Este martes, la diputada provincial Verónica Baro Graf se presentó en el salón de conferencias de SEOM de la ciudad para debatir en una audiencia pública sobre el proyecto de Ley de Prevención, Asistencia y tratamiento de Adicciones.
Este proyecto se trabaja en equipo, en distintas ciudades de la provincia, con audiencias públicas. Las audiencias son espacios donde la gente que está participando del tema aporta algo más en las ciudades por las que pasan. "Eso lo enriquece y lo hace mejor para el día que lo tratemos en la Cámara y se pueda votar", expresó la diputada.
"En este caso vamos a tener médicos, psiquiatras, las asociaciones que están trabajando, testimonios de algunas personas en recuperación, que siempre le aportan una esperanza a esta problemática de las adicciones. Lo hacemos desde el Observatorio de Víctimas, que está en la Cámara de Diputados", agregó.
Además, sostuvo: "Es una deuda que tiene el Estado, más allá de luchar contra el narcotráfico, para esas víctimas que han sido fruto de los delitos que están atravesados por la droga, por la violencia, por la cuestión económica, por las adicciones. También debemos disminuir la demanda".
"El proyecto tiene tres capítulos, uno que es el observatorio, saber qué nos está pasando, cuáles son nuestras realidades, incluso del norte al sur de la provincia. El segundo capítulo es la prevención, que también es muy difícil, porque por atender los casos que ya están, nos olvidamos de que necesitamos prevenir para que no haya más casos. Les destinamos más tiempo a la asistencia y el tratamiento y nos estamos olvidando de la prevención. Para mí es lo que más cuesta implementar, el antes. ¿Cómo hacemos para que una sociedad que de por sí es consumista? No solo a las drogas, el alcohol, el celular, la pornografía por internet, los juegos, las apuestas, la comida, a las compras... prevenir implica trabajar con chicos de los ceros a los 15 años", comentó Baro Graf.
"Lo tercero es la asistencia. Me preocupa mucho, hay muchas asociaciones que están trabajando con el tratamiento, pero siempre hace falta más".
"Desde la neurociencia y no solo desde la psicología, es una enfermedad", afirmó la diputada. "Es una enfermedad porque el cerebro naturalmente busca el placer y la gratificación. Es una condición del ser humano buscar el placer porque si no, no volveríamos a comer. Si comer fuera un hastío, una vez que estás satisfecho decís, bueno, ahora no quiero más, pero al rato tenés hambre de nuevo y ese es un mecanismo natural. Siempre está el placer asociado con la sobrevivencia. Ahora, cuando el cerebro pesca, que hay algo que de principio te empieza a estimular más, genera un circuito que te va pidiendo cada vez más. Y ya uno es víctima de esto porque el centro neuronal empieza a manejar a la persona que se hace adicta a algo".
Ante la pregunta sobre cómo tratar a una persona adicta, respondió: "Yo lo trataría con mucha compasión, no trataría de entender qué fue lo que lo llevó porque causales hay miles. En los adolescentes se da mucho la necesidad de pertenencia. Por eso debemos trabajar en fortalecer para que no necesiten depender del alcohol o de la droga para estar en grupo, sino que tengan habilidades para integrarse".
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