Objetivos del milenio

Por Redacción

Uno de los principales objetivos que se planteaban en los ocho "objetivos de desarrollo del milenio", bajar a la mitad la cantidad de personas sin la posibilidad de contar con agua potable en el mundo, fue alcanzado en 2010, es decir, cinco años antes del plazo que se había impuesto para 2015, pero en cambio se está todavía muy lejos de lograr la meta de saneamiento, siendo probable que se deba ir bastante más allá de 2015. De tal modo lo establece un informe conjunto de la UNICEF y la Organización Mundial de la Salud, en ambos casos organismos dependientes de las Naciones Unidas.

En la década comprendida entre 1990 y 2010, fueron dos mil millones de personas que se sumaron a la disponibilidad de agua potable, suministradas por medio de tuberías o bien pozos protegidos, con lo cual sumado a lo ya existente, en este momento el 89% de los habitantes del mundo cuenta con agua segura. Fue esta entonces la primera de las ocho metas en concretarse, quedando ahora por delante darle igual chance al 11% restante que aún está desprotegido, lo cual será una tarea no sólo complicada sino poco menos que imposible, habida cuenta que allí se cuentan quienes viven en zonas montañosas, selváticas y en regiones a las cuales la civilización ha llegado en cuentagotas. Además, correspondiendo a países que se desentienden de estos habitantes, lo cual hace todavía más difícil procurarles algunas de sus mínimas necesidades.

En cuanto a la UNICEF, el órgano de la ONU que actúa con la infancia, se mostró plenamente conforme con este logro en materia de agua potable, ya que diariamente fallecen unos 3.000 chicos debido a las enfermedades diarreicas, lo cual podrá irse sofrenando de la mejor manera sólo con la ingesta de agua de calidad, evitando así la contaminación que provoca esta clase de enfermedades. Aunque claro, se recordó que dentro de ese 11% marginado -que significa 783 millones de personas- hay millones de chicos en estado total de desprotección, y más grave aún la carencia de obras de saneamiento (cloacas), ya que allí son miles de millones los desprotegidos.

Una de las regiones del planeta más afectadas por la falta de agua potable es Africa subsahariana, ya que allí el 39% de los habitantes se encuentran en esas condiciones.

Con relación a la Argentina y las metas del milenio, se habían fijado por parte del Programa para el Desarrollo, dos objetivos fundamentales: uno de ellos reducir en dos terceras partes la proporción de la población sin acceso al agua potable en el lapso 1990 a 2015. Y segundo, achicar en dos terceras partes la cantidad de población sin acceso a los desagües cloacales, en ese mismo período. De acuerdo con el censo de población de 2010, el 11,4% de los hogares con la afectación de alrededor 1,4 millón de personas no cuenta con provisión de agua en el interior de la vivienda, cifra que sube al 22% si se agregan aquellos hogares que obtienen agua dentro o fuera de la vivienda, pero sin acceso a la red pública.

Estos objetivos del milenio, conocidos también como objetivos para el desarrollo, fueron acordados en una asamblea de las Naciones Unidas en la cual participaron los 193 países miembros del organismo internacional. Concretamente, fijaron como objetivos para alcanzar en 2015 la erradicación de la pobreza, la educación primaria universal, la igualdad entre los géneros, la mortalidad infantil, la mortalidad materna, el avance del VIH-sida y el sustento del medio ambiente. En respuesta a quienes demandaban entonces posturas de mayor contenido social de parte de los mercados y los entes financieros, se agregó el octavo objetivo para fomentar una Asociación Mundial para el Desarrollo, orientado a la promoción del sistema comercial y ayuda oficial que asegure el logro de los anteriores objetivos hacia 2015, y en lineamientos general un mundo más justo.