El Ballet Folklórico de la Universidad Nacional de las Artes*

La Palabra 14 de diciembre de 2019 Por None
por Rubén Suáres - bailarín y director del Ballet Folklórico de la UNA (Buenos Aires)
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archivo UNA El Pericón: Danza de culto para el sentimiento de Patria por el Ballet Folklórico de la

Quiénes integran el Ballet folklórico

El proyecto está vinculado a todos los estudiantes regulares que cursan una de las carreras del Departamento de Folklore, pueden ingresar a este ballet. Estudiantes de las carreras pueden ingresar, todos los años hacemos audiciones. Está integrado por doce parejas, dos maestros egresados de la casa y un asistente de vestuario. El proyecto está direccionado a que la producción de estudiantes y profesionales de la casa estén representados en el ballet. Tengo a cargo la dirección general. Dentro de poco estamos por estrenar una nueva obra que es un bailarín del Ballet Folklórico Nacional que fue integrante de nuestro primer elenco. Y hoy es uno de los coreógrafos.

Lo que me interesa lograr en el ballet

Primero que es un proyecto educativo que está instalado dentro de una carrera, entonces uno de los objetivos fundamentales es que el alumno se forme, que tenga disciplina, que encare esta carrera o por lo menos tenga la experiencia de entender que es una carrera que la elige y que la desarrolla en el futuro y tiene que trabajar para tener logros. Tiene que tener determinadas características que hagan que su trabajo sea productivo, con respeto por la profesión, por los maestros. Estas son las bases educativas y de valores. Y lo que aspiramos con el equipo de trabajo es que esto crezca, porque creemos que es sólido, y tiene una calidad artística importante, pueda ser embajador, representante de la universidad en distintos puntos del país, cosa que a veces nos cuesta. Cuesta poder mover tanta gente. Como objetivo de producción sería ése. Poder llevar lo que hacemos a distintos lugares el país. Además, tenemos la compañía de tango con la misma estructura. Hay algo que nos pasó a todos y es que el proyecto se fue asentando. Lo que teníamos planeado al inicio lo fuimos cerrando con objetivos y con logros. De todos los departamentos de la UNA el Ballet folklórico es uno de los elencos que viene pasando gestiones.

Cómo encarar el abordaje de la danza folklórica 

Una de las características que tiene en este momento el ballet es que no es de autor. La idea es que sea un elenco donde contiene las visiones estéticas de diferentes coreógrafos. Nuestro repertorio actual es: la apertura Criollaje, una obra de Matías Rodogno, egresado de nuestra casa y que está a cargo del ballet con una perspectiva bien gauchesca que tiene un color y una manera de interpretarse; después el chamamé de Teresa Parodi y la coreografía está a cargo de otro maestro egresado de esta casa y egresado del elenco Mariano Zozaya y tiene una visión un poquito más moderna; sigue una obra de mujeres de Candelaria Torres, también egresada de esta casa que construyó está estética femenina; y la última es una obra mía gestada en la compañía independiente De las trincheras, que cabía muy bien en un programa universitario. Si uno no traiciona la idea de quién soy, adónde estoy, qué hago… mirarse en uno mismo, uno mismo es el folklore.

¿Hasta dónde es auténtica esa danza? ¿Cuáles son los valores éticos para tener en cuenta?

Dicto una materia que se llama Interpretación coreográfica de las danzas folklóricas y el eje de la materia son estas preguntas. Justamente cómo componer coreográficamente nuestras danzas criollas y populares sin traicionar y convertirlas en otra cosa. La línea del límite es muy fina, y la perspectiva es de uno, qué se permite uno. Por ejemplo, vamos a trabajar con una zamba. ¿Cuáles son los elementos fundamentales? La relación entre dos personas caminando con un pañuelo y buscándose ambos. Hay sobrepaso y figuras circulares. Sobre estos patrones vamos a construir una coreografía. Quizás no sea el baile tradicional. Pero si los elementos están va a pulular por la composición la idea de la zamba. Es una reinterpretación de los bailes criollos. Hay que entender siempre que el núcleo central de todo esto son las danzas tradicionales con sus elementos. Asentarse ahí. Y si se quiere como dice el investigador Carlos Vega como en círculos concéntricos el resto de las otras cuestiones. Es ir y venir, alejarse y volver. Lo complicado es cuando uno se aleja y se perdió, porque no está conectado con ese núcleo que es la danza madre.

Qué presente tiene el Ballet y cuál es el sentido que le estoy dando para una mirada futura

Este año decidimos agendar a dos colegas invitados. La idea es seguir sumando miradas y posicionamientos estéticos. Que estos elencos sean contenedores de la diversidad y vamos a agendar algún maestro con la mirada más tradicionalista. Que pueda venir a darnos clases algún bailarín de distintas regiones del país con su sabiduría y sus saberes, que nos cuente. Que este elenco como la Universidad sea contenedora de diversos posicionamientos estéticos y de todo lo que pueda nutrirse de la provincianía, de las regiones, y de personas que nos puedan enseñar y aportar. Una cosa maravillosa que nos pasó sin pensarlo este año y el año pasado es que en un noventa por ciento están representadas todas las provincias. Y eso es maravilloso porque crecemos día a día observándonos simplemente.

La presentación en distintos lugares del país

Sí, hicimos giras por diversas provincias. Solamente necesitamos que quien nos invite se haga cargo de los viáticos completos del grupo.

Qué significa la danza para mí

La manera de expresar. Para mí la danza es algo en lo cual me siento feliz cada vez que me pongo. Me ha cambiado la vida. Me dio una perspectiva de vida. Es un medio de vida y para mí es la felicidad.

* El texto pertenece a la entrevista realizada por Raúl Vigini a Rubén Suáres

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