(Por Darío Gutiérrez).- Desde el año 1995 el Club Peñarol tiene en comodato la cesión de un predio del Ferrocarril Belgrano. Con el paso de los años, el sector fue ampliando su puesta en valor con numerosas obras realizadas por sus dirigentes y socios con mucho esfuerzo, sumada a alguna ayuda estatal, y es un orgullo de los peñarolenses.
Pero en las últimas horas la Comisión Directiva tuvo una comunicación que indudablemente genera cierta preocupación por "El Semillero".
"Ferrocarriles Belgrano nos mandó una carta documento para el desalojo del Predio 1 en calle Francia y Zanetti. Esa carta la contestamos, para nosotros es todo una cuestión política. Creemos que están haciendo un relevamiento de lo que tienen (en cuanto a terrenos), y está de por medio una posible privatización del Ferrocarril", expresó Alejandro Báez, presidente de "Peña".
En ese espacio actualmente se desarrolla la práctica de fútbol. Anteriormente estaba también el hockey, pero luego se trasladó a la parte 2 (en Aragón y Ramón y Cajal) de las instalaciones del Club.
"Creemos que va a haber un largo trecho desde que se pueda privatizar, si se aprueba la Ley, esperemos que durante ese tiempo podamos ir realizando las gestiones necesarias para no tener complicaciones y garantizar que ese predio seguirá siendo nuestro", agregó el dirigente.
EL MAL RECUERDO DEL CASO SANTANA
Parece increíble, pero Peñarol no consigue tener paz con cuestiones judiciales. No hace mucho tiempo que pasó "El caso Santana", del cual recordamos los principales detalles.
El 13 de agosto de 2012 la Liga Rafaelina de Fútbol recibía una nota del Consejo Federal que le ordenaba la quita de 6 puntos para el equipo de Villa Rosas, por disposición de la FIFA, debido a una deuda que el club rafaelino mantenía con el Wolfsburgo de Alemania. Un día después, en la reunión del Consejo Directivo de la Liga, se hacía efectiva la quita de puntos.
En realidad, el equipo alemán reclamaba desde hacía ya un tiempo una compensación por la transferencia del jugador Jonathan Santana que, misteriosamente, se había realizado en el 2006 desde Peñarol al Wolfsburgo, pero en realidad, el jugador había sido transferido en agosto de ese año desde River Plate hacia Alemania. El reclamo que llegó al club rafaelino era por una supuesta negociación hecha por ellos en el mes de julio del mismo año.
La quita de puntos se debió a que Peñarol no cumplió con un pedido de FIFA que había dispuesto que el Club de Villa Rosas pague una cláusula de 50 mil euros que le correspondía por el incumplimiento del contrato de Santana en el club alemán.
Lo que llamaba la atención es que el jugador nunca había pasado por Peñarol ni tampoco figuraba en los registros de Liga Rafaelina.
Los dirigentes llamaron a una Asamblea de socios, y se decidió vender un terreno que en aquel momento tenía Peñarol en la localidad de Bella Italia. El valor del inmueble se aproximaba a la deuda que reclamaba el Wolfsburgo, y era la solución más rápida para dar respuesta al problema.
Los de Villa Rosas cumplieron con los establecido por FIFA y pudieron saldar la deuda con el Wolfsburgo antes de fin de año, y además conocieron toda la verdad sobre el caso, donde se comprobó que la Comisión Directiva cargo del Club en 2005 tuvo responsabilidad en la triangulación del pase.
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