BUENOS AIRES, 10 (NA).- Empleados del gobierno de la Ciudad desmontaron ayer la totalidad de las rejas que dividían la Plaza de Mayo, ante un grupo de personas que, con clima festivo, entonaron la marcha peronista. Además, comenzaron a armar el escenario por el que pasarán varios músicos para festejar la asunción del presidente electo, Alberto Fernández, el cual estará situado frente a las rejas que separan la plaza de la entrada principal de Casa Rosada.
De esa manera, se cumplió un pedido que Fernández le hizo al jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta.
En una reunión que ambos mantuvieron en Puerto Madero el pasado viernes, Rodríguez Larreta accedió a iniciar el retiro del enrejado que había sido colocado en 2018.
"En la campaña electoral reclamé que levantaran las rejas que hoy distancian a la Casa Rosada de los argentinos. Hoy Horacio Rodríguez Larreta me transmitió su voluntad de retirarlas el 9 de diciembre", publicó Fernández el pasado 6 de diciembre en sus redes sociales.
Además, el presidente electo le agradeció al jefe de Gobierno porteño por ayudarlo a "terminar con las divisiones y unir a la Argentina".
En sintonía, el futuro ministro de Defensa, Agustín Rossi, remarcó que "la quita de las rejas de Plaza de Mayo tiene un valor enorme, la dirigencia política ya no está alejada de la sociedad".
Las tareas de acondicionamiento de la histórica plaza comenzaron el domingo por la noche y se extendieron hasta el lunes al mediodía, cuando se terminaron de quitar las últimas partes del cercado.
En tanto, el escenario que se montó junto a la Casa de Gobierno también será utilizado por Alberto Fernández y la vicepresidenta electa, Cristina Kirchner, para dirigirse a sus simpatizantes después de la jura de su gabinete de ministros en el Museo del Bicentenario.