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Editorial Miércoles 9 de Febrero de 2011

Recaudaciòn récord

El IVA volvió a convertirse en el principal componente de la recaudaciòn con un aporte de 11,837 millones de pesos. Se trata de un factor que influye directamente en el consumo, creciendo por la suba de precios.

Redacción

Por Redacción

Recaudaciòn récord
El primer mes del año comenzó con todo en materia de recaudaciòn fiscal, totalizándose 40.767 millones de pesos y estableciendo una marca que es nuevo récord en la materia. La suba, en términos nominales, fue 40,5% más que igual mes de 2010, porcentaje que traducido a pesos significa 11.700 millones.
La novedad, presentada de esta manera, es sin dudas sumamente positiva, aunque cuando se ingresa en el análisis de la misma, quedan algunos conos de sombra. Es que si bien la recaudaciòn crece por la expansiòn que tiene la actividad económica -lo cual debe ser reconocido en primer lugar- también se motoriza por el nivel inflacionario, el cual hace subir los precios, y estos a su vez el IVA, que es el primer componente de la recaudaciòn, ya que del total de 40.767 millones a este impuesto le corresponde un aporte de 11.837 millones, más de la cuarta parte. Y como se trata de una imposiciòn sobre el consumo, en tal sentido resulta negativo para la consolidaciòn del objetivo oficial de afianzar cada vez más el consumo, lo cual -se sostiene- significa un paso adelante en cuanto a una mejor distribuciòn de la riqueza. Aunque claro, la gente paga más por igual volumen debido a la inflaciòn, debiendo por lo tanto pagar más impuestos, mientras que estos deberían provenir en mayor medida de otras áreas, algunas de ellas aún desafectadas impositivamente.
En lineamientos generales, esta recaudaciòn inédita en cuanto a las cifras, pudo lograrse -además del crecimiento económico y la inflaciòn- por los buenos precios internacionales de nuestras exportaciones y las mayores cantidades importadas que abonan un fuerte derecho aduanero. En este último caso por ejemplo, la totalidad de las importaciones dejaron en las arcas fiscales -merced a diversas imposiciones- 5.300 millones de pesos, explicando un 13% de la recaudaciòn.
Lo ingresado por Ganancias en el mes ascendió a 7.110 millones, siendo el segundo rubro en importancia luego del IVA, habiendo tenido un comportamiento 43% superior a igual mes de 2010, mientras que las contribuciones patronales significaron un aporte de 6.970 millones, ocupando el tercer lugar, postergando al cuarto a los aportes personales que sumaron 4.674 millones.
De todo lo expresado, existen dos aspectos que son los que mayor nivel de preocupaciòn generalizada, si bien desde la oposiciòn se magnifican y en cambio desde los despachos oficiales tratan de minimizarse. Ellos tienen nombre propio bien definido: inflaciòn e importaciones.
Lo dijimos y lo reiteramos, si bien por un lado la inflaciòn le significa al gobierno una considerable ampliaciòn de sus ingresos, en cambio impacta negativamente en otros aspectos mucho más trascendentes, al menos para la poblaciòn: el deterioro del poder adquisitivo, la falta de inversiòn y la puja salarial que se avecina entre trabajadores y patronales, la cual siempre deja maltrecho a los más débiles.
Con relaciòn a las importaciones, desde hace rato se viene advirtiendo la vertiginosa suba, que poco a poco va alcanzando los niveles de las exportaciones en cuanto al volumen -tanto en productos como en dinero- lo cual ba reduciendo sostenidamente el superávit de la balanza comercial. Un caso muy concreto y preciso lo tenemos con nuestro vecino Brasil y principal asociado del Mercosur, país con el cual tenemos un déficit de 4.000 millones de dólares.
Frente a la falta de otras soluciones, volvió a interferir en las importaciones el polémico secretario Guillermo Moreno, interpelando directamente a quienes formalizan las compras en el extranjero, lo cual afecta muchas veces todas las normas comerciales establecidas. Es que las soluciones deben darse en un marco de legalidad, ajustadas a las reglamentaciones, y no simplemente por una expresiòn voluntarista. Hace muy poco habíamos tenido una triste experiencia con Brasil en ese sentido, debiendo luego intervenir la presidenta Cristina Kirchner en forma directa, para zanjar las diferencias surgidas, que amenazan en transformarse en un conflicto mucho más severo que el simplemente comercial.
Asi las cosas, tenemos por un lado una expansiòn recaudatoria muy importante, que deja traslucir la posibilidad de otro buen año, pero a la vez dejando pendientes de solución algunas cuestiones que, como las mencionadas, son fundamentales para crecer a futuro.


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