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Editorial Viernes 12 de Abril de 2013

El cortoplacismo

Consecuencia de una serie de factores, especialmente por la inflación, tanto los plazos fijos como los préstamos otra vez se han volcado al corto plazo. Impacta negativamente en el financiamiento de las empresas.

Redacción

Por Redacción

Desde la aparición del cepo cambiario, el fuerte alza del dólar paralelo, las mayores expectativas de devaluación y la cada vez mayor informalidad de la economía, el corto plazo ha comenzado a imponerse en casi todos los planos, en especial en lo que hace a la actividad de los bancos, que van reduciendo cada vez más los plazos de sus préstamos. Una situación preocupante sin dudas, pues impacta directamente en las posibilidades de las empresas respecto a su financiamiento.

De acuerdo con estadísticas del propio Banco Central, sobre las cuales elaboró un  informe la Fundación Mediterránea, el 88% de las líneas de crédito a las grandes, medianas y pequeñas empresas son actualmente a menos de 12 meses de plazo, y dentro de ese volumen un 75% fue acordado a 6 meses o menos.

Estas cifras dan cuenta muy claramente la limitación en alza que vienen experimentando los bancos, que cada vez es mayor, al punto que entre marzo de 2012 y marzo 2013 el dinero que se encuentra depositado en los bancos a menos de 60 días de plazo pasó de representar el 55% al 60,2% del total de los plazos fijos. Es decir, la gente se vuelca cada vez más al cortoplacismo, impulsada por la onda inflacionaria que a pesar del congelamiento de precios y de algunas medidas aisladas, se mantiene en plena expansión.

De acuerdo al informe de la Mediterránea, que obtiene los datos del boletín de estabilidad financiera del BCRA, los préstamos destinados a las empresas representan el 52,2% del dinero de los bancos destinados al sector privado, en tanto que las líneas destinadas a sectores familiares cubren el 47,8% restante. Una situación que se fue equilibrando y que dista mucho de lo que fueron históricamente los préstamos bancarios, pudiéndose mencionar en tal sentido que entre 2003-2005, tras la salida de la convertibilidad, el 62,8% era destinado a las empresas y sólo el 37,2% a grupos familiares, lo cual tiene mucho mayor razonabilidad.

El cortoplacismo tanto de los créditos como de los ahorros ha motivado que la gente mantenga preferentemente los billetes fuera del sistema financiero, es decir, de los bancos, con lo cual se produce una situación similar al efecto que tenía la fuga de capitales cuando existía la libertad cambiaria.

Es que según el Central, un 70% de la base monetaria actualmente en circulación se encuentra en poder del público, fuera de los bancos.

Desempleo europeo

Mes a mes Europa sigue aumentando la cantidad de personas desempleadas, habiéndose llegado a fines de febrero a 26,3 millones que se encuentran sin trabajo, conformando el 10,9% del total de la población del bloque, correspondiendo a los 17 países que comparten el euro como moneda única desde 1999 una parte importante de desocupados: 19,7 millones, produciéndose una subida mensual permanente, que en el caso de este segundo mes de 2013 fue de 76.000 nuevos desempleados en el conjunto del bloque y 33.000 de la zona euro.

Si la mirada se echa hacia el año anterior para establecer comparaciones, la Unión Europea incrementó 1,8 millón de desocupados y la Eurozona 1,7 millón, lo cual viene dando un promedio de 150.000 afectados más cada mes, tratándose de datos realmente dramáticos y que nada tienen que ver con las reiteradas promesas que se formulan desde la Comisión Europea en cada ocasión en que se reclaman nuevos ajustes.

El bloque europeo se encuentra en recesión desde abril de 2012, lo que extiende el fenómeno a un año y sin perspectivas de poder aspirar a una recuperación más o menos cercana, profundizándose la gravedad por haber sido prácticamente agotados los fondos para asistencia por desempleo, con lo cual va creciendo la cantidad de familias que no cuentan con recurso alguno. 

Las cifras más alarmantes las tienen España y Grecia, ambas muy similares en el orden de 26,5% de su población económicamente activa. En el caso español, que es el más conocido por mantener estadísticas actualizadas -en cuanto a los griegos los datos corresponden al pasado mes de diciembre-, ya ha sido traspuesta la barrera de los 6 millones de personas sin trabajo.

Desde el Parlamento Europeo con sede en Bruselas se sigue insistiendo que 2014 será el punto de partida de la recuperación y la creación de empleo, aunque igual se había dicho sobre 2010, 2011 y 2012 sin que nada favorable haya ocurrido, sino todo lo contrario, continuó empeorando.

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