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Editorial Domingo 5 de Agosto de 2012

El Día del Niño

Para los chicos de Rafaela, este 5 de agosto será su día anual, anticipado con una gran fiesta en instalaciones de la Sociedad Rural.

Redacción

Por Redacción

Aunque la tradición dice que el Día del Niño se celebra el segundo domingo de agosto, habiendo sido una de las excepciones el corrimiento del año pasado cuando por las elecciones primarias presidenciales fue postergada la fecha, mientras que esta vez, aquí en Rafaela el festejo es anticipado para este domingo. Tanto por la ocupación de las instalaciones de la Rural con los preparativos de la Expo el día 12, además de la coincidencia con la carrera en el Autódromo donde habrá actividades previas de UNICEF. 

Más allá de fechas y movilidades de la misma, especialmente en un tiempo donde esta clase de modificaciones del calendario son bastante frecuentes, lo que en realidad importa y tiene la trascendencia bien ganada, es que hoy festejamos el Día de los chicos. Y que con una mayor visión del alcance comercial derivado de los regalos que son objeto, como siempre sostenemos frente a alguna de estas exaltaciones de facetas humanas, el día de los niños debe ser en realidad cada uno de los 365 del año. Proporcionándoles, afecto, comprensión y todo aquello que contribuya no sólo a hacerlos felices, sino buenas personas en el futuro, para lo cual, es imprescindible el ejemplo, que es al fin y al cabo el que más trasciende e impacta en los más pequeños, al momento del balance del recuerdo.

Hoy, en este domingo especial, los agasajamos con el cariño más sincero que podamos brindarles, ya que es lo que señala el camino por el cual el tránsito de la vida es más sencillo y positivo. Seamos entonces todo lo comprensivos que el momento impone, para que veamos en ellos, los más chiquitos de la familia, esa necesaria luz en sus ojos, que despliega una mezcla de alegría y esperanza. Sus sonrisas, constituirán sin dudas la más enorme retribución que puedan ofrecernos.

Los más chicos, esos "locos bajitos", tienen este domingo aquí en Rafaela su día anual, que además del ámbito familiar, en esta ocasión se extenderá con una espectacular fiesta en instalaciones de la Sociedad Rural, en calle Brasil, cristalizando de tal manera una iniciativa surgida tiempo atrás en la cual confluyen en la organización, además de la entidad ruralista, la Municipalidad, la CGT y el Centro Comercial e Industrial, desarrollándose entre las 14 y las 18.

Constituirá sin dudas una jornada en la cual los niños compartirán junto a sus familias, una tarde muy especial y desbordante de atracciones, ya que habrá una docena de castillos inflables, camas elásticas, mimos, payasos, actividades de lectura y escritura, manualidades, acciones de educación vial, talleres musicales, como así también variedades deportivas en las que tomarán parte clubes de la ciudad, completándose con una serie de espectáculos breves que se irán concretando en diversos sitios del amplio predio ruralista, como para que nadie se quede sin participar de una jornada que además tendrá un cierre saliente con un show.

Como forma descriptiva de los niños rescatamos algunas reflexiones de internet, en las que se los pinta de manera muy interesante, como por ejemplo "vienen (los niños) en diferentes medidas, pesos y colores, pero todos tienen el mismo credo: disfrutar de cada segundo, de cada minuto, de cada hora, de cada día, y de protestar ruidosamente -acudiendo a su única arma- cuando llega la noche y los padres los ubican en la cama".

"A los niños se los encuentra dondequiera: encima, debajo, dentro, trepando, colgando, corriendo o brincando. Las mamás los adoran, las niñas los detestan, los hermanos mayores los toleran, los adultos los ignoran y el Cielo los protege". Algo, o mucho de esto, en realidad hay.

"Pero hay muchos más, cual más interesante, por ejemplo: "Un niño es la verdad con la cara sucia, la belleza con una cortada en el dedo, la sabiduría con el chicle en el pelo y la esperanza del futuro con una rana en el bolsillo".

"Cuando estás ocupado, un niño es un carnaval de ruido desconsiderado, molesto y entrometido; cuando quieres que dé una buena impresión, su cerebro se vuelve de gelatina o se transforma en una criatura salvaje y sádica orientado a destruir el mundo y a sí mismo", o bien, una descripción muy cercana como "Un niño es una combinación. Tiene el apetito de un caballo, la digestión de un traga espadas, la energía de una bomba atómica, la curiosidad de un gato, los pulmones de un dictador, la imaginación de Julio Verne, la vergüenza de una violeta, la audacia de una trampa de fierro, el entusiasmo de una chinampina y cuando hace algo tiene cinco dedos en cada mano". 

Hoy, al menos aquí en la ciudad, es el día de ellos, los más pequeños de la casa. ¿Hace falta decir algo más?

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