Lollapalooza y la economía argentina

Suplemento Economía 26 de marzo de 2023 Por Guillermo Briggiler
Las diferencias entre el mega evento musical que acaba de terminar en Buenos Aires, con múltiples propuestas de todos los estilos, y nuestra empobrecida economía donde siempre suena la misma canción.
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FOTO LOLLAPALOOZA FESTIVAL. Cada año recibe a lo mejor de la escena musical nacional y a las mayores bandas y artistas internacionales en el Hipódromo de San Isidro.

La dinámica del mega recital Lollapalooza, realizado el pasado fin de semana en Buenos Aires, implica un muy diverso público, diferente en edades y gustos musicales. Participan de este mega evento grupos de música argentinos y extranjeros, artistas, productores musicales y DJ, todos de muy distintos orígenes y de diversos géneros musicales. La dinámica es que van tocando en distintos escenarios y horarios, para que el público elija a cuál ver, múltiples repertorios para todos los gustos. En cierta medida, como el Cosquín Rock cordobés. 
Por el contrario, nuestra economía, desde hace décadas suena al mismo compás, el del Gasto del Estado. El público o los ciudadanos en este caso, son los mismos, los signos políticos que gobiernan cambian, los ministros de economía suben al escenario uno tras otro, pero la música es la misma. La dinámica parece ser gastar y gastar, al término ajuste se lo trata como mala palabra, aun cuando sea de erogaciones a todas luces perniciosas. Como ejemplo podemos citar las pérdidas de algunas empresas públicas, donde Aerolíneas Argentinas viene a ser el colmo, pierde dinero por todas las vías y se termina solventando con la recaudación del IVA que paga un padre de familia al adquirir incluso una magra cena para sus niños y como percibir el 21% del valor de los alimentos y bebidas en impuestos no era suficiente, subieron la alícuota al 24%. O pérdidas que también se cubren recaudando con el arancel, recientemente colocado sobre las computadoras, notebook y otros componentes informáticos indispensables para la educación de las futuras generaciones. La empresa citada tiene casi el monopolio aéreo argentino, pero no sabe cobrar un precio que supere sus costos operativos y tampoco parece saber cómo adecuar costos a la operatoria para ser competitiva. Clarín publicó hace tres días que la agencia estatal de noticias y publicidad oficial Télam perderá este año $ 5.735 millones, esto es algo así como 15,7 millones de pesos por día. 

Desde hace décadas, el Gasto Público, que siempre supera a los ingresos por impuestos que coercitivamente se recaudan, viene siendo financiado de diferentes maneras. En el pasado se utilizaron los ingresos por privatizaciones de empresas públicas para obtener los fondos.
Posteriormente y en muchas ocasiones se tomaron créditos en el exterior con diferentes organismos, también se emitió deuda externa suscripta por privados. Cuando esto no era suficiente se optó por estatizar los importantísimos fondos destinados a la jubilación de los argentinos que estaban siendo administrados por las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP), los que pasaron al Anses y desde ahí a financiar el Gasto Público.
Actualmente se manotea también de la caja jubilatoria, canjeando los bonos en dólares que posee por títulos en pesos de menor calidad. También se tomaron préstamos con el Fondo Monetario Internacional, incluso consiguiendo el récord de ser el país que tomó el crédito más grande en toda la historia de ese organismo, préstamo que ya tiene más de una refinanciación y postergación.
Como verán pasaron diferentes signos políticos en la confección de la música que tocan los artistas de la economía y política del país, pero el espectáculo es el mismo, gasto y más gasto. Además, en todos los períodos se subió la carga impositiva y se sigue haciéndolo, aun cuando tenemos una de las presiones impositivas sobre la población más grandes del globo, situación que empuja a muchas actividades a la clandestinidad, en lugar de adecuar los impuestos para que la tentación de estar fuera de la ley sea solo para los de moralidad pobre y no para quien necesita sobrevivir.
Señores, es el momento de cambiar la música y seguramente los artistas.

#BuenaSaludFinanciera
@ElcontadorB
@GuilleBriggiler

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