El Festival de Jesús María tuvo un arranque muy auspicioso con más de 12 de mil personas que se acercaron al anfiteatro José Hernández. Así, la noche del viernes se vistió de gala para recibir el comienzo oficial de la edición 59 y dejó varias postales para el recuerdo.
Junto a la presencia de la vicepresidenta Victoria Villarruel, se destacó la llegada de gente de todo el país para vivir una decena de noches de festival. También, los clásicos condimentos propios de un evento que ya es parte de la identidad de una ciudad y miles de personas que viven alrededor de lo que se genera cada enero.
A lo largo de la primera jornada, se pudieron ver los clásicos carteles, las conservadoras que año a año ingresan al anfiteatro cargadas de comida y bebida y muchas expectativa en torno a una edición que es vista con optimismo.
La presencia de Luciano Pereyra, factor excluyente de convocatoria en esta primera noche oficial, y el posterior cierre de La Barra y sus 30 años de historia eran motivos suficientes para la expectativa de las más de 10 mil personas que, una vez más, le dieron un marco de fiesta popular a este encuentro único en su tipo. LA VOZ