(Por Darío Gutiérrez, enviado especial a San Francisco). - La ilusión del ascenso para 9 de Julio quedó postergada. Al menos por una semana, ya que el Consejo Federal entre gallos y medianoche analizó un cambio reglamentario para el torneo, brindando dos nuevos ascensos entre los perdedores de las finales, el cual se confirmaría hoy. Pero lo cierto es que el equipo de Marcelo Werlen no pudo ofrecer su mejor versión, o la pretendida en una final, ante Atenas de Río Cuarto y perdió 1 a 0 en la cancha de Sportivo Belgrano.
Si bien los casi 2.500 hinchas julienses que colmaron sus lugares en la cabecera norte del "Juan Pablo Francia" reconocieron con aplausos al León, seguramente esperaban un poco más para un partido tan decisivo. Es cierto que el gol que define el partido queda marcado por una infracción sobre Joaquín Gómez en la jugada previa que el sanjuanino Pablo Nuñez ignoró, pero en lo demás fueron pocos los momentos en que los rafaelinos que nuevamente vistieron de negro, pudieron superar en el campo al rival.
Yendo por etapas, en el primer tiempo tuvo algunos pasajes interesantes y varios donde la pasó mal, al punto que Joaquín Gómez terminó siendo determinante con dos atajadas.Werlen dispuso finalmente el ingreso de Laena por Vera para armar un esquema 4-1-3-2 con Aguilar metiéndose casi entre los centrales cuando el equipo defendía para marcar al media punta Castro.
Pero pese al buen pie de Larrea, Ruiz Diaz y Laena, pocas veces hubo chances de encontrar de buena forma a Monserrat e Ibáñez. Solamente en un lapso de 5 minutos entre los 20 y los 25, las apariciones del goleador que juega por a derecha sacándose un par de rivales de encima generaron alguna zozobra en el fondo riocuartense, pero el centro final no encontró a destinatarios julienses.
Del otro lado, cuando Ndongo pudo encarar con espacios mostró desequilibrio en el sector derecho, mientras que cerca del final del primer tiempo Oyola también complicó a un Martinez que llegó con lo justo en lo físico. Un cabezazo en el travesaño de Talavera en un tiro libre desde la izquierda, un gran achique de Gómez en un mano a mano con Ndongo que le había ganado a Loboa, y un brillante manotazo otra vez del arquero ante un tiro libre de Tello, fueron tres oportunidades netas que tuvo Atenas y le dieron una mejor imagen al cabo de los 45 minutos iniciales.
El segundo tiempo arrancó con el cambio de Vera por Laena en 9 de Julio, con el cual Welrlen buscó darle más contención al sector medio. El recién ingresado fue donde había jugado Aguilar y Maxi se adelantó unos metros, tirándose Ruiz Diaz a la izquierda.
El partido era equilibrado, con varias interrupciones en el marco de un arbitraje de Nuñez acorde al trámite, pobre. Después que Montivero moviera el banco para meter a Quiroga y Barrera, Atenas tuvo más dinámica y cuando iban 21, Gómez debió salir presuroso ante la entrada de Castro sobre la izquierda del ataque cordobés, la pelota salió rebotada (el botín del delantero dio en la cara del arquero) y le quedó a Quiroga que remató al travesaño, pero el rebote lo capturó Parodi y con un cabezazo suave abrió el marcador.
De allí en más, el "9" intentó recomponerse y buscar con mayor gente en ofensiva. "Satanás" puso a los delanteros y volantes ofensivos que estaban en el banco, pero la falta de precisión que se vio en toda la tarde fue una constante hasta el silbatazo final, inclusive en el final con un marcado desorden. Por ejemplo Ibáñez más de una vez quedó para tirar el centro sobre la banda, cuando siempre pesa más en el área. 
Después de los 7 minutos de descuento, llegó el epílogo con el festejo de Atenas y una mezcla entre bronca y tristeza de los jugadores rafaelinos. Gómez, por ejemplo, fue a recrciminarle una vez más a Nuñez, junto a otros compañeros, mientras que árbitro se retiraba custodiado por efectivos policiales.
Fue una chance que dejó pasar 9 de Julio, pero tendrá que reponerse rápido, porque de la nada le sale otra oportunidad. Tiene una semana para compenetrarse y ver si -posiblemente ante Camioneros de Salta- puede aprovecharla.