Por Redacción
WASHINGTON, 9 (AFP-NA). - El escenario económico se deteriora y la recesión amenaza a los países ricos, según informes divulgados ayer en Europa y en Estados Unidos, cuyos líderes buscan paliar la situación acelerando los europeos la aprobación del rescate a Grecia, y lanzando la Casa Blanca un plan para impulsar el empleo.
En medio de una desocupación de 9,1% que la economía estadounidense no logra bajar, el presidente Barack Obama presentó al Congreso el proyecto de ley "de Trabajo Estadounidense", cuyo objetivo, explicó, es "poner a más gente a trabajar y más dinero en el bolsillo de los que están trabajando".
El proyecto incluye recortes de aportes patronales y de los trabajadores sobre los salarios, inversiones en infraestructura y contrataciones públicas, por un total de 447.000 millones de dólares, total que será compensado por una reducción del gasto público.
La iniciativa busca contrarrestar la principal preocupación de los norteamericanos con su economía: la falta de trabajo.
Mientras tanto en Europa, el panorama volvió a empeorar.
"Hay un enorme grado de incertidumbre sobre la economía mundial y la zona euro", declaró en Fráncfort el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet.
El instituto monetario revisó a la baja sus previsiones de crecimiento del PIB de la Eurozona, que será de 1,6% en 2011 y 1,3% en 2012 (las proyecciones de junio pasado eran de 1,9% y de 1,7% respectivamente).
El Fondo Monetario Internacional (FMI) por su parte, coincidió con el diagnóstico.
"La economía mundial está enlenteciéndose más rápidamente y los obstáculos (para el crecimiento) aumentan", afirmó un portavoz del organismo, Gerry Rice.
Las autoridades políticas, acosadas por los mercados, tratan de recuperar la iniciativa, para impedir una recaída en la crisis que en 2009 sumió al mundo en la recesión.
Obama anunció su plan de empleo y en Europa, Francia se convirtió el jueves en el primer país de la Eurozona en aprobar definitivamente el plan de rescate a Grecia que recibió en julio el visto bueno de los dirigentes europeos.
Sin embargo, el segundo plan de rescate griego, de casi 160.000 millones de euros, no entrará en vigor antes de 2012, pues varios de los 17 países de la Eurozona sólo lo aprobarán dentro de unos meses.
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