Por REDACCION
La mayoría de los informes de organismos privados son coincidentes en cuanto a la baja que vienen teniendo prácticamente todos los indicadores que hacen al conjunto de la economía, en este caso concreto la merma de las ventas que no es otra cosa que la caída del consumo. Algo que en realidad no necesita de indicadores ni estadísticas, ya que la gente lo siente en su vida cotidiana, pues justamente es la que ha tenido que reducir y seleccionar sus compras consecuencia de la caída que ha tenido el poder adquisitivo del salario, el cual se encuentra en un deslizante tobogán.
En este caso preciso el informe corresponde a la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), que aún siendo una entidad del sector privado tiene una bastante marcada aproximación con el gobierno nacional, pero que ni aún así puede disimular aquellas cuestiones que justamente en los despachos oficiales caen muy mal, al punto de ser rechazadas de manera contundente, como en este caso la baja del consumo, que no es otra cosa que un impacto negativo en las clases más desprotegidas. Es decir, aquellos que disponen como exclusivos ingresos sus salarios, que han quedado por debajo de la inflación.
Según la CAME se llevan 11 meses consecutivos de retracción en las ventas de las pequeñas y medianas empresas, y en el caso concreto del reciente concluido mes de noviembre la contracción fue de 4,9% en relación a igual período de 2013. Con lo cual el acumulado del año se ha elevado a 7,2%, de acuerdo lo establece el resultado de un relevamiento efectuado en 916 comercios de todo el país, tomándose 22 rubros, de los que 21 estuvieron en baja, aunque dejándose aclarado que el retroceso fue algo menor que en los meses anteriores. Es decir, en otras palabras, seguimos estando mal, pero un poco menos. Aunque, en realidad, para revertir este proceso declinante se hace necesario volver a incrementar fuertemente todos estos indicadores, en especial los del poder adquisitivo para de tal modo impactar favorablemente en las ventas y volver a hacer crecer el consumo, que es en definitiva el más claro índice para calificar las condiciones sociales.
De los 22 rubros relevados, las caídas más pronunciadas se registraron en inmobiliarias con un muy fuerte 14,7% -sector que viene en retroceso desde octubre de 2011 cuando se había dispuesto el cepo sobre el dólar, que tuvo un impacto muy negativo en este rubro, manteniéndose la caída-; luego se ubica en la tabla de la baja el sector neumáticos con 9,9% -otro indicativo claro sobre la menor reposición de un rubro que fue el boom de los últimos años y que ha comenzado a restringir su uso-, siguiendo jugueterías con 7,8% y cerrando el grupo de los que más cayeron el rubro artículos para la construcción con 5,1%, siendo uno de los más expresivos en cuanto a su impacto, con directa relación con el inmobiliario. Como "ladrillos" siempre ha sido uno de las mayores atracciones para los ahorristas e inversores, aquí tenemos la prueba del significado de este retroceso, en que los sobrantes son cada vez menores.
La única excepción del mes de noviembre de los 22 rubros relevados fueron el conformado por electrodomésticos y artículos electrónicos, con una suba del 3,2%.
Puntualiza la CAME en el informe que pese al descenso del undécimo mes del año "se movilizó con algo más de entusiasmo, animado por los programas de financiamiento que ofrecieron la mayoría de los comercios del país", destacándose en tal sentido que "fue muy intensa la venta de aires acondicionados, impulsados por la ola de calor y por la posibilidad de pagar en 18 cuotas sin interés", sin dejar de referir además que "eventos típicos se sumaron al mercado, los que van ganando público, como el Black Friday o el Ciber Monday, permitiendo al consumidor comprar durante algunos días en cuotas y con descuentos de hasta 40% en productos de todos los rubros".
Noviembre es un mes que, entre otras cosas, suele constituirse en un espejo de lo que acontecerá en las ventas de fin de año, y como en el mismo existió una leve recuperación, es que se permite ver con cierto optimismo lo que acontecerá durante el presente diciembre, cuando los ánimos de la gente se muestran más predispuestos. De todos modos, un dato que resaltó la CAME y que es importante al momento del análisis, es que "la gente actualmente busca precio y resigna calidad, con lo cual, está claro que el comercio ilegal será un problema grave para el comercio minorista en estas próximas semanas si no hay un control responsable".
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