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Editorial Domingo 11 de Febrero de 2018

Somos vulnerables

La Argentina encabeza una lista de países vulnerables, destinada a inversores.

REDACCION

Por REDACCION

Las inversiones con orientación productiva son la clave para el funcionamiento y expansión de cualquier economía, con mayor razón en aquellos países identificados como emergentes, que inevitablemente requieren del flujo de dinero proveniente de los grandes centros financieros internacionales, para poder expandir su producción, crear trabajo y finalmente mejorar las condiciones de vida de sus habitantes. Algo muy básico, pero que debido a la competencia que existe entre los países que aspiran a recibir inversiones, se hace difícil de obtener al momento de tomarse las decisiones.

Es que además, los inversores internacionales se pasan monitoreando durante todo momento el estado y las condiciones en que se encuentran las economías de los países emergentes, para establecer si es el momento apropiado, cuando invertir y cuando salir. De tal modo, esos grupos inversores dependen en buena medida de las referencias que ofrecen algunas organizaciones muy influyentes y que gozan de prestigio en cuanto a la validez de sus informes, siendo uno de los casos el Institute of International Finance, el cual elabora anualmente  un semáfoto denominado Heat Map, donde se pueden comprar las vulnerabilidades entre los países potencialmente dispuestos para receptar inversiones.

Uno de los aspectos centrales es evaluar el impacto de una mayor aversión al riesgo o aumento en las tasas de la Fed, especialmente en los emergentes con vulnerabilidades externas y marcos de políticas menos creíbles, según lo analiza de esa forma el especialista Jorge Herrera en Ambito. Es por ese motivo que son evaluadas esas posibles debilidades en cuanto a la dependencia del financiamiento externo, las internas del sector real y financiero y la credibilidad de las políticas y la estabilidad que afecta el alcance del ajuste macroeconómico, destacándose que las puntuacionesse resuelven del mismo modo que lo hace el FMI, aplicadas a los Indicadores de Sobrecalentamiento para las Economías del G-20. Es decir, según explica el Institute "a los países se les asigna una clasificación de colores para cada indicador de vulnerabilidad que marque la suya en relación con otros países de la muestra. El rojo implica el más vulnerable y el verde oscuro el menos vulnerable".

En cuanto al Heat Map con el que se inició el presente año, muestra que la Argentina presenta el mayor nivel de vulnerabilidad, seguida por Turquía. Especialmente nuestro país es más débil en su dependencia del financiamiento externo y en su situación política, logrando destacarse en cambio por sus mejores indicadores de vulnerabilidad al financiamiento local.

Tomando como ejemplo el tipo de cambio real, el estudio muestra un desvío respecto del promedio de la última década de un 30%, resultando más que obvio la desaprobación que tiene la Argentina en cuanto a la inflación. Además el estudio cuenta con indicadores clave tanto de la macro como de la economía doméstica, dentro del entorno político en que se desenvuelven. De tal modo el bajo Indice de Vulnerabilidad del Financiamiento Externo se evalúa además el nivel de saldo de la cuenta corriente del balance de pagos, el déficit de la cuenta corriente neto, el ratio de cobertura de las reservas, el nivel de la deuda externa de corto plazo sobre la total, el peso de la deuda externa sobre el PBI y el nivel del tipo de cambio real. Mientras que respecto al Indice de Vulnerabilidad del Financiamiento Doméstico se comparan indicadores como el porcentaje de la deuda corporativa y de las familias sobre el PBI, el crecimiento real del crédito privado, el nivel de reclamos externos, las tenencias extranjeras de moneda local y de acciones, y el valor de las viviendas. Finalmente el Indice de Vulnerabilidad Política contempla desde el desvío de las metas inflacionarias, el nivel de las tasas de interés reales, el nivel del déficit fiscal, la deuda pública, el ranking de competitividad e informe del Banco Mundial.

Entre los 19 países emergentes evaluados, Argentina lamentablemente encabeza posiciones, seguida por Turquía, Ucrania, Tailandi, Polona, Filipinas, Malasia, Corea del Norte, Indonesia, Hungría y República Checa.

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