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Quién firma esta columna desde hace muchos años, como cronista de la Selección Nacional y a manera de cierre de la histórica conferencia de prensa luego de la final que La Gloriosa le ganara a Francia, le pregunté a Lionel Scaloni en Doha, sobre qué escenario pronosticaba para el futuro inmediato en relación a la continuidad de Lionel Messi. En ese momento todo era euforia como para encontrar una respuesta relajada y sincera, su equipo acababa de anotar uno de los más grandes hitos del deporte argentino, en un partido que para muchos biógrafos de ésta disciplina, fue el más espectacular en la historia de los mundiales.
No obstante esta salvedad, volvería a formularle la misma pregunta, en virtud de la trascendencia de su reflexión, en definitiva, había sido Scaloni el entrenador que mejores rendimientos dentro y fuera de la cancha le extrajo a este genio del fútbol planetario y autoridad, no le faltaba para meterse en ese terreno escabroso pero necesario de transitar alguna vez: “Dejemos que él lo decida, no soy quién para córtale su carrera, creo que se ganó con creces el derecho a decidir y siempre habrá un lugar en este equipo”.
Me sentí gratificado y respetado como periodista por los argumentos que Scaloni esgrimió en esas circunstancias, algo que se repetiría como tema insoslayable, en entrevistas futuras con otros colegas, frente a los cuales, también prefirió no pronosticar nada que lo comprometiera, ante un deportista fuera de lo común que pudiera (entiendo que todavía podría hacerlo), de forma asombrosa, jugar como longevo en la elite internacional.
A pesar de los mejores deseos y estas condiciones sobresalientes que Messi conserva en los umbrales de los 37 años -el próximo 24 de junio los estará celebrando en pleno desarrollo de la Copa América-, hay un designio cronológico por el que también ya pasaron sin poder doblegarlo, leyendas como Jordan, Federer, Pelé y Johan Cruyff, entre tanto otros o sin apelar a ejemplos de otras nacionalidades, su gran socio en la Selección en todos los tiempos, Ángel Di María, quien colgará la albiceleste al finalizar éste torneo que se va a jugar en los Estados Unidos, a los 36 años y en un gran nivel. En consecuencia, el final se aproxima y su trabajo será resolverlo con templanza y mucha contención, ya que ninguno de los mencionados, alcanzaron un nivel de popularidad global y de idolatría como la que detenta el rosarino.
En vísperas de otro desafío como lo será, comandar al actual Campeón de América, en esta reválida que se pondrá en marcha en menos de una semana ante Canadá, Leo ofreció en una entrevista que le realizo Martín Arévalo, ciertas pistas para leerlas entre líneas o en superficie, conducentes a ese finiquito al que no demoraremos demasiado en asistir.
Leo se animó a tocar este tema por demás espinoso para todos los amantes del deporte. “¿Estás asumiendo que queda menos? ¿lo disfrutas más por eso? Creo que el mundo no está preparado para que vos dejes el futbol, ¿y vos?”, le planteó el periodista Martín Arévalo.
“Y yo creo que tampoco, toda mi vida hice esto. Me encanta jugar a la pelota, disfruto de los entrenamientos, del día a día, de los partidos... Y sí, un poco de miedo a que se termine todo siempre está. Fue un paso difícil dejar Europa para venirme acá. El hecho de haber sido campeón del mundo ayudó mucho y a ver las cosas de otra manera también. Pero no lo pienso, intento disfrutar. Por eso disfruto muchísimo más todo, porque soy consciente de que cada vez falta menos. Y la paso bien en el club, con la suerte que tengo de tener compañeros y amigos al lado. La paso bien en la Selección donde tengo compañeros y amigos también; y muchos. Y disfruto de los pequeños detalles que sé que cuando no juegue más voy a extrañar”, sentenció.
Al ser consultado sobre los pasos que seguirá antes de abandonar la práctica profesional, aceptó que hoy en día en su mente no está dar otro salto más allá de la MLS. “¿Tu último club es el Inter?”, le plantearon. Sin dar una palabra determinante, dejó en claro que hoy ese es su plan: “Y, sí... Creo que sí. Hoy por hoy creo que va a ser mi último club”. Con esta frase, el rosarino dejó claro que no tiene en la cabeza jugar en Newell’s o retornar al Barcelona en algún momento.
En julio de 2023, Messi llegó al Inter Miami, revolucionó la Major League Soccer (MLS) y a todo Estados Unidos. Firmó contrato hasta fines de 2025 con una opción de renovación hasta 2026, año en que se disputará la Copa del Mundo en Estados Unidos, México y Canadá, competición en la que todavía no confirmó su presencia.
Hace unos días, el capitán albiceleste había declarado en otra entrevista: “¿De qué depende mi presencia en el Mundial? De cómo me sienta, de cómo esté yo físicamente y de ser realista conmigo mismo. Y saber si estoy a la altura de poder competir y ayudar a los compañeros que tengo al lado. Saber cómo estoy físicamente. Todavía queda un tiempo y no sé cómo voy a estar en ese momento. También la edad es una realidad que está ahí, si bien es un número, los partidos que voy a jugar yo, tampoco son los mismos que jugaba cuando estaba en Europa en competición, que eran cada tres días, o en Champions o en la Liga donde estaba, tanto en Francia como en España”.
ESTA NOCHE ANTE GUATEMALA CON EL EQUIPO DE GALA
En el último amistoso antes de la Copa América, Scaloni colocará, excepto los casos de Cuti Romero y Rodrigo De Paul, la formación estelar campeona de todo, con Leo Messi desde la partida y esa dupla de acero en el medio juego integrada por Alexis Mac Allister y Enzo Fernández, Nico González -jugador fetiche del entrenador- ocupará el ala izquierda y el Toro Martínez, último goleador del Calcio, el centro del ataque, en una pulseada que le ganara a Julián Álvarez, según el último entrenamiento.
El partido entre la Selección argentina y Guatemala se disputará desde las 21:00 hs. en el estadio FedEX Field de Washington DC, con transmisión en vivo por TyC Sports y Telefé. El historia muestra dos enfrentamientos entre ambos seleccionados, con sendas victorias de la Argentina. El primero terminó con un triunfo albiceleste por 4 a 0, con tres goles de Messi y otro de Augusto Fernández. El segundo, en septiembre de 2018, fue por 3 a 0 con tantos de Gonzalo ‘Pity’ Martínez de penal, Giovani Lo Celso y Giovanni Simeone, en lo que fue el del debut de Lionel Scaloni como entrenador después del fracaso en el Mundial Rusia 2018.