Por Redacción
Todo lo relacionado con las zonas de áreas y parques industriales vino experimentando una importante expansión en el ámbito de la provincia de Santa Fe, en cuanto al afianzamiento de los ya instalados, como así también en la autorización y creación de nuevos de estos espacios destinados a la producción, contándose con 38 de estos complejos, los que vienen recibiendo asistencia financiera tanto de la Provincia como de la Nación, sea para obras de infraestructura en algunos casos como obras menores en otros, que van terminando de consolidar su posicionamiento.
Sin embargo, todo avance, todo progreso, siempre encuentra alguna clase de obstáculo por superar, planteándose en este caso como uno de los mayores inconvenientes la imposibilidad de contar con la provisión de gas natural en muchos de estos lugares de asentamientos industriales, lo cual significa un impedimento que traba el traslado de muchas plantas fabriles para las cuales el contar con este combustible es imprescindible para su funcionamiento.
De todos modos, y aún con el inconveniente señalado que seguramente irá superándose con el tendido de gasoductos, las zonas industriales igualmente se encuentran en tiempos de sostenido crecimiento, impulsado por una serie de factores de expresa consideración, como por ejemplo la cada vez mayor exigencia en cuanto al retiro de las zonas urbanas de las plantas industriales, con todas las consecuencias negativas que tal aspecto impacta en las cuestiones del cuidado del medio ambiente, y de la degradación en la calidad de vida que suelen provocar humos, olores y otros tipos de contaminación ambiental. Lo cual, deja vislumbrar que si bien por ahora se van extendiendo los plazos en cuanto al traslado a otros lugares más adecuados -las áreas y parque industriales-, llegará el momento en que se convertirá en una exigencia, motivo por el cual es inteligente irlo concretando anticipadamente, con el tiempo suficiente para que todo se haga sin apuros ni mayores inconvenientes, como suelen producirse cuando llega el apresuramiento.
Pero además, otra razón que influye fuertemente y también tiene directa relación con la actividad de los centros urbanos, es la transferencia de cargas, que en sectores densamente poblados y con calles no adecuadas para la circulación de grandes transportes, se dificulta en exceso la posibilidad de estas acciones, las cuales en cambio son de sencilla realización en grandes espacios, con amplios accesos, conectado a rutas troncales, como son los parques industriales.
Si a todos estos aspectos, añadimos las políticas de promoción que implementan las municipalidades para la radicación en estos lugares, otorgando facilidades y algunos otros beneficios, más el apoyo de la Provincia en cuanto a las obras complementarias y de abastecimiento de servicios, entonces se termina por conformar lo que bien puede definirse como un escenario muy propicio para que estas zonas industriales vayan afianzando su prosperidad.
Aquí en Rafaela tenemos casos bien precisos de lo que se afirma, con un Parque Industrial que completó su capacidad hace muchísimo tiempo, y que ahora está sucediendo lo mismo con el Parque de Actividades Económicas que se creó al lado y que ya tiene prácticamente colmada su capacidad.
Justamente, Rafaela y Las Parejas son los dos lugares de la provincia que cuentan con dos espacios de estas características, a quienes se agregan Venado Tuerto, Firmat, Rufino, Sunchales, Casilda, Villa Constitución, Arequito, Carcarañá, Correa, Armstrong, Cañada de Gómez, Gálvez, Colonia Belgrano, Sauce Viejo, San Justo, San Cristóbal, San Guillermo, Reconquista, Malabrigo, Villa Ocampo, Las Toscas, Avellaneda, Pérez, Murphy, San Gregorio, Bigand, Coronel Domínguez, Alvear y Villa Gobernador Gálvez, una mención puntual que hacemos sobre este mapa industrial de la provincia, ya que así se puede tener una mucho más certera impresión del alcance que tienen esta clase de zonas industriales, diseminadas por toda la bota santafesina.
El avance también se registró en lo legal, acompañando el crecimiento material de todo el conjunto, cuando el año pasado en la Legislatura santafesina se produjo la actualización de la ley de parques, siendo aprobada la Ley 13.131, creándose la figura del fideicomiso y la posibilidad de administración a cargo de consorcios.
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