Menos importaciones

Menos importaciones

La difundida recientemente respecto a la disminución de importaciones por 4.000 millones de dólares en el primer semestre de este año, de modo especial en elementos destinados a la fabricación de automotores, constituye sin dudas una muy buena noticia. Es que, justamente, las importaciones en estado creciente se habían constituido en el lado flaco de nuestra balanza comercial, debido a su constante mayor avance que las exportaciones, por lo cual cada vez era menor el superávit, y además, de mantenerse este ritmo, en poco tiempo más se podían llegar a juntar ambos rubros, con lo cual se anularía uno de los sostenes del sistema económico que se viene implementando en estos últimos años.

Es que la industria automotor, principal sostén del crecimiento del sector y además impulsora del consumo interno, a pesar de su explosivo crecimiento en estos últimos años -este 2011 alcanzará el récord histórico-, no significa para la balanza comercial un rubro positivo, ya que el año pasado por ejemplo dejó un déficit de 6.000 millones de dólares, consecuencia de la necesidad de importaciones para poder encarar el ensamblado de las unidades automotrices en las terminales locales. Ahora, con esta sustitución de importaciones que alcanzó 4.000 millones de dólares en el primer semestre, buena parte de lo cual se trata de elementos para el sector automotriz, se confía que en un plazo de 2 años se conseguirá reducir el total de importaciones en unos 4.200 millones de dólares.

Pero no sólo este reemplazo de elementos importados alcanza a las automotrices, sino que también al rubro electrónico, ya que es destacable que el polo tecnológico de la provincia de Tierra del Fuego, solamente en los primeros cuatro meses de este año y con relación a siete productos que se importaban masivamente, consiguió achicar esas compras por 600 millones de dólares, en comparación con lo sucedido el año 2010. 

En nivel de menciones, en cuanto a las firmas internacionales que han comenzado a producir con sus propias plantas en el país son Black Berry, Case New Holland, Nokia, Glenmark, Mercedes Benz, Yamaha, Honda, Moura, Nike, Converse, Samsung, Hewlett Packard y Suzuki. Un listado que da una idea muy clara y concreta sobre la importancia que tiene este objetivo de acrecentar la producción local en la mayor cantidad posible de rubros.

La venta de usados

En el pasado mes de julio la venta de automotores usados tuvo una suba de 23,1% con relación a igual mes de 2010, siendo el total de unidades comercializadas de 158.770 con lo cual se sostiene el vertiginoso ritmo que llevaría a concretar este año un récord histórico.

En el sector automotriz todo tiene que ver con todo, ya que esta expansión de la venta de usados recibe el impulso de la demora que hay en la entrega de unidades cero kilómetro, debido también a la elevada demanda de las mismas. Es por esa razón que la Cámara de Comercio Automotor, en su informe, destaca que "esto beneficia a las agencias de usados porque los consumidores se vuelcan a modelos seminuevos, con bajo kilometraje y tiempo de uso".

De tal modo, contabilizada la comercialización del mes de julio, tenemos que en los primeros 7 meses de este año se llevan vendidas 1.028.528 unidades usadas, implicando una suba de 21,1% respecto a igual lapso del año anterior, en el cual se habían comercializado 849.152 vehículos.

De acuerdo a las proyecciones que se hacen para este año completo, se podría llegar a la comercialización de 1.700.000 unidades, lo cual se convertiría en récord histórico.

Un dato a tener en cuenta, es que debido a la incentivación que se hace del consumo, los automotores constituyen un elemento en el cual encuentran refugio quienes tratan de resguardar sus ahorros de la inflación, especialmente de sectores de medianas posibilidades, que no alcanzan a la adquisición de inmuebles, ya que justamente los ladrillos siguen siendo la inversión más segura. Luego entonces los automóviles, y después todos los electrodomésticos y aparatos ligados a la informática.

De tal modo, todo el sector automotor, tanto en cero kilómetro como usados, mantiene un ritmo expansivo realmente importante, que impacta directamente en el sostén de la economía.