Dos rafaelinos en una inolvidable experiencia en la fábrica del fútbol

Deportes 30 de julio de 2018 Por Pedro Ulman
Francisco Birchner y Bautista Tomatis participaron de un campamento de verano durante una semana en la Ciudad Deportiva del Barcelona, en España, junto a otros 77 chicos de 22 países. Y quedaron entre los 12 preseleccionados para integrar la Academia Kaptiva Sports que ofrece los mejores programas futbolísticos a jóvenes y talentosos jugadores de todo el mundo.
FOTO FAMILIAS BIRCHNER Y TOMATIS FOTO DE FAMILIA. Los profes del Barcelona con los chicos que formaron parte del campus, entre ellos Bautista y Francisco (en los círculos).  EN EL BARZA. Francisco y Bautista, muy felices en el lugar que querían estar.
FOTO FAMILIAS BIRCHNER Y TOMATIS FOTO DE FAMILIA. Los profes del Barcelona con los chicos que formaron parte del campus, entre ellos Bautista y Francisco (en los círculos). EN EL BARZA. Francisco y Bautista, muy felices en el lugar que querían estar.

Les encanta el fútbol, sueñan con ser profesionales y gritar goles en los estadios más grandes del mundo. ¿Quién no lo hizo acaso? Más aún después de haber participado durante una semana de un campamento de verano organizado por la Academia Kaptiva Sports en la Ciudad Deportiva "Joan Gamper" del Barcelona Fútbol Club, en España. Y si bien apenas tienen 14 años, la ilusión es enorme...
Los rafaelinos Francisco Birchner y Bautista Tomatis nacieron en el año 2004, comparten su pasión por el fútbol y además son compañeros en el primer año del Colegio San José. El primero juega en la posición número 10 en Ben Hur, y el segundo es el 9 de su categoría en Atlético. Del 16 al 21 de julio pasado se instalaron en Barcelona para vivir una semana desafiante: ser parte de un campus junto a otros 78 adolescentes de 22 países que se inscribieron en la propuesta de la Academia Kaptiva Sports. 
Fernando Birchner y Cristian Tomatis, los padres, explican claramente la propuesta. "Europa se encuentra en plenas vacaciones de verano. El club Barcelona también. Pero permite la utilización de toda su infraestructura y de su amplio equipo de profesionales con un acuerdo con Kaptiva para la realización de campamentos de verano que permiten dar clases de perfeccionamiento de fútbol. Al mismo tiempo, el premio para quienes se destacan es la posibilidad de quedarse 10 meses en la Academia. Para nuestros chicos fue una experiencia enriquecedora, inolvidable", coincidieron. 
¿Cómo surgió esta oportunidad de poder participar de este campus? Cristian Tomatis viajó por razones laborales a Barcelona y en el marco de sus inquietudes y su trabajo estuvo en las Academia Kaptiva para conocer su funcionamiento, sus objetivos y de qué manera están organizados. De ahí a recibir un correo con invitaciones para sumar a los chicos a este campamento fue solo cuestión de tiempo. 
Después compartir la información con amigos, investigar sobre la propuesta y tomar una decisión. Está claro que aprovecharon la ocasión, volaron al reino de Leo Messi, se presentaron en Kaptiva y dejaron a Fran y Bauti durante una semana. 
Los papás agradecen "tanto a Ben Hur como a Atlético porque se comportaron muy bien, permitiendo a los chicos viajar y disfrutar de esa semana en el predio de Barcelona" con los profesores de la histórica fábrica del fútbol mundialmente conocida como La Masía, de donde surgieron Messi, Iniesta, Fábregas, Busquets y Xavi Hernández entre otros tantos jugadores. 
Fran cuenta que durante todo el campamento -para chicos de entre 13 y 16 años- no pudieron ver a los padres aunque sí estaban comunicados cada noche. "Los entrenamientos fueron muy intensivos, las canchas perfectas. Todos los días pasábamos al lado donde entrenan los mejores jugadores del mundo como Messi, Suárez o Busquets. Fueron sensaciones muy lindas. La estadía fue muy buena, compartir con chicos de todo el mundo fue una gran experiencia, hicimos amigos con los cuales estamos en contacto mediante las redes sociales. Nuestros padres nos dejaron el lunes y nos buscaron el sábado, hablábamos con ellos al terminar el día cuando teníamos un tiempo libre, que no era mucho" describe.  
Y Bautista resume cómo era un día en el campus de Kaptiva en el Barcelona FC. "A las 7:10 sonaba el despertador, a las 7:45 había que hacer la fila para desayunar. Tipo 9:00 nos subíamos al cole para ir de la sede de Kaptiva a  la Ciudad Deportiva donde entrenábamos dos horas, regresábamos al complejo para el almuerzo y descansar durante una hora. Luego seguía el entrenamiento de la tarde. Después siempre había una actividad adicional, un día fuimos a la playa, otro visitamos el estadio de Barcelona, el Nou Camp", señala al detalle. "Al regreso a la noche, un baño, cena y nos devolvían el celular. A las 20 hs. terminaba la cena y hasta las 22 hs. teníamos libre, luego se apagaba la luz", agrega.
¿Y los entrenamientos? "Cada día teníamos una planificación diferente, pero se trabajaba mucho la posesión, mantener el control de la pelota, encontrar los espacios libres. En otro momento se hacían trabajos de coordinación, definición y control de la pelota. Después se jugaba al fútbol una especie de Liga interna, con equipos que se formaron en los distintos grupos", indican sobre lo que hacían en los mismos lugares donde se formaron Messi y su ballet.
¿El idioma? "El inglés era el idioma común, y si bien nosotros tenemos en la escuela no es lo mismo. Por eso quizás tal vez nos hicimos más amigos de los otros dos chicos argentinos que estuvieron en el campamento", admiten.  
El jueves 19 de julio fue distinto. Ese día Fran y Bauti tuvieron su cita con el destino: los profesores de Kaptiva le comunicaron a ambos que habían quedado seleccionados entre los 12 del total de 80 para integrarse a la Academia desde septiembre y por el término de 10 meses en coincidencia con el ciclo lectivo español. La chance comprende la posibilidad de alojarse en la residencia de Kaptiva, estudiar en una escuela secundaria trilingüe, perfeccionarse en fútbol y por supuesto integrar los equipos de la institución que juegan los torneos infantiles de la Liga de Cataluña, juegan con los mejores clubes del país como el Barza, Real Madrid o el Atlético de Madrid y además participan de campeonatos internacionales en Holanda, Francia o Italia. 
Sorpresa y media para Fran y Bauti. ¿Y ahora?
Agosto será un mes de decisiones en las familias Birchner y Tomatis. Si fuera por los chicos, no hay nada que pensar. Quieren ir. En realidad Fran está absolutamente decidido, Bauti le deja un margen a la duda. 
Desde Kaptiva consideran que ambos tienen condiciones pero que deben disfrutar del camino, de esta experiencia. Las posibilidades que se abren son varias. Puede suceder que los chicos vayan 10 meses y regresen o bien renueven el vínculo y continúen en la Academia más tiempo. Hay reclutadores de equipos europeos ligados a Kaptiva, por tanto aquellos que se consoliden con su talento, disciplina y actitud pueden tener opciones de ser futbolistas profesionales. No obstante, aquellos que no puedan hacer un camino en este deporte cuentan con la posibilidad de seguir estudiando en la Universidad de Nebraska, en Estados Unidos, que está vinculada a Kaptiva. 
"Más allá de lo que finalmente se decida, la experiencia fue buenísima. La Ciudad Deportiva de Barcelona Joan Gamper quizás es tres veces la dimensión del autódromo de Rafaela. Había chicos rusos, argentinos, colombianos, tailandeses, italianos, franceses entre otras nacionalidades. Esto fue un gran crecimiento para Bauti y Fran, sin duda", afirma Cristian. 
Entre tantos testimonios que definen la participación en un campus de este tipo, se destaca la del joven brasileño Felipe Santos. "Kaptiva Sports Academia significa: desafíos, dedicación, fortaleza, enfoque. En general, es una experiencia única en la vida. Los amigos que haces, las lecciones que aprendes, los momentos que experimentas, son cosas que llevarás contigo para el resto de tu vida".


Pedro Ulman

Secretario Redacción. Diario La Opinión

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