Por REDACCION
Muchos sueñan con autos veloces, lujosos o clásicos y carísimos, pero Momir Bojic, de Bosnia, no. El es muchísimo más original que todo eso y decidió arreglarlo a su gusto y por su cuenta.
Momir Bojic es el nombre de este hombre de 71 años que está retirado pero tenía un sueño, una ambición de toda su vida.
Desde lejos, luce como un Volkswagen Beetle normal… de los que siempre te podés haber encontrado por ahí.
Pero cuando hacés zoom o te acercás descubrís el "secreto" en su “pintura”: Más de 50 mil diminutas piezas de madera de roble. Bojic estuvo haciendo este acabado único durante más de dos años. Incluso su gorra es de madera.
Para este bosnio, la paciencia es, sin duda, una de sus mayores virtudes. Cada diminuta pieza de roble toma múltiples y cuidadosos pasos para ser fabricada e instalada.
Momir conduce por diferentes países con mucho orgullo. Cuida a su creación con muchísima devoción.
El Volkswagen Beetle dejó de fabricarse a nivel mundial en el año 2003, por lo que son cada vez más exclusivos y apreciados.
Este auto único tiene un volante de madera, un tablero de madera, su cuerpo está completamente cubierto de piezas de madera y también luce unos radiantes rines de madera. Las miles de piezas de madera le dan un aire de piel de reptil que vuelve loco a cualquiera que se cruce en su camino.
Momir sabía que su sueño no era fácil de conseguir, así que trabajó incansablemente durante dos años hasta lograr esta belleza. Hay personas y autos fuera de serie. Momir y su singular Volkswagen Beetle son la prueba de ello, y brillan con luz propia por donde quiera que pasan.
Fuente: Reddit
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