupenda investigación del párroco de San Cayetano, Eduardo Tomassini, se reproduce en esta página.

Agrandar imagen CELEBRACIÓN. El Santo y en el fondo el templo.
CELEBRACIÓN. El Santo y en el fondo el templo. Crédito: FOTO PRENSA PARROQUIA

Si bien mantuvimos un diálogo con Eduardo Tomassini, párroco de San Cayetano, creímos conveniente difundir la interesante y minuciosa investigación que llevó a cabo sobre la vida de San Cayetano, la que reproducimos seguidamente.

Cayetano (Gaetano, en italiano) nace en Vicenza en el año 1480. Pertenecía a la familia de los condes de Thiene. Fue el último de los tres hijos del conde Gásparo di Thiene (un militar que murió en 1492) y de la condesa María Da Porto. Tiene dos hermanos: uno mayor, Juan Bautista y Alejandro, el menor. A los dos años quedan huérfanos de padre.

1504 obtuvo el doble doctorado en derecho civil y canónico por la Universidad de Thiene. En 1506, a los 25 años de edad, gracias a las relaciones de sus tíos, tuvo la oportunidad de ser nombrado protonotario apostólico en la corte del papa Julio II, en Roma.

Uno de sus secretarios escribe: "A pesar del puesto; Cayetano no se da ninguna importancia. Viste con sencillez, atiende a todo el mundo aunque sea fuera del horario de oficina. Siempre activo donde lo necesitan. Trata a todos igual, ya sean ricos o pobres. Si mantiene esta actitud tan servicial llegará a ser un hombre muy importante..."

Se retiró de la vida cortesana en 1513 y fundó una sociedad de sacerdotes y prelados, llamada el Oratorio del Amor Divino. Fue ordenado sacerdote dos años después (a los 35 años).

En su primera Navidad del año 1517 como sacerdote, en su profunda humildad, no se sentía digno de consagrar a Jesús, de sostenerlo en sus manos, y ahí tuvo una aparición de la Virgen María y la Virgen le entregó el Niño Dios en sus manos, como diciéndole cuán digno era de sostener a Jesús.

Por eso en las imágenes se lo representa con el Niño Dios en brazos.

Con la crisis provocada por Lutero y la formación de los Luterano y luego los Protestantes, surge un período en el que se afirman fuertes corrientes de reforma de renovación interna de la Iglesia, que se concretizan con la creación de nuevas órdenes religiosas en torno a hombres que se imponen por su autoridad moral y por su capacidad realizadora. San Ignacio, con la Compañía de Jesús; Cayetano de Thiene y Gian Pietro Carafa fundan los teatinos; Mateo de Bascio, los capuchinos; Antonio María Zaccaria los barnabitas; Jerónimo Emiliani los somascos; Felipe Neri el Oratorio. Todos están animados por el mismo deseo de reformar una Iglesia cuya decadencia. Todos desean la reforma de la Iglesia a partir de la conversión personal, la restauración de los institutos religiosos en decadencia, el servicio a los pobres y enfermos, la fidelidad a la predicación y la renovación de la vida sacramental.

Amó profundamente a Cristo y a su Iglesia, y con gran dolor veía la crisis de la Iglesia, una Iglesia que se alejaba del mandato de Jesús, pero nunca pensó en irse, en dividir la Iglesia de Cristo. Él siendo contemporáneo de Lutero, sacerdote católico que se separó de la Iglesia, decía que: “a la Iglesia debíamos santificarla desde adentro, no dividiéndola, sino desde adentro con nuestras buenas obras”. Dijo esta famosa frase con respecto a la Reforma, que plantea el verdadero sentido del cambio auténtico: “Lo primero que hay que hacer para reformar a la Iglesia es reformarse uno a sí mismo”.

En el año 1524 fundó la orden de los Teatinos (o Clérigos Regulares). 1La Orden de los Clérigos Regulares fue aprobada por Clemente VII el 24 de junio de 1524 y confirmada definitivamente en 1532.

La Orden solo vive de la Providencia, es decir de lo que la gente buenamente le ofrezca para poder vivir, reformar al Clero y ayudar al pueblo. Por esto la Iglesia al elevarlo a los altares, lo propuso Padre de la Providencia. En Venecia fundó el “Ospedale degli Incurabili”, un hospital para enfermos incurables. Creará el “monte de Piedad” el primer banco de Nápoles, para evitar la usura, con el paso del tiempo se convertirá en la “Banca di Napoli” entre otras obras de piedad y continuará toda una vida ayudando a los más desposeídos y a poner paz en las guerras civiles de Nápoles. La actividad de San Cayetano y los Clérigos Regulares en Venecia se multiplica.

■ Distribuyó sus bienes y donaciones a su Congregación de los Teatinos, combatiendo la pobreza atendiendo a los hambrientos y enfermos cuando la gran sequía y peste de 1529 a 1532 en Venecia,

■ Fundó un Banco para los pobres, frente a la injusticia, la corrupción. ■ Levantó hospitales para enfermos incurables y sifilíticos.

■ Restableció el orden social y político, provocado por las guerras: Roma contra Venecia, España contra Nápoles.

■ Organizo una comisión de ayuda a los presos

■ Proyecto una fundación de una imprenta para "ganar el pan con el sudor de la frente"

■ Colabora con Carafa, que es designado Cardenal, en los estudios preparatorios de un Concilio. Se proyecta una amplia reforma de la Iglesia.

■ Se preocupó ardientemente, anticipándose a la obra específica de la Orden de la Compañía de Jesús, que a la muerte de San Cayetano, fundó San Ignacio de Loyola para combatir el cisma y herejía Protestante, a la reforma de la Iglesia, al decoro litúrgico y a la vida sacerdotal.

■ Promovió la comunión frecuente y la celebración diaria de la Misa,

■ Promovió la devoción a la Virgen María y el rezo del Santo Rosario, ■ Promovió el apostolado de la Caridad hacia los pobres y miserables. "Nada para sí, todo para el prójimo". Fue su tema.

2

El día de su fallecimiento, 7 de agosto de 1747, Nápoles se pacifica, y el pueblo lo interpreta que fue gracias a sus suplicas de Gaetano al Señor. Sus restos hoy se encuentran en la cripta de la Basílica de San Pablo Maggiore (Vía dei plebiscito y vía San Gregorio Armeno) y sobre su

tumba está escrito en latín: “Aquí descansa el que ora insistentemente por su pueblo”.

El 12 de abril de 1671 el Papa lo declara santo junto con Rosa de Lima y Luis Beltrán (ambos difusores del Evangelio en Latinoamérica), Francisco de Borja y Felipe Benicio.

COMO CONOCIÓ SANTA MARÍA DE LA PAZ Y FIGUERO (MAMÁ ANTULA) A SAN CAYETANO

La cristiandad del nuevo mundo y la metrópolis de Charcas, conformadas por las diócesis de la

Paz, Tucumán, Santa Cruz de la Sierra, Asunción y Buenos Aires, cuya ciudad: San Miguel del Estero (la más antigua -1570), lo ignoraban. No obstante, fue bien conocido por su actuación diplomática, en Roma, Venecia,Nápoles y por transferencia, España, (el Imperio Español de Carlos I y V, dominaba a Nápoles y a las dos Sicilias) motivada por las

guerras entre ellas, a tal punto que con su muerte acaecida el 7 de agosto de 1574, como ofrecimiento de su vida, se firmó la paz. Deducirnos que Santa María Antonia a Paz y Figueroa, tuvo conocimiento de la obra caritativa y diplomática de San Cayetano. La predicación y las noticias de los misioneros españoles Jesuitas que lo conocieron en España, fueron los transmisores fidedignos.

La admiración fervorosa que manifestó la "Santa" a la Orden Jesuita y a San Cayetano, seguro motivó la proposición en sus fundaciones, se tenga especial devoción a este Santo y fuera patrono secundario de las mismas. De este modo fue redescubrimiento en la Argentina, en el Barrio de Liniers, a San Cayetano.

3¿CÓMO LLEGA LA DEVOCIÓN DE SAN CAYETANO A LA ARGENTINA?

Se cuenta que fue Santa María Antonia de la Paz y Figueroa (Mama Antula) quien al llegar

a pie a la Capital Federal para iniciar su tarea religiosa construyó una pequeña capilla dedicada a San Cayetano, hasta el momento desconocido en América. Fue desde 1795, cuando se funda la casa de ejercicios donde comenzó a venerarse por primera vez en nuestro país a San Cayetano.

En la capilla del Divino Salvador de la Santa Casa de Ejercicios Espirituales se encuentra la que sería la imagen más antigua de San Cayetano en toda la Argentina. Se encuentra en el retablo de la Capilla, uno de los retablos coloniales más antiguos de la ciudad de Buenos Aires, del lado derecho; retablo cuya imagen principal es una dramática escena de la pasión de Cristo, y del lado izquierdo está la imagen del fundador de la Compañía de Jesús, San Ignacio de Loyola.

En esta desconocida imagen puede apreciarse a un San Cayetano muy dulce, lleva en brazos un Niño Dios en movimiento, un Niño Dios que extiende sus manitos como queriendo abrazar al santo.

Mama Antula desde que partió de Santiago del Estero lo puso, como patrono de su empresa evangelizadora, ya que era el “Santo de la Providencia” y a él se encomendó en todas sus

tareas. Seguramente, algún sacerdote misionero jesuita le habría contado sobre aquel noble que abrazó la causa de los pobres y que además, intervino en dos oportunidades como diplomático obteniendo la paz.

Aquellos terrenos pertenecieron según consta en documentos, a María Mercedes Cordova, quién los donó en 1830, a las Hermanas Religiosas, constituyéndose dueñas legítimas y desde ese momento iniciaron su labor religiosa en esas tierras de Liniers.

La Capilla original dedicada a San Cayetano construida por Mama Antula en Liniers, fue reemplazada en 1875 por una más grande, y en 1900 por una tercera que dio origen a la actual Parroquia.

El nuevo templo, situado sobre la calle Cuzco (cruzando la General Paz), tenía un san Cayetano sin el niño Jesús en sus brazos, pero más tarde fue reemplazado por otro, que sí lo tenía. En 1913 se lo declaró Parroquia de San Cayetano y en 1937 se lo volvió a ampliar.

4 ¿SABÍAS QUE SÓLO EN ARGENTINA LA IMAGEN DE SAN CAYETANO TIENE LA ESPIGA DE TRIGO?

¿Y COMO SURGE EL LEMA “PAN, PAZ Y TRABAJO?

Su condición de patrono del Pan y el Trabajo emergió a posteriori, a consecuencia de la crisis mundial de 1929, que en Argentina desembocó en la revolución del ’30 y se prolongó hasta el ’40. Pobreza, inflación y desocupación, fueron el signo de la época. Frente a este panorama, el padre Domingo Falgioni, a cargo del templo entre 1928 y 1938, se propuso reavivar la fe

y la esperanza en Dios, mediante la intercesión de san Cayetano: realizó una campaña evangelizadora a través del diario católico El Pueblo e imprimió por primera vez la estampa del santo con espigas.

Influyó en esta situación pastoral el triunfo del catolicismo por la celebración del Congreso Eucarístico Internacional de 1934, en la Capital Federal, despegue de la Evangelización construcciones de parroquias en los barrios capitalinos.

Según cierta tradición oral, mencionada también en una antigua revista que se publicaba cada año en la celebración litúrgica del Santo (7 de agosto), se menciona allí la “Espiga de Trigo”.

Llegaron los años de la sangrienta dictadura militar, el trabajo escaseaba y las persecuciones del gobierno eran terribles. El silencio era salud. El Santo se convirtió una vez más en quien “intercedía por el pueblo” y “Gritaba contra las injusticias”. Fue el tiempo cuando se produjo la gran manifestación política-religiosa llamada “Pan, paz y Trabajo” que organizó la CGT (Confederación General del Trabajo) el 7 de noviembre de 1981, celebrándose una Misa en el campito detrás de la Iglesia, especial para los peregrinos obreros. Según distintas fuentes, concurrieron entre 20.000 y 50.000 personas.

Los años siguieron pasando, “San Cayetano” seguía escuchando a sus fieles desde su casa de Liniers, pero la devoción ya se extendía por toda la república y por el Paraguay, donde lo llaman “San Cayé”. Cayó la dictadura, pero la economía seguía sin despegar y en el año 1984, coincidiendo con los 500 años de su muerte (1574–1984) fue la primera vez que el “Santito” salió de su iglesia. La segunda salida fue al Mercado Central, para la misa de los Obreros, oficiada por el Papa San Juan Pablo II.

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